- Esta curiosidad será quizás la más larga que se haya visto por aquí, pero vale la pena contarla. He juntado los datos que he ido recogiendo para hacer un relato que los contiene todos.
Esta es la historia de una película mala de cojones pero que salió de la ilusión de un joven cineasta que devenido una figura de culto: Tom Gaeff, considerado, como Ed Wood, un firme representante de los más cutres directores de la Historia del cine (para mí,
bigladiesman
Supina cutrez con “adolescentes” que parecen cuarentones pero que tiene cierto mérito: a parte de Paul Blaisdell en los FX, gran parte del el equipo técnico está formado por los mismísimos intérpretes de la película, que actúan bajo pseudónimo.
Destaca Tom Graeff, que aúna las tareas de director, productor, guionista actor secundario (como Tom Lockyear), ayudante de FX, coordinador de la banda sonora y padre espiritual del proyecto. El... (seguir leyendo)