X
AVISO:Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar la experiencia de navegaciÛn, y ofrecer contenidos y publicidad de interÈs.
Al continuar navegando entendemos que aceptas el uso de cookies. M·s informaciÛn.

logo indiemoviez
mahotsukai

Críticas de mahotsukai

Ordenar

Carlitos y Snoopy: La Película de Peanuts Carlitos y Snoopy: La Película de Peanuts 30-03-2016
compartir

Los descendientes de Charles Schulz, creador de Snoopy & Charlie Brown, decidieron rendirle un sentido homenaje en el aniversario 65° del lanzamiento de la tira cómica, y para ello producen y guionizan la reciente versión animada del simpático can y su poco afortunado amo.

Charlie Brown se siente fuertemente atraído por la nueva alumna de su escuela, una niña pelírroja, pero no tiene las agallas suficientes siquiera para hablarle. Intentando impresionarla, ayudado por Snoopy, se meterá en más de un problema, pasará más de una vergüenza, pero al final comprenderá que la clave del éxito es ser simplemente como es.

Una película que va definitivamente en contracorriente con los tiempos actuales, simplemente porque es muy honesta y respetuosa de su esencia y su legado. A diferencia de otras películas dirigidas a público infantil, que sienten la necesidad de ser aceptada por más de un tipo de público, recurriendo a todo tipo de recursos, que a veces resultan contrapruducente, “Peanuts” apuesta por el humor blanco e inocente que lo llevó a conquistar al público a partir de los 50s, sin temor en fracasar. Es cierto que en ello se agarra de la nostalgia, especialmente del público infantil de aquel tiempo que ahora está al borde de los 40s años o más, sin embargo no pierde ese aire mágico que los niños de entre 5 y 10 años suelen encontrar en los personajes de Schulz.

La historia es simple y directa, y puede encontrar en el público infantil no sólo una identificación de juegos y travesuras, sino aquella en la que niños y niñas comparten sentimientos, a todas luces, inocentes y tiernos. Ello puede cansar, no cabe duda, por eso es importante ver la película con una actitud infantil.

Pero no por ello no se va a reconocer que la película tiene un trabajo técnico de animación realmente destacable y disfrutable, que saca partido a los colores pasteles y que respeta el cómic original.

Sin ser uno de mis cómics y caricaturas favoritas, reconozco que la película tiene la honestidad y respeto por su pasado y logra seducir a los nostálgicos y al nuevo público infantil.


Lecciones Inolvidables Lecciones Inolvidables 29-03-2016
compartir

Inspirador film sobre un profesor de matemáticas que logra vencer la apatía, hostilidad y auto-condescendencia obvia de un grupo de jóvenes latinos segregados y marginados en el Estados Unidos de los 80s, que deben luchar contra la discriminación racial y escolar.

Basada en una historia real, el film presenta una historia dinámica y absorbente, logrando atrapar al espectador desde el principio, y generando que éste sienta simpatía por estos chicos que deben luchar contra dos grandes monstruos: primero, contra su propia autoestima y segundo, contra la discriminación de los demás.

De esta forma, conforme avanza el film, y viendo los logros que alcanzan de la mano del peculiar profesor Escalante, interpretado magistralmente por Edward James Olmos (con nominación al Óscar al mejor actor en 1988, incluida), cambian progresivamente de actitud y logran romper los límites que se han autoimpuesto, hasta alcanzar el éxito y vencer la discriminación e injusticia social.

Una película totalmente inspiradora, que cala hondo en el espectador y lo invita a reflexionar sobre la discriminación racial en las grandes potencias económicas, como Estados Unidos, una vez más, un país forjado con inmigrantes que discrimina a otros que viajan en busca del ¨sueño americano¨. De la misma forma, refleja la lucha de pandillas y la típica apatía juvenil por un sistema que los discrimina, segrega y condena a no tener no más que las herramientas básicas para sobrevivir.

Un film sin pretensiones comerciales, que lamentablemente no es muy conocida.


Karate Kid III: El Desafío Final Karate Kid III: El Desafío Final 14-03-2016
compartir

3era parte y final de la Saga de “Karate Kid”, notoriamente inferior a dos predecesoras y que da cuenta de una franquicia ya desgastada, con pocas ideas originales, muy predecible.

Esta vez, Daniel Larusso, que viene de Okinawa con el señor Miyagi, está deprimido porque Kumiko prefiere optar por una vacante laboral que venirse con él a Estados Unidos. Miyagi no lo hace nada mal, ay que ha perdido su trabajo, por lo que Larusso decide sacar sus ahorros y comprar una vieja tienda, remodelarla y reabrirla para la otra pasión de Miyagi: el Bonsai. El problema es que un rencoroso Kreese se alía con un millonario amigo suyo, Terry, para recuperar su prestigio y acabar con la dupla Miyagi-Larusso, sin más.

El guionista Roberto Mark Kamen demuestra en este film ya no tener ninguna idea original para sustentar una tercera parte, a todas luces, innecesaria y forzada, tratando de encontrar en el pasado ideas que funcionaron con relativo éxito e intentando crear situaciones aún más inverosímiles. Y es que Kamen y John G. Avildsen (ganador del Oscar a la mejor película y dirección con la monumental “Rocky”, 1976, increíblemente) al parecer sintieron que debían cerrar el ciclo de “Karate Kid”, ya sea para tratar de consolidar la carrera de Ralph Macchio (que nunca fue), dejar descansar a Pat Morita y ganar unos billetes más, explotando algo que estaba ya terminado desde hacía rato.

Como es común en los guiones de “Karate Kid”, el guión trata de “alimentarse” de la “maldad” de sus villanos. Para ello, resucitan a un Kreese en plena ruina económica por su conducta agresiva, lo que le ha llevado a perder a sus alumnos y el dojo que administraba. Recurre a un ex compañero militar en Vietnam, Silver, que es millonario, y éste le ofrece su ayuda sin más. Le comprará 20 dojos para que administre (con suerte puede con uno) y le ayudará a corromper a Larusso y distanciarlo de Miyagi. ¿Por qué tanto cariño a Kreese? Porque le habría salvado la vida en Vietnam. Entonces, para empezar, tenemos un “venganza” digna de las más perverse de las telenovelas mexicanas como vehículo para la última versión de “Karate Kid”.

En cuanto a Larusso y Miyagi, la película intenta hacer madurar la relación entre ambos, situándolos en un conflicto maestro-alumno, que no se había visto hasta ahora, pero no lo hace bien. Un sobreactuado Macchio parece un adolescente irascible que vive diciendo que “todo es su culpa”, sin aprender de sus errores y tratando de responsabilizar a Miyagi de sus dudas de campeón. El japonés no quiere entrenarlo, porque cree que Daniel ha perdido el rumbo y se ha convertido en alguien que es todo menos el alumno que él entrenó. La sensación de automolestia consigo de Larusso se refleja en que ésta vez la chica que le gusta lo frena y le dice que quiere ser sólo su amiga, que desplanta el bonsái que Miyagi tanto ha cuidado en una ladera de un acantilado y que su maestro no quiere entrenarlo, recurriendo a Silver.

Las escenas del enfrentamiento por el título, nuevamente, nos ponen a un Larusso que increíblemente vence a su rival, un chico que durante toda la película le da clases de karate a patada limpia, y una vez más, fracturado y moreteado, se alza con la victoria. ¿Les suena a algo?, claro, la primera parte, copiada sin el menor de los ascos. Uno hecho inverosímil es la tremenda cantidad de faltas de Mike en contra de Larusso durante el combate por el campeonato y la no descalificación definitiva del alumno de los Cobra Kai Dojos.

Esta vez, las actuaciones sí que son flojas. Macchio, que había mejorado en la segunda entrega y había mostrado mayor afiato con Pat Morita, se ve agotado de interpretar a Daniel Larusso, muy estático, lento y predecible en sus golpes, lo que le resta credibilidad para coronarse campeón de karate, sin más. Pat Morita está correcto como en toda la saga, proporcionando experiencia y haciendo lo que sabe hacer, enseñar. En uno de los pocos momentos reflexivos de la película, Morita hace una alegoría entre el bonsái y su pupilo, que encuentra en su interior el motivo para crecer pero que también es reflejo de la formación que ha hecho del muchacho, cortando sus ramas cuando ha sido necesario para que se convierta en lo que debe ser. Martin Kove sigue siendo Kreese, que esta vez está opacado (y tiene bastante menos presencia) por Thomas Ian Griffith como Terry Silver, el millonario amigo de Kreese que se ofrece sin más para amargarle la vida a Larusso y Miyagi. Griffith, hay que reconocer, le da cierta frescura a la villanía, que tuvo en Sean Kanan, interpretando a Mike Barnes, a un flojo villano adolescente, lejos de los dos anterior. Robyn Lively como Jessica es prácticamente la única actriz del reparto, en un papel muy, pero muy secundario.

Ni la música de Bill Conti, que también se escucha repetitica aporta a una película que fue nominada en 1989 a 5 Premios Raspberry, entre ellas, a peor película, peor director, peor guión y peores actor principal y de reparto. Sin comentarios.


Karate Kid II, La Historia Continúa Karate Kid II, La Historia Continúa 14-03-2016
compartir

Correcta secuela de ¨Karate Kid¨ (1984) que mejora en cuanto al guión, con una historia más compleja e interesante, pero que sigue siendo evidentemente una película para adolescentes en pleno despertar amoroso y que sufren bullying por parte de algún matón de barrio.

Esta vez, la historia se traslada a Okinawa, cuando el Señor Miyagi debe viajar a Japón al ser informado de que su padre está a punto de fallecer. Sin embargo, no es tan simple para Miyagi ya que volver a Japón significará también revivir viejos fantasmas del pasado asociados a su ex mejor amigo de la adolescencia y un amor que no pudo ser. Daniel Larusso lo acompañará en esta aventura y aprenderá un poco más sobre su maestro y el karate.

Ya había comentado en la crítica a ¨Karate Kid¨ (1984) que ya viéndola de adulto evidentemente no me había provocado el interés que en su momento me produjo, y que afloraban mucho los sentimientos de nostalgia al visionar esta saga. En honor a la verdad, como ya mencioné, la historia mejora bastante y decididamente fue un acierto trasladar la trama a Japón, aunque como era de esperar tenemos toda esa estúpida impronta pro-yanqui y que yo nunca entendí (hasta que mis profesores de japonés me explicaron que los japoneses sienten respeto y agradecimiento por Estados Unidos por haberlos sacado de la época feudal, aunque eso hubiese sido por medio de un holocausto nuclear) en donde tenemos a Larusso bailando rock and roll con Kumiko en un reflejo del interés japonés por la cultura occidental (y que muchas veces, es casi crónico y obsesivo), o la insinuación de que Miyagi ganó una medalla de honor peleando por el ejército estadounidense en lugar del japonés.

