El personaje Alvino (Mike Kirton), no era actor, era jefe de dobles de riesgo en Estados Unidos y un doble de acción experimentado. Tuvo la descabellada intención de rodar una escena al borde de las cataratas del Iguazú, que fue terminantemente prohibida por el director. Los efectos de peleas con espadas que despedían chispas, sí fueron ideas suyas aceptadas, pero no estaban pactadas de antemano.

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