A un joven plántanle en el altar de forma que a la hora de pagar todos los gastos queda un viaje a Las islas Mauricio a las que su madre sugiere ir para aprovecharlo. En un principio el hijo vacila en ir allá, mas pronto acepta y van a la aventura. Allá sucédenles unas y otras cosas. Referente a los personajes principales; la madre es la típica sobreprotectora que no quita ojo a todo lo que hace su descendiente, y él, un inmaduro que ignora disfrutar de la soledad y siempre está a las faldas de las mozas. Es un par que apenas se conoce y entre situaciones de gracia de diferente calaña comienzan a hablar tanto de sus vidas que empiezan a conocerse. Ella confiésale no sentirse realizada en su matrimonio, pues toda la magia terminó cuando su marido dejó de bregar el amor al hacerlo, al tiempo que él hace lo mesmo diciéndola que contrajo matrimonio con la pretensión de reavivar lo que estaba estancado. Entre todo esto, aparece una guía turística con la cual él acomete cierto devaneo que no va a más, pues a la confesión de su defecto, ella indúcelo a que medre en ello. He de confesar que no hay cosa a lo que más tirria tenga que a la de que en todas las películas introduzcan amoríos de poca monta. ¡Pesia tal!
No es gran obra mas tampoco buñuelo. En algunos momentos tórnase apagada, mas en otros la presencia y carisma de Carmen dótanla de vivacidad.
Parnaso
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A un joven plántanle en el altar de forma que a la hora de pagar todos los gastos queda un viaje a Las islas Mauricio a las que su madre sugiere ir para aprovecharlo. En un principio el hijo vacila en ir allá, mas pronto acepta y van a la aventura. Allá sucédenles unas y otras cosas. Referente a los personajes principales; la madre es la típica sobreprotectora que no quita ojo a todo lo que hace su descendiente, y él, un inmaduro que ignora disfrutar de la soledad y siempre está a las faldas de las mozas. Es un par que apenas se conoce y entre situaciones de gracia de diferente calaña comienzan a hablar tanto de sus vidas que empiezan a conocerse. Ella confiésale no sentirse realizada en su matrimonio, pues toda la magia terminó cuando su marido dejó de bregar el amor al hacerlo, al tiempo que él hace lo mesmo diciéndola que contrajo matrimonio con la pretensión de reavivar lo que estaba estancado. Entre todo esto, aparece una guía turística con la cual él acomete cierto devaneo que no va a más, pues a la confesión de su defecto, ella indúcelo a que medre en ello. He de confesar que no hay cosa a lo que más tirria tenga que a la de que en todas las películas introduzcan amoríos de poca monta. ¡Pesia tal!
No es gran obra mas tampoco buñuelo. En algunos momentos tórnase apagada, mas en otros la presencia y carisma de Carmen dótanla de vivacidad.
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