Con todo la película empieza bien, con una escena que muchos hubiésemos querido ver en el final de ¨Karate Kid¨ (1984) y que es cuando Miyagi le da su merecido al matón de Kreese, después de que éste golpeara a sus alumnos por no ganarle a Larusso. Mejor se pone cuando Miyagi y Larusso se van a Japón, pero comienza a decaer de a poco cuando nos presentan a los villanos, que la verdad tienen una cuestionable credibilidad como villanos. Sato y su sobrino Chozen comienzan a ganarse paulatinamente la antipatía del espectador, pero en especial Chozen, cuya actitud agresiva contra Larusso viene como muestra de esa parte del Japón que no siente simpatía por la cultura occidental y defiende lo propio. Destacar que el director se centra en una rivalidad cultural y no romántica (como en la precuela) lo que otorga un aspecto más serio a esta secuela. Se agradece. Pero como decía, hay otro villano y éste es Sato, un villano que tiene motivos para rivalizar con Miyagi, ya que éste último le había echado a perder su boda, cuando Miyagi declaró su amor a la novia. Para sorpresa de Miyagi, al volver a Japón y encontrarse con Yukie, su amor eterno, se da cuenta que ésta sigue soltera. Es decir, nadie hizo nada por cambiar el presente de entonces, en donde el concepto del respeto es importante para el japonés, inentendible para nosotros quizás. En fin, así fueron las cosas, los tres quedaron solterones.

Conforme avanza la trama, la película empieza a degenerar un poco, debatiéndose entre el inevitable encuentro a muerte entre Sato y Miyagi y la rivalidad Larusso-Chozen, en que un evento fortuito de la naturaleza hace que Sato recapacite y renueve su amistad con Miyagi (después de ser un villano realmente malo, arrasando los cultivos de Miyagi, echando abajo la infraestructura pública del poblado con una retroexcavadora, etc., ese nivel de petulancia) pero que carece un tanto de credibilidad porque tiene un giro muy simple a finiquitar el conflicto Sato-Miyagi. Sin embargo, como era de esperar, no podemos irnos sin ver el esperado enfrentamiento Larusso-Chozen, que como es de esperar, Larusso gana.

Evidentemente también tenemos que asimilar que los japoneses puedan hablar inglés (o español, dependiendo el caso) o que Larusso habla japonés y por eso tenemos esta dinámica interacción lingüística entre Daniel y sus nuevos amigos y rivales japoneses, al igual que Miyagi con sus co-terráneos, que hablan en inglés entre ellos. Ya sé que por motivos prácticos es así, pero honestamente le quita credibilidad.

Sin embargo, cabe destacar la inclusión de variadas tradiciones japonesas en el film, como la de colocar lámparas flotantes en una laguna cuando alguien fallece, o la ceremonia del té, una acto que tiene un tremendo valor cultural y de amistad, ya que es un verdadero ¨regalo¨ que el anfitrión realiza a sus invitados y que refleja el aprecio que los une; o el Festival O-Bon, en donde se ve parte de las danzas tradicionales del Japón.

Las actuaciones están bien, destacando un mejor afiatamiento de la dupla Morita-Macchio, que establecen una relación muy en la onda de padre-hijo, en donde el personaje de Larusso quiere retribuir lo hecho por Miyagi al entrenarlo, acompañándolo al inminente funeral de su padre y el duelo con Sato. Tengo que reconocerlo, porque honestamente me desespera el ñoño de Larusso y su invencible performance final, con el pie quebrado supuestamente y venciendo a rivales que están mejor preparados que él. Danny Kamekona y Yuji Okumoto son buenos villanos, pero insisto, sus papeles están demasiado estereotipados y sus inclusiones son resueltas de una forma muy simple.

Para terminar, destacar la música, a cargo de Bill Conti, el legendario creador de la música de la Saga de Rocky Balboa, que le pone su toque paternal a la música (reminiscencia a la relación de Mickey y Rocky) y también un éxito romántico de Peter Cetera, ¨Glory of Love¨, del vocalista de ¨Chicago¨.

En resumen, se deja ver y entretiene más que su precuela, mejora en cuanto a consistencia y demuestra mayor madurez como producto cinematográfico.


Solo en Casa 2: Perdido en Nueva York Solo en Casa 2: Perdido en Nueva York 11-02-2016
compartir

John Hughes y Chris Columbus, tras el éxito de “Mi Pobre Angelito”, repiten la fórmula de la precuela para traer esta inferior pero cumplidora segunda parte de las aventuras de Kevin McCallister, quien nuevamente se pierde en la víspera del viaje familiar de Navidad, esta vez, confundiendo el destino para terminar en Nueva York, mientras su familia completa se dirige a Miami.

Uno de los grandes dilemas que enfrentan los productores y directores de algún éxito cinematográfico, en especial en el género de comedia, es cómo realizar una segunda parte, que sea al menos igual de exitosa a su predecesora. La gran mayoría decide no arriesgarse y apuesta por la fórmula probada. Lo cierto es que no siempre funciona y en gran medida es porque dentro de la repetición de la fórmula, debe haber ciertos elementos originales que no sólo la distingan de la precuela, sino que inyecten frescura y originalidad.

En el caso de “Mi Pobre Angelito 2” el objetivo de entretener y conmover se cumple, hay que decirlo, aunque en menor grado acá, porque se mantiene la premisa de que el muchacho aprenderá a valorar a su familia (ya lo había hecho al final de la precuela, pero al comienzo de esta entrega, parece habérsele olvidado) y viceversa, cuando se queda solo nuevamente enfrentado a un aventura que no pidió tener, y arreglándose como puede y con lo que puede. Con todo, esta vez, queda la sensación que la Navidad no es más que un evento que parece “trastornar” a la sociedad estadounidense, en el sentido de poner a la gente en una “sintonía y armonía” prácticamente irrisoria, en una suerte de excusa para someter a una familia a un ejercicio de valoración mutua. Y es que a juzgar por los hechos, los McCallister vuelven a aparecer como una familia caótica e irritante, empezando por sus insufribles cabezas de familia, Kate y Peter McCallister, que nunca asumen la metida de pata de dejar a su hijo olvidado 2 veces, con la excusa que la familia es demasiado grande y que no pueden con todos. En fin, si no fuera así, no habría película, dirán algunos.

Lo cierto es que Hughes decide dividir la tensión de las aventuras de Kevin, enfrentándolo con dos tipos de antagonistas: el recepcionista jefe del lujoso hotel en donde se queda y el reecuentro con la dupla de ladrones a los que venció y encarceló en la precuela. De esta forma, en ambos casos, los mejores momentos de la película comienzan con las artimañas que Kevin realiza para librarse de los funcionarios del hotel a los que ha engañado después de darse la buena vida a costa de la tarjeta de crédito de su padre, que se llevó por accidente. Después de ello, hace la mitad de la película, recién Kevin tendrá que hacer frente a los antiguos rivales, y para ello utilizará la casa abandonada de su tío (al que iban a visitar en París, en la precuela) para tenderles todo tipo de trampas, con menor gracia que en la primera película, pero que siguen la misma fórmula. Esos son los mejores momentos de la película, y uno se pregunta porque se demoraron tanto en llevar la historia a ese punto, porque está más que claro que lo que la gente quiere es ver cómo Kevin se las ingenia para librarse y llevar a los ladrones a caer en manos de la policía.

Como es de esperar, hay varios momentos de incongruencia en el guión, como por ejemplo, cómo el Peter McCalister logra pagar 14 boletos aéreos de Miami a Nueva York para encontrar a Kevin si todo el dinero y tarjetas de créditos que tiene se los entregó a Kevin; cómo Kevin no grita de sobremanera en la calle para que la gente o la policía lo ayuden a liberarse de los ladrones (siendo que éstos son prófugos y están siendo buscados); o cómo el dueño de la juguetería Duncan sabe cuántos son los McCallister y donde están cuando al final envía regalos para ellos al hotel. En fin, detalles que están ahí.

Se le reconoce a la película ahondar más en temas reflexivos como la solidaridad con causas sociales como los niños huérfanos que viven hospitales estatales y nuevamente el prejuicio hacia aquellos que han optado por una vida solitaria y en la calle, en el personaje de la mujer que tras una desilusión amorosa, se dedida a cuidar y alimentar palomas.

En resumen, una película que entretiene, pero que es inferior a su predecesora, y que anuncia ya que la historia está finiquitada y agotada, por lo que las 2 secuelas que vienen (y que no cuentan con Macaulay Culkin como protagonista) resultan innecesarias. La evalúo con un 6.5.


El Peque se Va de Marcha El Peque se Va de Marcha 08-02-2016
compartir

En la tradición de “The Breakfast Club” (1985), la saga “Home Alone” (“Mi pobre angelito”, 1990, 1992, 1997) y “Beethoven” (1992), llega esta simpática comedia familiar de manos del productor John Hughes, en la que un ingenioso bebé logra arreglárselas para mantenerse alejado de sus tres torpes secuestradores, a medida que se pierde en la jungla urbana.

Con un guión efectivo a cargo del propio Hughes, la película sigue la premisa de lo imposible en pos de la risa y convierte un hecho delictual aparentemente muy fácil de llevarse a cabo en un verdadero entuerto para la policía, un calvario para sus padres y una pesadilla para sus ingenuos e idiotas secuestradores. Y a pesar de que podría haberse concentrado más bien en las sensaciones parentales, lo que la hubiese vuelto más bien en un drama, la película logra un equilibrio narrativo interesante al exponer la angustia de los padres, en especial de la madre, el remordimiento por esa molesta manía de exponer a los bebés en páginas de semanarios de la alta sociedad y el rol de la niñera, que muchas veces, entrega más amor a los niños que cuidan que la propia madre.

Evidentemente, la historia es inverosímil, con un bebé que va de aquí para allá, en un autobús, en un taxi, en un coche, compartiendo con un gorila y paseando peligrosamente sobre los fierros de un edificio en altura, sin que nadie se dé cuenta de ello, así como el inicio del entuerto, como si fuera tan fácil secuestrar a un bebé millonario.

Sin embargo, como toda comedia, la película sustenta su solidez en la química lograda entre Joe Mantegna, Joe Pantoliano y Brian Haley como villanos es uno de los puntos a destacar, principalmente por la forma que tiene de meterse en cada problema y sus fallidos intentos por salir del presente embrollo, para meterse en uno peor. Hay escenas realmente graciosas que quedan en la retina, como en la que el bebé incendia los testículos de Eddie en el parque, la paliza que el gorila del zoológico les da a los tres y la persecución en el edificio en construcción. Bebé Bink (interpretado por los gemelos Adam y Jacob Worton) tiene un carisma a pesar de su corta edad que lo hace simpatizar con el público, que no olvida que es tierno pero travieso, que no sólo se entretiene saliendo ileso y volviendo locos a sus captores, sino que además se dá el lujo de llevar a la policía con los secuestradores, para que los metan tras las rojas.

En resumen, una comedia entretenida, liviana y simpática, recomendable para ver con tus hijos, en familia, pero no está al nivel de ¨Mi pobre angelito¨.


Don Juan Demarco Don Juan Demarco 03-02-2016
compartir

Pretenciosa película romántica que reúne a Johnny Depp y al mítico Marlon Brando, en plena decadencia de su carrera, lejos de las grandiosas interpretaciones que tuvo en “El Padrino” (1972) y “Apocalypsis Now” (1979).

El Dr. Jack Mickler, prestigioso siquiatra fiscal, está a punto de retirarse, cuando se le asigna el caso de un joven suicida que vestido con atuendos del siglo XVII, dice ser Don Juan Demarco, el mejor amante del mundo, con más de 1.500 conquistas. A medida que va conociendo el caso, Mickler encontrará en la fantasía de su paciente el sentido del amor y una oportunidad para incluso mejorar su vida matrimonial.

