Película que parte de una miniserie de seis capítulos, que se editaron en tres películas (Supergiant el invencible, Supergiant ataca los platillos volantes... y esta).
Si la miramos desde otra perspectiva diremos que este filme es ver a un ridiculo hombre envuelto en plateado con una ridícula antenita dándose palizas con un sin fin de extraterrestres vestidos como militares navales... Y en realidad es eso, efectos malos de la época y efectos de retroceso de la cinta una y otra vez durante las peleas.
Ahora si la miramos en una perspectiva menos prejuiciosa considerando que esto es de 1964, donde no podemos pretender efectos de hoy, ni guiones trabajadísimos si no dejarse llevar y verla con amigos para reír un rato... ahí creo que no esta mal, sobretodo la pelea final que es para reirselo todo.
Quizás un pequeño peldaño de la fantaciencia japonesa, o quizás para muchos, un truño envejecido... Es depende del lado que uno lo quiera ver, por mi parte me divertí viendo a este ¨ supergiant¨ revoleando maniquíes por toda la escenografía espacial.
Críticas: 2
bigladiesman
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Super Giant o Starman o Superman japo o como carajo queráis llamarle cabalga de nuevo, esta vez contra otro grupo de gamberros interestelares: la Banda Negra, o los Superiones según la versión Manley. Se trata de unos inconfundibles neonazis con sus uniformes de oficial alemán de opereta y sus saludos romanos. Pero ya pueden ir pavoneándose, ya, que Starman es un pragmático que tanto se lía a hostias con ellos como les quita las armas y reparte plomo a dos manos o le mete un mísil atómico por el culo a un maloso (lo escribo totalmente en serio).
Otra película con reparto repetido y personal intercambiable. Se caracteriza por tener unos sets y FX ligeramente más atractivos que las anteriores entregas (siguen siendo cutrefactos en comparación con otros productos nipones de su época), pero la historia es mucho más divertida y parecida a los tokusatsu que conocimos allá a principios de los 90, a los Ultraman, Bioman, Winspector, Power Rangers (o los “Super Sentai” de la Toei) o VR Troopers (o los “Metal Hero”, también de la Toei).
Otro inclasificable subproducto de grandísimo interés para fans del tokusatsu: esto ya es un producto totalmente reconocible del género, pero aún le falta el colorido y brillantez técnica que mostraron los primeros productos cinematográficos (en la tele ya era otra cosa más, eh… Económica) de este tipo de la Toho y la Toei a finales de los 50/principios de los 60.
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