Vamos a hablar de cine de terror, fantástico y de ficción protagonizado por criaturas de gran tamaño, de esas que se dedican a arrasar todo a su paso, ya sean fruto de experimentos fallidos, intencionados o por otros temas relacionados en los que el hombre casi siempre está presente para cagarla a base de bien.
Si os parece, vamos a dar un breve paseo por este monstruoso y maravilloso universo repasando un buen puñado de clásicos, haciendo especial hincapié en títulos asiáticos y homenajeando en cierta manera al director de uno de los monstruos más admirados de este panorama como fue, ha sido y será, Godzilla.
KING KONG (1933)

Uno de los seres más clásicos de la historia del cine fantástico. Este pobre simio gigantesco es apartado de su hábitat natural por la mano caprichosa del hombre.
Nadie puede olvidar su lucha encarnizada en lo alto del Empire State, mientras peleaba por volver a sostener en sus manos a esa delicada dama vestida en satén y propensa a los desmayos fáciles encarnada por Fay Wray.
EL MONSTRUO DE TIEMPOS REMOTOS (1953)

Este título no deja de ser una curiosidad, ya que lo podríamos ver como un claro precedente de ‘Godzilla’. La historia nos cuenta como un dinosaurio enorme es ‘despertado’ de la forma más brusca por el hombre, desatando así su furia más descontrolada. Y es que no me extraña, si algunos ya se ponen como becerros cuando les suena el despertador de buena mañana, pues este pobre bicho tiene sus motivos para su particular cruzada destructiva. Detrás de los efectos especiales estaba el genial Ray Harryhausen.
JAPÓN BAJO EL TERROR DEL MONSTRUO (1954)

‘Gojira’ sería la primera incursión en el cine del mítico ‘Godzilla’, una criatura surgida del océano, que destruye todo a su paso. Por esas tierras estaban bastante fritos en aquellos tiempos con el tema armamentístico y nuclear. Fruto de estos dramas, que desde luego no eran para tomárselos a broma, nació esta bestia y un tipo de subgénero con ella, el llamado ‘Kaiju Eiga’. Al año siguiente nos llegaría la secuela ‘Godzilla Contraataca’ y tras ella un montón de entregas más, algunas de ellas de calidad ciertamente cuestionable.
LA HUMANIDAD EN PELIGRO (1954)

Maravillosa producción protagonizada por seres humanos y hormigas gigantescas. El peculiar desarrollo de la trama es uno de los puntos fuertes de este título. Nuevamente lo nuclear vuelve a tomar protagonismo, y es el responsable de que estos pacíficos y trabajadores insectos, se vuelvan de armas tomar. Tal y como su rimbombante título español indica, la humanidad está en peligro, otra vez.
TARÁNTULA (1955)

Otra insectos y experimentos fuera de control, otro de los entrañables clichés del subgénero de turno, y una manera sutil de disculpar la torpeza del ser humano.
En esta ocasión, la afectada es una pobre e inocente tarántula que crece de manera desproporcionada, para sembrar el terror allá donde va. Un título que, además, cuenta con unos efectos especiales bastante curiosos para la época.
RODÁN, LOS HIJOS DEL VOLCÁN (1956)

El mismo responsable de ‘Japón bajo el terror del Monstruo’, nos deleitaría un par de años después con esta película con otro bicho distinto. En esta ocasión, se trata de una especie de pterodáctilo que siembra el terror, el caos y la destrucción en un pequeño pueblo. La culpa esta vez es de unos mineros que estaban enzarzados con unos bichejos gigantes y bueno, que si no querían caldo pues les sirven tres tazas con la aparición del saurio volador de turno.
LA GARRA GIGANTE (1957)

Las plumas son las protagonistas de nuestro siguiente título, y es que ver a una especie de pavo gigante sobrevolando los cielos y atacando a la gente es toda una curiosidad. Tal vez no sea una película de lo más representativa en su estilo, pero originalidad y desparpajo no le falta al bicharraco de turno. Por lo descabellada que resulta, merece ser nombrada y, en cierta manera, incluso reivindicada.
VARAN (1958)

En esta ocasión, el caos viene encarnado por una extraña y divertida criatura, que despliega una especie de alas para emprender el vuelo y aterrorizar al personal, más o menos como en la citada ‘Rodán‘. La historia se centra en una reportera que viaja junto a un grupo de investigadores, que se dirigen a un recóndito lugar. Estos pretenden descubrir que sucedió con una expedición anterior. Una vez allí, descubrirán a este ser mitológico supuestamente divino y altamente devastador.
MOTHRA (1961)

Otro clásico del cine de criaturas gigantescas y, probablemente, esta sea una de la más curiosas. Se trata de ‘Mothra’, una larva gigante que acude al rescate de dos enanitas secuestradas por un malvado explotador, que obliga a las diminutas féminas a formar parte del ‘show business’ contra su voluntad.
Este ser mutará hasta convertirse en una polilla monísima aunque destructora que te cagas.
GAMERA (1965)

La tortuga ‘Gamera’ es única. Vuela, escupe fuego y hasta se hace la muerta. Desde luego es otro de esos monstruos enormes que surgieron a la sombra de ‘Godzilla’.
Con más o menos éxito, logró cosechar también un buen puñado de secuelas para el deleite de sus fans. No faltaron tampoco los típicos enfrentamientos con otros bichos.
Y hasta aquí el reportaje clásico de hoy. Hay muchísimas películas de monstruos gigantes más en el panorama clásico, pero desde luego aquí se han dado cita algunas de las más valoradas, especialmente en el subgénero ‘Kaiju Eiga’. Una cosa queda más clara que el agua y es que, a veces, ¡el tamaño si que importa!
Cinefilolisto
#1
Me gusta este tipo de reportajes, son muy pocos usuales pero interesantes. Bien hecho Kelley.