Una película con una historia que puedes amar u odiar, sin términos medios. En mi opinión, a ciencia cierta, deambula entre lo fantástico, la comedia romántica, la capa y espada e, incluso, la telenovela mexicana, sin ser decididamente nada, lo que hace que esté en un constante tambaleo narrativo, especialmente por su pretencioso afán de enseñar sobre el amor. Además, de cierta arrogancia en pretender que el público crea que es normal que un tipo se pasee con ropa de otra época sin siquiera cuestionárselo, y más que las mujeres son tan fáciles de llevar a la cama porque le digan “qué hermosos ojos tienes”. Ridiculeces como éstas atentan contra la lógica del guión pero tampoco podemos decir que existen otros elementos narrativos que sustituyan esa falta de coherencia como la ironía, como momentos realmente cómicos o diálogos con trasfondo.

Producida por Francis Ford Coppola, la película tiene elementos técnicos que cumplen sin más ni menos, no estamos hablando de la genial fotografía y dirección artística a la que nos tiene acostumbrados el legendario director de la Saga de “El Padrino” (1972, 1974, 1990), “Apocalypsis Now” (1979) y “Bram Stocker’s Dracula” (1994). En ese sentido, las aventuras de Don Juan en el México del siglo XVII, en el Sultanato de Marruecos, etc., no pasan de ser buenos escenarios y escenas.

Uno de los elementos que destacan dentro de lo plano que es este film es la música, compuesta por Michael Kamen y Robert Lange, interpretada en la principal canción original por el rockero canadiense Bryan Adams y el guitarrista flamenco Paco de Lucía. La melodía es bella, pero tiene pocas variedades armónicas en la película, lo que hace que al final se vuelva excesivamente repetitiva. Comentar que el trabajo musical estuvo nominado al Óscar, al Grammy y a los Globos de Oro.

Finalmente, señalar que la presencia de Marlon Brando me provoca sentimientos muy contrariados. Por un parte, su presencia es lo único que mantiene, hasta cierto punto, a flote este film, en conjunto con el trabajo de un joven y poco multifacético Johnny Depp, pero al mismo tiempo no dejo de percibir una aire a caricatura que el propio Brando hace de si mismo. No lo digo solamente por su evidente mal estado físico, sino porque por momentos, mientras observa a Depp hablándole, pareciera preguntarse a si mismo, “¿qué estoy haciendo aquí?”. Cuesta asumir ver a Brando en ese nivel. Lamentable.


Arrancame la Vida Arrancame la Vida 02-02-2016
compartir

Gran drama mexicano basado en la novela homónima de la escritora Ángeles Mastretta de 1985.

La historia se sitúa en el México de los años 30s, en la una adolescente Catalina Guzmán es ¨forzada¨ a casarse con el tiránico y machista general Andrés Ascencio. En un principio, el carácter brutal de Ascencio se complementará con el de rebeldía y frescura de la joven, pero poco a poco Catalina se dará cuenta que lo que los unía no era más el deseo. Mientras el inescrupuloso Ascencio escala posiciones llegando a ser Gobernador del Estado de Puebla y serio candidato a la Presidencia de la República, Catalina adoptará una postura fuertemente de contraparte, reprochándole a Ascencio sus abusos. En una aventura con el joven músico idealista Carlos Vives, que aboga por la salida de los caciques políticos, entre ellos Andrés Ascencio, y que le significará la muerte al músico, Catalina se enfrentará con el odio que ha desarrollado por marido, Andrés Ascencio.

Una historia de época, que dicen está muy pegada a la historia de Mastretta -tengo pendiente leer la novela- en la que podemos ver cómo el ímpetu de la juventud puede llevarnos por caminos de los que a veces podemos renegar. Más aún, este film es un retrato de una de las sociedades más machistas, en tiempos incluso más machistas que los actuales, en los que abundaban los caciques rurales, que disponían qué hacer sin preguntarle a los demás si estaban de acuerdo. Son tiempos posteriores a la revolución mexicana, en los que ya los mexicanos se preguntaban si había valido la pena tanta sangre.

La ambientación está muy lograda, destacando los hermosos paisajes mexicanos así como los hermosos edificios y casas en los que vivían y se divertían los poderosos de entonces. También nos muestran la miseria de los más oprimidos y cómo se vive la ley del más duro.

La música constituye un elemento de valor agregado, no sólo por la inclusión de un personaje que es músico y cuya relación con la música pone a disposición del romance, un romance imposible, rebelde.

Las actuaciones son bastante buenas, con una Ana Claudia Talancón como Catalina, de buena interpretación, bella y fresca; José María de Tavira como Carlos Vives, el galán idealista que saca a Claudia de ese infierno que es estar casada con Ascencio, pero claramente el que se lleva los aplausos es Daniel Giménez Cacho como el General Ascencio, un tipo déspota, asesino, inescrupuloso, machista e intolerante. Cabe destacar que el español Giménez Cacho es uno de los mejores actores en México de los últimos 20 años, que ha brillado en otras películas mexicanas como ¨El Callejón de los Milagros¨ y ¨El Infierno¨. Sus papeles de villano son realmente destacables.

Totalmente recomendable.


007: El Hombre de la Pistola de Oro 007: El Hombre de la Pistola de Oro 02-02-2016
compartir

Irregular film de acción con el legendario agente británico James Bond, que no es santo de mi devoción, porque al menos el clásico Bond es un tipo machista, ególotra y hasta misógino. Debo reconocer que fue más bien mi aprecio por el legendario Christopher Lee el que me llevo a verla.

La trama nos lleva a Bond que esta vez debe lidiar con un elegante villano, Francisco Scaramanga, quien fue contratado por Hai Fat, un empresario tailandés para matar a Gibson, un científico que diseñó un dispositivo capaz de convertir la luz del sol en energía para así acabar con la crisis de los hidrocarburos que controla el mafioso asiático. En el entretanto, Bond seducirá a cuanta mujer se le cruce para conseguir sus propósitos hasta que se enfrente al final con el frío Scaramanga.

Sin ser una película destacable y teniendo varias situaciones ridículas, la película no es aburrida, en realidad y en gran medida es por Christopher Lee, quien a pesar de no tener la mejor de sus actuaciones, sí le otorga al personaje de Scaramanga elegancia y simpatía. Pero hay que reconocer que el guión le resta maldad a Scaramanga, y al final lo reduce a un villano fanfarrón, que cae ante Bond de la forma más ridícula y predecible. Dentro de todo, Lee dignifica al villano durante la mayor parte del metraje, pero de seguro no quedó conforme con la forma en que su personaje termina.

Decía yo que Scaramanga provoca simpatía, incluso más que Roger Moore, quien no me hizo sentir simpatía para nada, con este tipo egocéntrico, extremadamente machista y misógino que sólo utiliza a las mujeres y a las cuáles prácticamente dice ¨tendrás el privilegio de acostarte conmigo¨. Más patán que el propio Scaramanga, que es el villano de turno. Aún así hay patanes que tienen carisma, pero este Bond de Moore no lo tiene.

Siguiendo con las actuaciones, Hervé Villechaize (Nick Nack) es un buen secundario y le otorga un aire de dupla freak al par Scaramanga-Nack (un Lee de casi dos metros de alto y Villechaize de 1,22 cms) Las mujeres Bond, para variar, sólo aportan su belleza, siendo dominadas y abusadas tanto por el villano como por Bond, utilizadas sólo para fines sexuales. La bella sueca Britt Ekland como Mary Goodnight, no aporta mucho en cuanto a un personaje interesante, aportando sólo su físico y confirmando la premisa machista de las que rubias son tontas. El hecho de que active el dispositivo de luz solar con su trasero accidentalmente, es muy decidor.

El ritmo de la película es correcto en general, pero hay escenas realmente ridículas. Una de ellas es con Moore haciendo de ¨Jackie Chan de yeso¨, tieso, un verdadero tronco practicando artes marciales, nadie le cree que con movimientos tan lentos y tontos pueda derrotar a expertos chinos. Otra es la pareja de escolares chinas que acaban con un contingente de más de 20 expertos chinos...ridículo, absurdo. Si la intención era hacer reír, no lo logra. Por otra parte, la escena en que Bond se hace pasar por Scaramanga ante Hai Fat es ridícula, ¿cómo puede Bond creer que un mafioso de esa calaña no conozca a Scaramanga y lo acepte sin que llegue sin ningún tipo de guardaespalda? Y para terminar, a un Nick Nack que es más hábil de el propio Bond, interpretado por el entrañable Hervé Villechaize, conocido como Tatoo en ¨La Isla de la Fantasía¨.

En contraparte, hay algunas escenas simpáticas y buenas como el auto que se transforma en avión de Scaramanga, que lo supone como un villano con tecnología de punta (para esa época) así como el salto imposible del vehículo de Bond por un puente destruido. La escena en que Scaramanga destruye el avión de Bond es genial, de verdad, la disfruté.

En definitiva, salvable sólo por el maestro Christopher Lee.

El final me decepcionó, aunque de primeras ya sabes que el pedante de Bond matará a Scaramanga, uno espera que el personaje de Lee le dé más batalla. Supongo que se impone la oda a Bond.


Los Burdeles De Paprika Los Burdeles De Paprika 02-02-2016
compartir

Uno de los grandes filmes eróticos de Tinto Brass, director de la polémica ¨Calígula¨, un director que juega entre lo pornográfico y lo estético, logrando una mezcla interesante de erotismo.

La historia de Paprika es la de Mimmo, una bellísima y voluptuosa joven italiana (Caprioglio), que llega del campo a la ciudad a trabajar como prostituta por insistencia de su novio, quien necesita dinero para un proyecto laboral, aparte de querer casarse. En el camino, descubrirá que su novio tiene otras amantes, por lo que desilusionada de éste y ya convencida que le gusta su ¨nuevo trabajo¨, deambulará por los burdeles más importantes y prestigiosos de Italia debido a su incuestionables dotes amorosos, que la llevarán incluso a codearse con la nobleza italiana.

Decir que lo primero que uno piensa de una película de este tipo es que sólo tendremos un festín de tetas y culos por doquier sin más preámbulo ni mayor exigencia de comprensión por parte del público. Sin embargo, ¨Paprika¨ no es una cinta meramente erótica con mucho desnudo; es una película tragicómica, con un ritmo en general bastante bien llevado, que entretiene de diversas maneras.

La forma del erotismo -y creo que no corresponde decir pornografía, por cuanto no tenemos escenas de penetración, si bien hay vaginas y penes en pantalla- de Tinto Brass intenta, y lo logra varias veces, destacar la belleza del cuerpo femenino, pero también la obsesión del hombre por reducir la importancia de la mujer a lo físico, a un objeto sexual. Y en eso llega a ser descarado, por cuanto no hay realmente una reflexión sobre el cosificación de la mujer, pero sí tiene la capacidad de exponer un melodrama en la que su protagonista acepta lo que la vida le ha entregado para ser feliz.

De esta forma, desde diversos ángulos, Tinto Brass se concentra en destacar los innegables atributos de su musa, una tremenda Debora Caprioglio, que encanta no sólo por su innegable cuerpazo, sino también por una correcta interpretación, sin llegar a deslumbrar, de una chica provinciana que va perdiendo paulatinamente la inocencia, al desilusionarse y darse cuenta que le encanta el sexo. A través de Caprioglio, Tinto Brass expone una sexualidad desinhibida, una sexualidad juvenil sin límites, en la que no condena para nada la prostitución. Es más, la enseña como parte de la vida, una opción que a veces no es opción y que algunas mujeres terminan por adoptar como forma de vida, más por deseo que por necesidad. En cierta forma, la película expone un ¨viaje a la madurez¨ a partir de la pérdida de la inocencia.

