“El invisible Harvey” es una deliciosa comedia con mucha más profundidad poética de lo que aparenta. James Stewart es Elwood, un tipo alcohólico que ha decidido huir de la realidad para intentar ser feliz. El mundo de las personas ¨normales¨ le es desagradable, falso, egoísta, prefiere un mundo gobernado por la inocencia, la amabilidad, la bondad, acompañado de su amigo imaginario “Harvey”, un conejo gigante que lo acompaña a todas partes.
La sociedad no perdona a los idealistas y Elwood será castigado y tildado de “loco” y “borracho”, pero quizás descubramos que en su mundo imaginario él encuentra la felicidad.
Una maravilla de película, absolutamente recomendable.
muy buena comedia de enriedos donde se enfocan en un amable hombre que ve a un conejo blanco de 2 metros, la historia parece simple pero esta muy bien llevada, lo unico que le puedo criticar es que no llegamos a ver al conejo en ningun momento, solo una pintura pero nunca personalmente.
altamente recomendable si te gustan las comedias viejas.
Críticas: 3
TANO
8
Una entrañable película con un magnífico James Stewart y con una historia tan loca como curiosa.
Tenemos a un hombre que tiene un “amigo invisible“, que viene a ser un conejo blanco de 2 metros de alto. Podría resultar de lo más normal, pero debido a su edad, y a la sociedad de la época (no se si es que eran mucho más susceptibles al asombro, o que había menos locos, yo diría que ambas), pero el caso es que trae a su familia y a algunos conocidos de cabeza.
Cuenta con otros buenos actores acompañándole, destacando a Josephine Hull, Cecil Kellaway, y a la guapísima Peggy Doll, que me tuvo encandilado toda la película. Quizás no son actores muy conocidos, pero están geniales en esta ocasión.
Una de esas películas que, más que graciosas, son simpáticas, y que consiguen llegarte al corazón, pues la historia es más profunda de lo que podría parecer en un primer momento.
Realmente recomendable.
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