Los aspectos técnicos de la película; la ambientación urbana a fines de los 20s en una Italia que comenzaba a coquetear con el fascismo, la fotografía, y los diversos ángulos de los encuentros sexuales de Paprika son correctos, en los que Brass, muchas veces, impone una estética visual erótica. Hay un trabajo visual interesante, con el juego de luz y sombra sobre los cuerpos femeninos desnudos, la insinuación a veces por sobre el desnudo a través del vestuario, etc.

Sin embargo, los diálogos no son del todo destacables y digo esto porque esto es más que una película erótica, ya que tiene un melodrama de fondo. La música condimenta bien la trama, con momentos de humor y drama.

Las actuaciones, en general, están bien, destacando como ya dije Caprioglio además la fila de clientes de la chica, todos tipos degenerados, lascivos y en un estado elemental humano por el sexo realmente gracioso, mostrando que los hombres, a la hora del sexo, podemos llegar a compararnos con animales furiosos.


Chicken Run: Evasión en la Granja Chicken Run: Evasión en la Granja 25-01-2016
compartir

Primera y efectiva incursión de los Estudios Aarman Animations, creadores de los espléndidos y premiados “Wallace & Grommit” “Shaun, the sheep”, que presenta la historia de un grupo de gallinas liderado por Ginger, quienes ante la evidencia de terminar trituradas en una máquina de pasteles de pollo, deciden escapar, con ayuda de un torpe gallo, Rocky.

Con una historia simple, los oscarizados directores Peter Lord y Nick Park adentran al público en una simpática aventura en una granja, en donde un grupo de gallinas viven el día a día sometidas a la rutina de poner huevos. Como en otras ocasiones, tenemos un grupo de animales que ven pasar su vida sin mayores sobresaltos (sin saber que les espera la muerte a manos del hombre como alimento) y es uno de ellos, que el guión humaniza como un líder natural, el o la que saca al grupo de este letargo existencialista, en este caso, para salvar la vida de todos. Porque queramos o no, le película es simple en su trama pero tiene uno que otro trasfondo sobre cómo ver pasar la vida, intentar cambiar tu destino y cómo manejar el proceso que nos lleva a ese cambio, en el caso que hayamos decidido hacer algo al respecto.

Ambientada en algún momento de los 60s en una tétrica comarca inglesa, Ginger y sus congéneres son utilizadas por el matrimonio Tweedy para entablar una pequeña industria de huevos, pero cuando las gallinas no producen, son sacrificadas. Cuando la malvada Sra. Tweedy decide “cambiar de rubro”, pasar a elaborar pasteles de pollo, Ginger se da cuenta que urge que escapen, ya que el objetivo es convertirlas a todas en budín. La ambientación tanto física como psicológica de la granja sugiere un verdadero campo de concentración así que la actitud de la administradora, una tirana mujer, apenas acompañada por su ultrasumiso esposo.

Hay un elemento de romance en la trama que involucrará a Ginger con el gallo Rocky, el típico fanfarrón que alardea y seduce, que cuando es descubierto, abandona, pero que cuando llega el momento de mostrar virilidad, resurge de las cenizas de la decepción, diría yo, para ayudar a resolver el entuerto. Es el caso del gran escape de las gallinas, ayudadas por Rocky, un escape a todas luces enredado pero efectivo al final de cuentas, que no deja de tener elemento algo violentos pero que son reales. El final, predecible, es de cualquier forma lo que todos esperamos de esta simpática aventura animal, que no deja de entregar valores como la perseverancia, el trabajo en equipo y la lealtad.

Decir de los aspectos técnicos que Aardman muestra tener la calidad y experticia para trabajar el stop-motion, con una muy buena calidad, que perfeccionaría posteriormente con sus tremendas animaciones en “Wallace & Grommit”: The Curse of Were-rabbit” (2005) ganadora del Óscar a la mejor película de animación y luego la espléndida “Shaun, the sheep” (2015). El éxito y la calidad del trabajo de los estudios británicos demuestran que la gente gusta y valora todo el esfuerzo que existe detrás de la animación de figuras de plastilina o arcilla, así como su correctísimo uso de colores vivos y oscuros para graficar diferentes estados de ánimo.

En resumen, una película disfrutable y entretenida.


Garganta Profunda Garganta Profunda 08-01-2016
compartir

Legendario film pornográfico cuya reputación se debe más que nada a la controversia generada cuando pasó de la clandestinidad a los cines comerciales, principalmente los intentos de la administración Nixon de censurarla.

“Deep Throat” trata de una hermosa joven, Linda, quien tiene problemas para sentir orgasmos. Su madre, Helen, una mujer promiscua a más no poder, intenta ayudar a su hija, contratando unos desconocidos para una orgía. Al no dar resultados, la madre se acuerda del Dr. Young, un sexólogo con “curiosos” tratamientos médicos, quien diagnóstica a Linda que el problema se debe a que en lugar de tener el clítoris en la vagina, lo tiene en el fondo de la garganta. Como es de esperar, el médico inicia el tratamiento por su cuenta.

Una película con una historia descabellada, un guión evidentemente pobre y la excusa de poner a Linda Lovelace como suprema catedrática del felatio es la que nos trae el pornógrafo Gerard Damiano, que debido a su trama tiene elementos eminentemente cómicos, por lo que el film no resulta del todo aburrido y hasta tiene algunos elementos argumentativos (muy pocos, he de decir) que conviene detallar.

En primer lugar, tenemos la propuesta de mujeres que buscan placer sexual y que defienden su derecho al orgasmo, un elemento que es poco común de ver, en especial cuando la cultura machista ha insistido en la utilización de la mujer como objeto. De hecho, la película abre con Helen, la madre de Linda, recibiendo cunnilingus de parte de un desconocido, y prosigue con la orgía que organiza Helen. En consecuencia, tenemos mujeres que buscan sexo, lo disfrutan y esta vez utilizan a los hombres para su satisfacción. Bien por ellas, que también tienen derecho a tomar la iniciativa.

Otro elemento que conviene destacar más adelante es el hecho de que al final Linda encuentre el amor, a pesar de que éste no cumpla con el tamaño para asegurar los orgasmos orales de Linda. Para todo hay solución, menos la muerte, y el Dr. Young aporta con una extensión de pene.

Con una generosa exposición de penetraciones varias, la historia gira para centrarse en la novedad de que Linda tiene el clítoris en el fondo de la garganta y que sólo tragando el pene completo de sus parejas sexuales, logrará excitarse. Independiente si te guste o no ver porno, hay que reconocer que en la práctica no existe desarrollo argumentativo del tema central y, como ya dije, la idea no es más que mostrar a Linda Lovelace practicando felación en más de la mitad de la película.

Las actuaciones son malísimas como es común en este tipo de películas, pero aun así destacan los protagonistas. Linda Lovelace, carismática y bella es la estrella principal, sin duda, y la secunda Harry Reems, quien interpretó al locuaz Dr. Young. Para la anécdota, decir que en el marco de la campaña de censura del Gobierno, lograron meter a la cárcel a Reems, quien había sido contratado como asistente de iluminación y ante el abandono del actor protagónico, aceptó tomar su lugar por la miserable paga de 100 dólares. Claro, la felación que recibió por parte de Linda, de seguro le resultó mejor paga.

La música es aberrante, mala, cansina, sin más. El pobre montaje de la película, con esas escenas de cohetes y fuegos artificiales en el momento que Linda alcanza orgasmos, ahora resulta absurdo, pero de seguro en su época más de alguna carcajada o risa sacó.

Linda Lovelace se convirtió en una estrella de la industria, pero a juzgar por sus propias declaraciones, no lo pasó bien ni en la filmación de la película ni en su vida. Lovelace se había casado con el pornógrafo Charles “Chuck” Traynor, quien aparte de violentarla, la prostituyó y utilizó en la pornografía hasta que se cansó en 1974, cuando la actriz logró divorciarse. Si bien la actriz dice no haber recibido un peso por la película, Traynor sí ganó un buen dinero como productor de la misma. Linda señaló que literalmente hizo la película con una pistola en la cabeza, y terminaría paradójicamente a su imagen de ícono porno, encabezando cruzadas en contra de la explotación de mujeres en la industria pornográfica.

En resumen, una película claramente pobre en términos de guión, actuaciones y mensaje, pero a la que hay que reconocerle que irrumpió en su época de forma contundente para marcar los fundamentos de la industria de cine para adultos, con una descabellada trama. Mi valoración es como película, ya que este tipo de cine evidentemente tiene adeptos y detractores, en especial por la forma en que se expone a la mujer en el sexo.


Un Padre en Apuros Un Padre en Apuros 16-12-2015
compartir

Ingenuo pero entrañable film navideño protagonizado por Arnold Schwarzenegger, en la que el musculoso actor deja de lado las balas y las explosiones, por un rato, para personificar a Howard Langston, un trabajólico y despreocupado padre de familia, que tras defraudar a su hijo, se compromete a ayudar a ¨Santa Claus¨ (en ¨Viejo Pascuero¨, acá en Chile) y conseguir el juguete de moda y que es el objeto de deseo de u hijo también. Entre medio de situaciones caóticas unas tras otras, el pobre de Howard, no sólo tendrá que lidiar con la desesperada búsqueda del juguete, sino con los intentos de su insoportable vecino, Ted, por seducir a su esposa, sino con algunas situaciones que rozan lo ilegal.

No cabe duda que ésta es una de las películas más irregulares, ingenuas y cuestionables, en términos de actuación, de Schwarzenegger, quien al igual que su archirrival Silvester Stallone, en su momento, sucumbe ante la tentación de hacer comedia, con resultados algo dispares. Sin embargo, el guión de la película, con sus varias imperfecciones, no deja de ser entretenido e incluso moralizante, ya que adopta una serie de aspectos dignos de ser destacados.

En primer lugar, la película ahonda bastante en la fiebre comercial de la Navidad, en la que la gente se olvida del real significado de la festividad, y en donde no es extraño ver hordas y hordas de personas ¨saqueando¨ prácticamente las jugueterías, con la premisa que la común falta de atención que le han dado a sus hijos durante el año puede remediarse con el cumplimiento del anhelo de sus hijos de recibir el juguete que pidieron a Santa Claus. En ese sentido, la desesperación de Howard y del cómico cartero Myron es un reflejo de lo equivocados que están los padres de llenar vacíos de atención con juguetes. Es más, la ¨reflexión¨ de Myron de que él es un perdedor porque su padre no consiguió el juguete cuando era un niño, es otro mensaje que el personaje de Howard debe procesar.

Agregar además, que este problema es transversal a las clases sociales, y el director lo presenta al mostrar a Howard, un gerente comercial, y Myron, un cartero, en la que desgracia de haber olvidado comprar el mentado juguete a tiempo elimina las barreras socioeconómicas y los une, aunque ellos no lo quieren, en la misma desgracia.

En segundo lugar, tenemos toda la parafernalia navideña, y esa mezcla que inevitablemente se hace entre la hipocresía de una sociedad consumista y la del buen vecino, en donde el personaje de Ted es el típico fanfarrón y petulante vecino que gusta de llenarse de halagos y seducir mujeres, con las típicas artimañas de preparar galletas navideñas, alumbrar las casas y árboles navideños, y los infaltables villancicos. Claro, Howard también su cuota de responsabilidad al descuidar a su mujer, pero no deja de ser detestable que siempre hay personajes como Ted, verdaderos buitres.

En tercer lugar, tenemos un aspecto que no es del todo abordado, que parece más bien anecdótico, como es la piratería de juguetes. Howard, en su desesperación, acude al mercado negro en donde lo estafan con 300 dólares por una copia pirata de Turboman, y en una trifulca, la policía encauta toneladas de juguetes piratas. Un problema que tiene que ver el abuso de las grandes fábricas de juguetes en cuanto a los precios, la accesibilidad a ellos de los grupos menos pudientes y la facilidad y bajo precio de los mismos.

Con todo, esta es una comedia al fin de cuentas y los aspectos moralizantes son vistos de forma amena, en general, con buenas dosis de humor, aunque algunas poco convincentes, como la escena de amenaza de bomba, que denota policías estúpidos, la golpiza de Howard al cabrón venado de Ted, o la inverosímil escena final en la que lucha, vestido como Turboman, con Myron, vestido de villano, por el mentado juguete. En fin, pueden pasar por alto, pero están ahí.

Justamente, en la escena final, se puede apreciar que la película no envejeció bien en este aspecto: los efectos especiales son cuestionables al paso del tiempo, se ven los cables y los cuadros de fondo en especial en las últimas escenas. De cualquier forma, no deja de ser simpáticos.

Las actuaciones, buenas y malas, son lo mejor. Schwarzenegger, en una de sus peores actuaciones, está súper ¨empaquetado¨, aunque decir que el papel fue una tortura para él sería exagerar, le faltó soltarse más; el lunático Myron, encarnado por Sinbad aporta con buenos momentos de humor, en especial en su monólogo sobre el consumismo y la Navidad, cuando conoce a Howard; el insoportable Ted interpretado por Phil Hartman está convincente, recuerda un poco a Ned Flanders de ¨The Simpsons¨; Rita Wilson pudo haber tenido un papel más importante como la esposa de Howard, Liz, debería haber habido mayor cuestionamiento de la madre de Jamie; y Jake Lloyd como Jamie, el hijo de Howard, que tuvo un desempeño aceptable (comentar que posteriormente, sería Anakin Skywalker en la vapuleada ¨Star Wars I: The Phantom Menace).

Como anécdota, un cameo a Paul Wight, conocido en el mundo de la lucha libre, la WWF, como ¨Big Show¨, que aparece como un Santa Claus gigante, que se agarra a golpes con Howard en la escena de la fábrica de juguetes piratas; y a Curtis Armstrong, el legendario ¨Booger¨ de ¨The Revenge of Nerds¨ (1984) como la mascota que acompaña a Turboman.

En definitiva, una película que vi de adolescente, que encontré entretenida en su momento, pero que ahora, ya con otros ojos, no niego que le guardo cierto cariño y que valoro la crítica que hace, pero que es bastante ingenua. Un 6.5.


El Bulto El Bulto 09-12-2015
compartir

Desaprovechada idea es la que Gabriel Retes expone en este film de 1992, en pleno boom del ¨Nuevo Cine Mexicano¨, en la que el mismo director interpreta a un periodista, Lauro, que producto de un golpe en una protesta de estudiantes en 1971, queda en estado de coma, despertando 20 años después, con una realidad totalmente distinta a la que debe acostumbrarse.

¿Por qué digo ¨desaprovechada idea¨? Porque lo es.

La película tiene una trama interesante cuando nos ponen a este periodista hippie, idealista, comunista, que sufre un atentado que lo manda a dormir por 20 años, tiempo en el que las cosas evidentemente cambian y que para Lauro se traduce en un conflicto existencial de proporciones gigantescas, porque es inevitable que se sienta fuera de tiempo (literalmente), fuera de contexto, en una sociedad que abandonó los ideales de libertad y justicia para convertirse en una sociedad moderna pero capitalista, con un control evidente de los medios de comunicación, en donde todos, de manera condescendiente, están resignados al consumismo, el bienestar económico de algunos en desmedro de la justicia social y el cuestionamiento de todos esos aspectos sociales que han cambiado en la mayoría de la psique de las personas.

Pero no sólo se trata de eso. Lauro debe lidiar no sólo con todo este entuerto filosófico-político, sino también con los cambios de su propia familia. Se encontrará con que su mujer rehizo su vida con otro hombre, que la pequeña hija que dejó en los 70s ya es una mujer y que tiene otro hijo, que no había nacido aún cuando él quedó en coma. Hay entonces, una referencia fuerte al conflicto generacional.

Pero toda la impotencia y frustración de este choque lo ciega y hace que adopte las típicas malas costumbres que los machistas sacan a relucir, mostrando una gran ingratitud hacia su familia, que aunque cambiada, lo cuidó durante 20 años y que descartaron desconectarlo de la máquina respiradora.

Hasta acá todo iba bien, Retes muestra el impacto y las consecuencias de los conflictos existenciales y generacional, pero conforme avanza la trama, el ritmo de la película decae y termina, con un final absolutamente predecible y poco original como era la trama misma, degenerando en una seudo comedia familiar, en que todo se arregla con un festín, con una celebración, y en la que se olvida de cuajo todo ese rollo filosófico interesante con que inicia la trama. Estamos claros que no podemos ensombrecernos en ello, que la película debe salir hacia un aire positivo, pero claramente era necesario hacerlo de una forma más estructurada y no reducir el guión a la simpleza misma.

De la misma forma, el director parece pisarse la lengua al reducir ese idealismo a un conformismo que es producto de una época, y algo que podemos ver hoy día con los mal llamados ¨gobiernos de izquierda¨ cuyo líderes pregonan la igualdad y el bienestar social con un Lexus en la puerta de la casa y un rollex en la mano izquierda. De esta forma, este intento de crítica social se reduce a un manifiesto como ¨Al principio es un México insoportable y difícil de creer, pero al final, es un México aceptable, abierto y franco, con esperanza de aprender de sus errores y crecer¨.

Los personajes, sin embargo, en líneas generales no están del todo bien construidos. Lauro, Gabriel Retes, es idealista y machista al mismo tiempo, algo que contradice esa naturaleza, el idealismo postula un mundo igual para todos, hombre y mujeres con los mismos derechos; Adela, interpretada por la también directora y actriz María del Pozo pasa de ser la entusiasta amiga de la hija de Lauro, contestataria, segura de sí misma a un caricatura de mujer que cede ante un machista discapacitado, que la trata de todo menos de mujer valiosa, pero con el cuál al final se queda; Cecilia Camacho como Valeria y Juan Claudio Retes como Daniel, son quizás lo mejor y lo más convincente de la película, mostrando madurez para ser tan jóvenes (personajes y actores), enseñándole al personaje de Lauro a ser el padre que nunca pudo ser/o de plano que nunca fue. Los demás personajes, prescindibles.

En resumen, un film pasable, que sin embargo degenera de la crítica social a una comedia familiar con una idea original desaprovechada.


La vida es bella La vida es bella 24-11-2015
compartir

Conmovedora y justamente galardonada cinta de Roberto Benigni que consiguió tres Premios Oscar en 1997, entre ellos Mejor Película Extranjera, Mejor Actor (Benigni) y Mejor Banda Sonora (Nicola Piovani), entre los 50 premios internacionales con los que se quedó.

La película está ambientada en 1939, en pleno ascenso del Fascismo en Italia y cuenta la conmovedora cruzada de un padre italiano de origen judío por proteger emocional y físicamente a su pequeño hijo Joshua mientras son internados en un campo de concentración en Italia. Dentro del horror de la guerra, el racismo y la depravación moral de los campos de exterminio, Guido logrará salvar a su hijo y a su esposa del cruel destino que le esperaban.

Una historia conmovedora desde cualquier punto de vista, y que cala aún más hondo en quienes tenemos la maravillosa oportunidad de tener hijos y vivir en un mundo relativamente ¨tranquilo¨ (sin guerras mundiales, quiero decir, hasta ahora), pero en el cuál estamos dispuestos a ponerlos ante todo, independiente de lo que nos toque vivir.

Y en ese sentido, el guión de este film es bastante inteligente, humano y simple en su concepción, en el que Benigni nos lleva desde una simpática y liviana comedia, con un simpático y locuaz Guido deteniéndose en las cosas simples de la vida, la risa, la alegría de vivir a pesar de la adversidad, el galanteo y la perseverancia para conquistar a Dora; pasando por la formación de su familia, hasta llegar al horror de la guerra y la separación en el campo de concentración, en donde la película deja su veta de comedia para ser un film altamente dramático pero que no cae en lo cursilería barata ni mucho menos.

Ciertamente la película tiene algunos detalles que parecieran no corresponder al horror que supone estar encerrado en un campo de exterminio nazi, como por el ejemplo el hecho de que nadie advierta de la presencia de Joshua, o que en ningún momento se vean episodios de violencia física en contra de los prisioneros y que de plano se nos presente el brutal desenlace del film; o los constantes actos de recordatorio de amor de Guido a Dora, sin poder verla, no llevan a una suerte de entorno un tanto romántico (en el sentido de idealista, claro) en el que se desarrolla la desgracia. No obstante, ello no atenta de manera decidida en la percepción positiva que el film marca en el espectador.

Los personajes cuentan con una muy buena estructura, sin caer en el detalle excesivo, pero haciendo que el espectador se sienta interesado por ellos. En primer lugar, Guido, un tipo jovial, desfachatado, con muchas ganas de vivir, romántico, detallista, testarudo, pícaro y bondadoso que corteja y logra enamorar a Dora, una mujer cariñosa y con vocación educativa, hija de una familia adinerada que renuncia a su posición social para estar con Guido y finalmente Joshua, un adorable muchacho de 4 años, curioso, inteligente y admirador de su padre, que a lo postre es quien se sacrifica por él y le permite contar esta hermosa historia. Los secundarios que completan el elenco representan de buena forma una serie de valores negativos como la indiferencia del médico alemán que presuntamente iba a ayudar a Guido a salir del campo, el desprecio y discriminación de la madre de Dora por Guido al ser éste modesto y descendiente de judíos y el estúpido y frívolo fascista Rodolfo que era prometido de Dora.

Sin embargo, dentro de toda esta vorágine de sentimientos y valores no cabe la menor duda que destaca la actitud de Guido respecto al impacto que el horror de la guerra y los campos de concentración pudieran hacer en un inocente niño de 4 años. Así es como Guido durante todo el segmento del film que se centra en la desgracia de la guerra, se esforzará y logrará, vaya que no, en proteger a su hijo, emocional y físicamente poniendo a disposición del destino su propia vida. Y ése es el gran mérito de este film.

Todo el trabajo técnico, la recreación de la Italia fascista, las plazas, los locales comerciales y la campiña italiana así como el campo de concentración están bien recreados, así como el vestuario.

La música, que fue premiada, es un canto a la vida, un reflejo del mensaje de Benigni y por ello fue ampliamente premiada, entre ellos, con el Oscar a la mejor banda sonora.

Para terminar, decir que creo que es increíble, por decir lo menos, que haya gente que se ofenda con la forma en que se aborda el tema de la guerra y los campos de concentración en este film. Realmente creo que hay gente que realmente no comprendió el trasfondo de este film y de forma bastante simple y antojadiza denostó una película cuyo mensaje de amor de un padre a su hijo, su sacrificio emocional (porque vaya que hay que ser valiente para ocultar la verdad a tu hijo y no derrumbarte) y físico para que éste pudiera salvarse y continuar con vida, junto a su madre. El hecho de que esta historia se base en un episodio real del padre de Benigni en un campo de concentración en Bergen-Belsen (Alemania) lo hace algo mucho más conmovedor y humano. Nadie puede ofenderse por tocar el tema desde la perspectiva de un padre, mucho menos cuando nadie se ofende que hoy día se niegue el holocausto judío y todos los horrores de la guerra. Por suerte, y ello es prueba de justicia, es una ínfima minoría la que opina así.

Realmente me tocó muy adentro, la recomiendo ampliamente, le doy un 9.5


Mujeres Infieles Mujeres Infieles 04-11-2015
compartir

Correcto drama del cineasta chileno Rodrigo Ortúzar, estrenado en 2004, que narra diversas historias de infidelidad relacionadas, donde supuestamente son las mujeres ¨las responsables¨, pero que conlleva a una reflexión más bien social, sobre el machismo, el engaño y la traición, la resignación matrimonial, la satisfacción sexual, el orgasmo y la experimentación.

La película inicia con la pugna profesional entre los periodistas y conductores del más exitoso noticiero en Chile, Cecilia Ureta y Mario Guzmán, que se refleja en una entrevista televisiva a la sexóloga Eva Soler, a propósito de una encuesta que revela que el 62% de las mujeres chilenas es o ha sido infiel. Ante la tensión, Ureta, que es una estrella en el canal, pide al productor que saque a Guzmán del aire, y lo envíe a hacer notas a la calle, para degradarlo. Por esas curiosidades de la vida, Guzmán reporteará un incendio en un motel, en donde encuentran muerto al máximo ejecutivo del canal, Alberto Valdés y herida, a su amante, Cecilia Ureta. Guzmán, entonces, aprovecha la situación para vengarse de Ureta y exponerla al escarnio público.

En líneas generales, estamos ante una correcta película, sin mayores pretensiones que exponer el tema de la infidelidad, que en Chile, muchos se han atrevido a decir que ¨es deporte nacional¨. Y en ello, entrará en vigor lo que cada uno opine de la infidelidad, por lo que los juicios de valor están siempre ahí en películas como éstas. No faltará entonces, aquel que critique la infidelidad femenina y defienda la masculina, por un asunto de machismo; o aquel que defienda la femenina y critique la masculina, al contrario, el feminismo; o aquel que condene la infidelidad en cualquiera de sus variantes; y finalmente, aquel al que le parezca divertido y hasta se sienta identificado y se lo tome de una forma más liviana. Sea como sea, hay mucho de hipocresía y doble estándar tanto en los que condenan como en los que defienden la infidelidad. Todo, mientras sea yo quien ¨ponga los cuernos¨ y no se ¨el cornudo¨.

De cualquier forma, Ortúzar pretende poner el tema en la palestra y verlo desde diferentes perspectivas. Que la película se llame ¨Mujeres Infieles¨ es en sí una sátira, puesto que el director no utiliza una perspectiva machista del asunto, condenando la infidelidad femenina sino que aboga por el factor ¨responsabilidad compartida¨, en la que las mujeres infieles sustentan sus infidelidades por perder la atención o el interés de sus esposos, o por la sobreconfianza de éstos en sus incursiones sexuales o simplemente porque son libres de tener una aventurilla amorosa por ahí.

La sociedad chilena, hay que decirlo, ha cambiado bastante en los últimos 25 años (después de la dictadura de Pinochet) en todos los aspectos, y dentro de éstos, la libertad de la mujer es un hito importante. En un país en el cuál había un machismo crónico, como en el resto de Latinoamérica, poco a poco la mujer ha ido ganando ¨libertades o derechos¨ que exigen ¨igualdad de condiciones¨ respecto a los hombres. Y aunque parezca raro, ello también se ha ¨trasladado¨ al campo de las relaciones de pareja. Así, si el chileno es infiel, casi ¨por naturaleza¨, ¿por qué la mujer no puede serlo?

No voy a hacer juicios de valor acá, porque cada uno opinará a su modo de ver las cosas y no es preciso comentarlo, pero sí conviene hacer referencia al intento de Ortúzar de ahondar en las consecuencias del acto infiel. Tenemos así, en la infidelidad de Cecilia Ureta y Alberto Valdés; por el lado de Cecilia, la destrucción de su matrimonio y la guerra legal que su esposo inicia por la custodia de la hija de ambos; y en el lado de la viuda de Valdés, Teresa Vial, una curiosa reacción, que tendrá explicación hacia el final del film, en la que la viuda restituye a la amante de su ex marido en el canal y sin rencores. En el caso de Álvaro, que descubre que su esposa Carola tiene un amante, que será su propio hijo Cristián, la destrucción de la relación padre-hijo; y en caso de la insatisfecha Cristina, que se involucra con la española Roberta, en una oda a ¨conozcámonos y experimentemos¨, por nombrar algunas. Y aquí entra también la aparición de dos ridiculizados ¨detectives pasionales¨, Vilches y Liberona, una pareja homosexual, por cierto, que se dedican a extorsionar a sus propios clientes, cuando la contra-parte investigada les encarga una contra-investigación para contraatacar a sus atacantes.

Sin embargo, si bien la intención es bastante buena, en especial poner la infidelidad como un acto transversalmente responsable a ambos géneros, en donde la sexóloga Soler destaca que ¨si hay 62% de mujeres infieles, es porque hay otros 62% de hombre infieles que complementan esa infidelidad¨, recalcando en las responsabilidades, la película no deja de caer en una suerte de condescendencia acerca del problema. Por lo tanto, su supuesto carácter reflexivo se apaga hacia el final cuando Ortúzar la reduce prácticamente a un rasgo de la naturaleza humana. Entonces, reconocerle que cumple con acabar con el mito casi exclusivo de las ¨mujeres infieles¨ como seres hipócritas, malagradecidas y lujuriosas, para denunciarlo como una práctica humana, pero decir que falla en su intento de reflexión sobre qué pasa cuando se es infiel y que le pasa al que sufre la infidelidad. Eso la vuelva al final, liviana.

A este hecho, hay que sumarle que la película no cuenta con grandes actuaciones, ni dramáticas ni tragicómicas (dicen que este film tiene naturaleza de tragicomedia, pero la verdad yo no le veo). Daniel Alcaíno (Guzmán) está desaprovechado como villano, pudiendo haber tenido su personaje una incursión más perversa y maquiavélica; María José Prieto (Ureta) se pasa más hospitalizada que nada, siendo por lo demás bastante frívola en su actuación, al igual de Viviana Rodríguez, que si bien ambas aportan con su belleza, en realidad no tienen una buena aparición; Benjamín Vicuña como Cristián no pasa de cumplir con su papel de ¨galán juvenil y seudo-alternativo¨ con un papel bastante patético, como el hijo que le pone los cuernos a su propio padre con su esposa; Aldo Parodi y Ramón Llao está ridiculizados y limitados a esta caricatura que se hace de ellos. Para terminar, Lucía Jiménez también queda caricaturizada como la típica europea que viene a ¨las Américas¨, prácticamente a enseñarle a ¨los nativos¨ a vivir el sexo en libertad.

En definitiva, una película para el rato, que cumple con lo justo.


Danzón Danzón 14-10-2015
compartir

La cineasta María Novaro trae este film bastante personal, diría yo, que forma parte del llamado ¨Nuevo Cine Mexicano¨, a comienzos de los 90s, y en donde propone una cosmovisión narrativa atípica para el machista cine mexicano, en el que esta vez es a través de una mujer que se puede advertir ese nueva veta realista del país del tequila.

En ella, Julia es una telefonista de la Ciudad de México, madre soltera, con una hija de 18 años, cuya aburrida vida gira en torno a tres pasiones: el trabajo, su hija y el danzón, un tipo de baile cubano creado hacia 1880 y que gozó de altísimo popularidad en México, en especial en la época dorada del cine mexicano, los 40s y 50s. Asidua a frecuentar el ¨Salón Colonial¨, en donde decenas de hombres y mujeres ya maduros, se reúnen para bailar danzón, no puede aceptar que su pareja de baile, Carmelo ha dejado de ir. Haciendo caso a rumores de que emigró a Veracruz, dejará botado el trabajo y a su hija para buscar a su pareja de baile.

¨Danzón¨ está dentro de las mejores 45 películas del cine mexicano, de acuerdo a la revista Somos en 1994, y su intención es decididamente buena, pero algo no terminó de cuajar en mi opinión. Reconozco y valoro la intención de romper con los cánones machistas imperantes, en la que podríamos advertir una ¨vuelta de mano¨ hacia el machismo, en la que los objetos no son las mujeres, sino los hombres. Los hombres van y vienen en la película, las mujeres permanecen. Y entonces, a esta búsqueda obsesiva y hasta exasperante que Julia inicia, dejando a su hija atrás, es reflejo de ello: primero, el famoso Carmelo, que a todo esto siempre estuvo en el D.F.; su efímero romance con el marino Rubén; su amistad con el travesti Susy, son reflejos de estas relaciones pasajeras que Julia pareciera necesitar para encontrarse a sí misma. Porque ésa es la verdadera intención del film, mostrar a una Julia que tras ir buscando a un hombre, no lo encuentra y a la que se encuentra es así misma. Pero honestamente, Novaro nos hubiese ahorrado dos horas interminables de ¨búsqueda personal¨ o ¨de un tercero¨, en la que Julia deambula por las calles, pensiones y el puerto de Veracruz.

Las actuaciones no son realmente destacadas, ni siquiera María Rojo, la protagonista de este film, quizás porque hay cierto dejo de filosofía que no termina de convencer en su personaje. Pero, destaco su condición de mujer ensimismada y normal, que al final sienta haber encontrado la verdadera esencia de su vida, lo que no me queda del todo claro si es el baile o qué. Los secundarios cumplen desempeñando el rol de vértices que tensionan o destensionan la trama, como el caso del travesti Susy, interpretado por Tito Vansconcelos y Doña Tí, la infaltable Carmen Salinas.

No niego que la película es en cierta medida una radiografía a la sociedad mexicana, y en especial, el papel del baile en las relaciones sociales. Muchas mujeres establecen relaciones de amistad y de pareja en torno al baile, al punto que algunos hombres, aquellos que no son realmente diestros en las artes de la danza, quedan postergados o simplemente no logran captar al menos la simpatía de las féminas. Ya sea como vehículo de liberación, ya sea como forma de interacción social, ya sea como forma de vida, el baile y, en concreto, el danzón, es expuesto como un elemento cotidiano y forjador de relaciones humanas.

Una lástima que el mensaje final no sea tan palpable, y que la idea feminista, con todo derecho, claro, no haya lamentablemente terminado por exponerse bien.


Cómodas mensualidades Cómodas mensualidades 09-10-2015
compartir

Yo no sé si soy yo o qué, pero lo cierto es que revisé este film por sugerencia de mi esposa (mexicana, a quien por cierto, tampoco convenció del todo), ya que supuestamente, estábamos frente a un film de humor negro e ironía a granel. De ésas que nos encantan, por cierto. Pero no. No pasó la prueba conmigo, al menos.

La trama nos cuenta las peripecias económicas que José Díaz, un joven contador, debe enfrentar para organizar su nueva vida conyugal y profesional, por consejo de su jefe, quien le prometió una promoción y por la cuál José se desvive.

Comienzan los 90s y se inicia el llamado ¨Nuevo Cine Mexicano¨, un movimiento cinematográfico que pretende llevar al público reflexiones sobre la realidad social del país, relegando la fantasía a la TV. En ese sentido, la película es un aporte porque intenta graficar la ¨mexicanidad¨, y eso, en la mayoría de los casos, sólo lo comprenden los mexicanos, o extranjeros, como yo, que vivieron varios años en México y tienen una familia mexicana.

Es innegable que la película tiene la intención de hacer una crítica social, en donde el ciudadano de clase baja-media, que aspira a tener una casa, una familia, un automóvil, debe recurrir al endeudamiento, a pagar todo en ¨cómodas mensualidades¨, el nombre del film por cierto, o cuotas. Pero ciertamente, creo que Pastor se perdió la oportunidad única de haber hecho de esta película una crítica ácida e incisiva de ello y sólo se queda en lo anecdótico, en lo irónico por encima. Y ése fue su pecado capital, en mi opinión.

No puedo dejar de ver que existe una suerte de condescendencia que algunos mexicanos, los más auto-críticos por cierto- denuncian y que es ésta actitud de ¨me están cagando y no hago nada al respecto¨. Para la gran mayoría, asimilar esto forma parte de la vida diaria y tienen dos caminos: o ¨hacerse los pendejos¨ como ellos dicen o alegar, pero al final no mover un dedo. De cualquier forma, este tipo de condescendencia no es sólo exclusiva de los mexicanos, sino de los pueblos latinoamericanos en general, entre los que no puedo obviar a Chile, mi país, que en esos años, por cierto, estaba experimentando un boom económico y de apertura post-dictadura, y vivía un proceso similar, aunque menos aceptado a la fuerza, como en México.

Bueno, volviendo al film, los diálogos no son del todo irónicos y reflexivos como pretenden hacernos creer los ¨intelectuales¨ que analizan socialmente esta película, y más parece un comedia bastante liviana, algo confusa por momentos, con actuaciones que sólo cumplen. Por otra parte, no puedo dejar de sentir que realmente no estoy frente a una película independiente, pensante, no me convence del todo.

Creo que Pastor no se atrevió a ser realmente ácido y falló en el intento. Para ver una sola vez.


American History X American History X 30-09-2015
compartir

Cruda y reflexiva visión de la violencia racial que azota no sólo a los Estados Unidos, sino a todo el mundo, que ha adquirido el estatus de film de culto como cinta de crítica social.

La película se centra en el regreso de Derek Vinyard, un joven skin head de ideología neonazi, que fue encarcelado por matar a dos hombres negros, después de que éstos intentaran robar su camioneta. Pero Derek ya no es el mismo, ha madurado y reflexionado sobre lo que ocurrió, y su misión es transformar a su hermano menor Daniel, quien siguiendo su ejemplo, ha degenerado en lo mismo que su hermano alguna vez fue, principalmente incitado por un inescrupuloso líder racista, Cameron.

Grabada en una destacada fotografía en blanco y negro, Tony Kaye nos presenta, como decía, una historia cruda, pero contada de forma muy inteligente en donde tenemos, por una parte, la exposición de una ideología extremista, que hay que decir está lejos de ser una mera postura intransigente, y que en los diálogos de Derek, refleja un pensamiento estructurado y reflexivo, si bien no compartamos. Pero, por otra parte, observamos cómo las crudas experiencias que Derek vivió en la cárcel le hicieron reflexionar profundamente en cuánto a su otrora ideología, los alcances de sus actos racistas, la relación con sus propios ¨compañeros raciales blancos¨, la utilización de la que fue objeto por un loco racista y la coexistencia con los negros, los latinos y los orientales, aquellos grupos que lamentablemente una parte importante de los estadounidenses consideran escoria social, pero que claramente les son útiles en una sociedad explotadora.

Y en ello, como película de crítica social funciona bastante bien sin ninguna duda. Respecto al primer punto, el de la exposición de la ideología neo-nazi, se expone de forma convincente y seria el manifiesto racista del ¨nosotros¨ vs. ¨ellos¨, que se ve fuertemente influenciado por el descontento social, por la distribución de ingresos y por el acceso a oportunidades. Y generalmente, los líderes racistas suelen estar en el momento y lugar precisos en donde los jóvenes, principalmente, están susceptibles de ser ¨abrazados y convencidos¨ y que sus temores y sus rabias tienen un fundamento, pero claramente los utilizan.

En relación al 2do punto, el personaje de Derek, muy bien interpretado por Edward Norton en esta ocasión, realiza un viaje al mismísimo infierno, la cárcel, para darse cuenta que fue la rabia por la muerte de su padre, y crudamente el efecto de la forma de pensar de su propio padre la que fue aprovechada por Cameron para ¨realizar limpieza racial¨ en su barrio, y luego en el condado, y luego en el Estado. Y en su regreso de la cárcel, Derek debe lidiar con la expectativa de sus amigos, que lo siguen considerando un ¨héroe racial¨, que no quieren aceptar que Derek ha cambiado y se ha reformado, pasando de ¨héroe a villano¨ con la enorme volatilidad y superficialidad con que estos grupos reflexionan sobre su ideología y sus actos racistas. Más aún, el film no recurre a lo cursi para demostrar esta madurez y reflexión en el pensamiento enfermo de un racista, ya que son los hechos los que sustentan esta reformación.

Pero todo no tendría sentido sin el personaje que encarna un correcto Edward Furlong, como Danny Vinyard, el hermano menor de Derek, que muestra la gestación en curso de un neo-nazi, evidentemente tomando la figura endiosada de su hermano como ¨defensor racial¨. En un papel que denota un momento clave como niño-adolescente, Furlong presenta un personaje inseguro y dubitativo, influenciado de muy mala manera por la otrora figura de su hermano y la de Cameron, pero que al final, en el respeto que siente por su hermano y su propio sentido común, lo llevan a hacer lo correcto. Avery Brooks como Dr. Robert ¨Bob¨ Sweeney; Elliott Gould como el frívolo Murray; y Stacy Keach como el loco Cameron completan una selección de buenos actores para este film.

Y como toda crítica social que se jacte de serlo, el drama al final del film, en el clímax, es reflejo de que este círculo vicioso descontento-rabia-racismo parece no tener fin, pero es también un recordatorio que la gestación de los violentos movimientos racistas están ahí, a la vuelta de la esquina, siempre latentes y alimentándose de la difícil realidad que las sociedades deben enfrentar.

Los recursos técnicos que Kaye utiliza para exponer la trama reflejan una variedad simbólica: blanco y negro para diferenciar a blancos y negros, cámara lenta y milimétrica para reflejar el impacto de la violencia y la búsqueda casi incansable de la tranquilidad y estabilidad mental; acercamiento a los rostros, concentrado en las miradas que reflejan seguridad/inseguridad, convencimiento/duda, rabia/reflexión, y flashbacks para buscar en el pasado las respuestas del presente.

En definitiva, un film realmente interesante que conviene siempre revisionar.


Rio Rio 28-09-2015
compartir

Entretenido film sobre un guacamayo macho que es secuestrado de la selva pero que por accidente cae en las manos de una niña en el frío estado de Minnesota. Pasan 15 años, y Linda y Blue, han cultivado una hermosa amistad, tranquilos y lejos de la selva amazónica. Pero un día, un ornitólogo brasileño viajará de Río de Janeiro a Minnesota para llevar a Blue a Brasil y poder cruzarlo con la única hembra de la especie que queda. En el entretanto, los dos guacamayos son secuestrados, dando inicio al drama de la búsqueda.

Un film que he visto cien veces -y no exagero- ya es uno de los favoritos de mi hijo de 5 años, y que constituye un buen ejemplo de una propuesta familiar, entretenida, con un mensaje positivo de autoconfianza, amistad, lealtad y trabajo en equipo. De la misma forma, y no es menor, hay un claro mensaje a respetar la naturaleza en todas sus manifestaciones y la libertad.

La animación es de muy buena calidad, teniendo como mayor mérito la inteligente manera de combinar los colores, para resaltar la belleza de los plumajes de las aves, los paisajes amazónicos y la parafernalia carnavalera de Río de Janeiro. Evidentemente, los personajes están absolutamente humanizados y hasta cierto punto estereotipados y ridicularizados, lo que hace que te preguntes qué hizo que un director brasileño critique de manera burda las manías de su país, que para los más críticos, se reducen a una obsesión enfermiza por el fútbol y la baile callejero. Otro aspecto que ridiculiza, en pos de la risa asegurada, es el papel de ornitólogo, un tipo realmente elemental.

Sin embargo, a diferencia de otros films familiares, tiene algunos altibajos y momentos realmente cursis como la infantil pelea de dos guacamayos que parecen adolescentes. De la misma forma, los aportes de los ¨amigos¨ brasileños de Blue no aportan mucho a la trama, a menos que nos refiramos a Rafael, el sabio tucán.

Me pasa con la música algo paradojal. En general, la manda sonora es agradable y simpática, pero también hay que decir que algunas canciones hacen que el reggaeton sea un género maestro en la música.

Con todo, entretiene bien.


El Gato con Botas El Gato con Botas 28-09-2015
compartir

Entretenido pero algo forzado spin-off del Gato con Botas, personaje emblemático de la Saga de Shreck en su versión hollywoodense, y un gran clásico recopilado por el famoso folclorista y cuentista francés Charles Perrault.

El Gato con Botas esta vez debe luchar con una paradoja: tratar de limpiar su nombre o ayudar a su ex amigo, Humpty Dumpy, quien en el pasado lo traicionó cuando lo involucró en un robo bancario, tras crecer en él la envidia y la codicia. Con la ayuda de una coqueta gatita, Kitty, patitas suaves, se aventurarán al reino de mamá gansa y los huevos de oro.

Con la franquicia de Shreck en decadencia, a partir de las 3er y 4ta película, Dreamworks intenta retomar el camino del éxito, sacando al Gato con Botas de los films originales y poniendolo en este film como protagonista indiscutido.

No cabe duda que la película es entretenida, cuenta con muchas escenas de acción, momentos de humor, buena música, momentos de humor negro, aunque también tiene momentos demasiado predecibles como es la figura villana de Humpty Dumpy, un personaje que para ser honesto fue bien tratado. Algo en su esencia intimida, reflejando un villano que reúne lo peor de los sentimientos humanos, la codicia, la ambición, la envidia, los celos, el egoísmo y la traición. Pero, evidentemente, el ¨respetable¨ espera que se redima para que pueda purificarse, tal como ocurre.

Básicamente, la historia jala con 3 personajes, a pesar de la aparición de Jack y Jill, una suerte de Bonny y Clyde del lejano oeste que en realidad no tienen mayor incidencia (más que la que descubriremos más adelante). Kitty Patitas suaves simboliza la tentación, la lujuria y la aventura, mientras que Humpty, como ya dije, todo lo negativo, aunque también la inteligencia puesta al servicio de un objetivo. El Gato, entre tanto, simboliza la ilusión de la justicia y el establecimiento del orden.

Bastante entretenida.


Karate Kid Karate Kid 11-09-2015
compartir

Emblemático film ochentero que en su momento se convirtió en un clásico automático, pero que ya viendo 30 años después ya no parece tan genial e imprescindible.

Daniel Larusso es el típico adolescente que sufre bulling en el colegio, tras mudarse a Los Ángeles, por razones laborales de su madre. En gran medida, los abusos que sufre se debe a que se le ocurre meterse con la ex novia de un matón de barrio. Cansado de ser golpeado, pedirá ayuda a entrañable viejecito japonés que las oficia de plomero en la nueva comunidad en la que vive, pero que en realidad es un experto en artes marciales.

Hay que reconocer que esta película tiene el mérito de entregar valores importantes como es la confianza en sí mismo, el control sobre las emociones y el respeto por ser y dejar ser. Es una película de acción con valores, claro está, pero también es cierto que no deja de ser la típica película de un adolescente que compite con otro por una chica, en una guerra de hormonas en la que meten el deporte como excusa para que se den hasta por debajo de la lengua.

Algo que no juega a favor es que extremadamente predecible: ya sabemos que el muchacho aprenderá karate, le dará su merecido al fanfarrón y se quedará con la chica. Demasiado predecible para más de 120 minutos de metraje. Puede que de niño te convenza pero ya de adulto, se te hace eterna. Por lo demás, la escena final en la competencia de karate es inverosímil, con un Larusso fracturado, pero que sigue peleando y al final gana con la famosa patada de ¨la grulla¨.

Actuaciones correctas pero no espectaculares, nuevamente son los villanos los que destacan, y hasta cierto punto, Martin Kove como Kreese, el mató profesor de Johnny, éste último interpretado por William Zabka, el mayor antagonista de Daniel. Pat Morita, el entrañable y venerable señor Miyagi, evidentemente, es todo un clásico.

La apruebo más que nada por la sensación que me dejó en la infancia.


El Padrino III El Padrino III 09-09-2015
compartir

Correcto cierre para la mejor trilogía de la historia del cine, que si bien es cierto no tiene la grandeza de las dos primeras, en especial la segunda parte, constituye un buen ejemplo de lo que es hacer cine de calidad.

Michael Corleone, ya cansado de llevar las riendas de los negocios ilegales de su familia, intenta redimirse y para ello, se asocia al Vaticano, del que siempre ha habido claras pruebas de toda clase de turbiedad a lo largo de la historia del Cristianismo. A medida que aumenta su angustia por seguir en este mundo de traición, dinero y poder, se desespera al no encontrar recambio en sus propios hijos, principalmente en Tony, quien prefiere ser tenor que abogado y apoyar a su padre en los negocios familiares. Será cuando el hijo ilegítimo de su hermano Sonny, Vincent, aparezca y se convierta en el mejor candidato para sucederlo.

Mucho menos acción que las otras dos partes, pero mucho más profunda en la reflexión de los actos de Michael Corleone nos trae esta tercera parte y final, de menor duración y con menos nombres estelares, centrándose principalmente en los roles de Pacino y García. Las comparaciones siempre han sido odiosas y eso Coppola debió haberlo tenido muy claro, por lo que debió estar consciente que dirigir la trama hacia este reflexionismo podría generar en el espectador una sensación de debilitamiento de la naturaleza accionaria del film, pero lo cierto es que Coppola no sólo se centra en el reflexionismo del personaje, sino que muestra la decadencia en estado puro.

Y ése es su principal mérito. La decadencia de Michael Corleone se grafica no sólo en un hombre avejentado, canoso y ojeroso, sino en un hombre que ya no tiene la implacabilidad que lo caracterizó en el pasado; que ya cansado de todo, empieza a cuestionarse si lo que hizo fue lo correcto, si haber puesto los intereses comerciales de la familia por sobre todo, por sobre su carrera profesional, sobre su esposa e incluso hijos, valió realmente la pena. Y esta decadencia se palpita cuando vemos que se va quedando solo, que no encuentra quien lo suceda. Pero el peor de los dramas viene cuando ya decidido a abandonar todo ese mundo podrido, el destino le cobrará la última pasada y lo terminará por destruir.

Aunque en esta ocasión no hay un duelo de interpretación con el gran Robert De Niro, Pacino demuestra nuevamente que es un tremendo actor, y tenemos una buena interpretación de Andy García, que le sirvió para consolidarse en Hollywood. Diane Keaton, Sofía Coppola y Talia Shire constituyen en correcta tríada femenina, que aportan diversas formas de drama: la primera, la esposa que a pesar de todo, sigue amando a su esposo y cree que siempre es tiempo para volver a intentarlo; la segunda, la chica rebelde que se enamora de su primo y que no acepta las interferencias de su padre; y la tercera, la única mujer Corleone con huevos, que finalmente comprende que esto de deshacerse de quienes estorban o son peligrosos, va en la sangre Corleone, porque es matar o morir.

Ambientada a fines de los 70s, evidentemente pierde todo ese encanto de las décadas pasadas, desde los inicios de Vito Corleone en la mafia hasta la sucesión de Michael en los negocios de la familia. Y es que parece ser que el deber familiar está por sobre todo, incluso por los planes que tenemos para el futuro.

En resumen, dirección y ritmo muy correctos, música brillante como siempre, correctas actuaciones -destacando Pacino- correctísima ambientación y locaciones, nos entregan un final dignísimo para la mejor de las trilogías.


La Oveja Shaun: La Película La Oveja Shaun: La Película 08-09-2015
compartir

Entretenida comedia animada que trae a los personajes de Aardman, Shaun, Timmy, Bitzer y el Granjero, en el que tendrán que lidiar con un accidente que hará que el Granjero pierda la memoria y se aleje de la granja, olvidando a su familia animal y un psicótico cazador de animales, que intentará cazar a Shaun, Timmy y todo el rebaño y encerrarlos en una verdadera cárcel de mascotas.

De los creadores de ¨Pollitos en Fuga¨ y la genial serie y películas de ¨Wallace & Grommit¨, ¨Shaun, the Sheep¨ constituye un excelente ejemplo de lo que es una historia que combina entretención, aventuras, humor blanco y la enseñanza de valores como la amistad, el trabajo en equipo y el poder de la familia como núcleo social básico.

La historia es súper entretenida, dinámica, sin mayores altibajos que los necesarios para moderar la velocidad de la trama, personajes muy definidos y empáticos así como los villanos, que lejos de generar odio, generan la expectativa del espectador de que le den una lección.

No obstante, el mayor mérito de esta película es la nula utilización de lenguaje verbal, recurriendo al gesto, a la inducción por parte del espectador, en donde el lenguaje corporal es fundamental. Otro gran mérito por cierto es la animación en stopmotion, un trabajo monumental por más que la edición final se haga por computadora, demuestra un trabajo pulcro y detallado de un equipo técnico comprometido con crear un película honesta, divertida y simpática.

Por otra parte, no es película exclusivamente para niños, ya que tiene algunos elementos importantes que pueden generar reflexión en los adultos como es la tenencia responsable de mascotas. Además, te permite como adulto jugar a ser niño y adulto a la vez, mientras la disfrutas con tus hijos.

Honestamente, no hay nada que criticarle.


Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Cachondo Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Cachondo 07-09-2015
compartir

3er intento, el primero con dibujos animados, después de las versiones ¨humanas¨ de los destartalados pero graciosos detectives Mortadelo y Filemón, tras ¨La gran aventura de Mortadelo y Filemón¨ (2003) y ¨Mortadelo y Filemón, Misión: salvar la Tierra¨ (2008)

La disparata trama se centra, obviamente, en los dos locuaces detectives de la T.I.A, que esta vez tienen que lidiar con el malvado Jimmy, el Cachondo y el musculoso y terrible Tronchamulas, que curiosamente son primos, en el que el primero es un sofisticado delincuente con tecnología de punta que quiere robar el secreto de la T.I.A y el segundo vengarse de Filemón, haciéndole el ¨aquello¨ por haberlo metido a la cárcel. Después de varios entuertos, nuestros héroes salvaran el secreto de la T.I.A y acabaran, como era de esperarse, con los malhechores.

En mi crítica de Mortadelo y Filemón. Misión: salvar la Tierra (2008), que por cierto despedacé sin asco, decía yo que le daba el beneficio de la duda al cómic. Y lo cierto que tras ver este film, debo hacer justicia a las aventuras de este dúo, que me hizo reír bastante esta vez, si bien encontré demasiado larga la película y algo forzados algunos momentos.

Y es que la película gana mucho cuando son los dibujos animados los que protagonizan este historia llena de golpe y porrazo, algo que con actores ¨humanos¨ pierde en demasía. Queda claro entonces que el slaptick, de este nivel, no puede ser mejor expuesto en algo que no sea animación, y en este caso, 3D. Ya sabemos que la esencia de Mortadelo y Filemón son la cantidad increíble de golpes, roturas de huesos y de dientes, moretones y raspaduras que principalmente sufre Filemón, a quien le pasa de todo. Además, la caracterización de los personajes es idéntica a la de los cómics, con las exageraciones físicas que todos sus personajes tienen. No entiendo por qué no se aventuraron primero con la animación y luego con la versión ¨de carne y hueso¨.

No hay que esperar mucho de la trama, porque es simple y como ya he destacado bastante, apela al golpe y porrazo, teniendo esta película momentos realmente graciosos como la persecución del Tronchamulas por la ciudad y ya el enfrentamiento final contra Jimmy, el Cachondo.

El trabajo de animación es de alta calidad, nada que envidiarle a los grandes trabajos de animación de Disney y el Anime japonés, haciendo que la película tenga varios momentos agradables.

Recomendable para una tarde en que no pretendas cranearte tanto una trama. Graciosa y efectiva.


Total de críticas: 198

Páginas de resultados:




Buscar película: Buscar

Busqueda avanzada

Pelculas ms buscadas
Taboo
Taboo
Taboo 2
Taboo 2
Niños Grandes 3
Niños Grandes 3

Cars 4
Cars 4
Project X 2
Project X 2
Ted 3
Ted 3

La Zona de Interés
La Zona de Interés
Kung Fu Panda 4
Kung Fu Panda 4
Taboo 3
Taboo 3


�Qui�nes somos? | Contacto | An�nciate en aBaNDoMoVieZ | �ltimas actualizaciones | Pol�tica de Privacidad / Cookies

home

Visita nuestras secciones:

Pel�culas de Terror | Mejores Pel�culas de Terror | Mejores Pel�culas | Estrenos 2013 | Estrenos DVD | Estrenos BLU RAY | Bandas Sonoras

Pel�culas en televisi�n | Circuitos de Puntuaciones | Trailers | Clips | Series | Cortos | Asesinos | Libros | Juegos | Festivales

Taquilla Espa�a, USA, M�xico, Argentina | Quiz Abandomoviez | Concursos | Fanter Film Festival | Horror Movies

El copyright de los posters, im�genes, trailers y clips que se incluyen en este portal pertenece a los respectivos
autores, productoras, distribuidoras y sites enlazados. Todos los derechos reservados. 2002-2024
aBaNDoMoVieZ � CIF/NIF: 76026608Q