DE COMO SORRENTINO SE OBSESIONA CON LA FOTOGRAFÍA Y DEJA DE LADO PROFUNDIZAR EN SU HISTORIA PERSONAL
Digo, pues, que la historia, supuestamente dramática que vivió en su infancia Sorrentino, es fría como carámbano y en ningún momento me pareció entretenida y mucho menos le encontré momentos chispeantes que los supuestos péritos del cine han resaltado de ella. Acá las escenas se suceden demasiado asépticas, como demasiado pensadas para chirriar y ser superficiales. Algunas de ellas se destacan por el contraste y la inclusión de figurantes dando un toque dantesco a la película. Si en algún momento aparece un hombre sentado encima de un coche, detrás aparecen niños jugando en el columpio sin ningún sentido. Lo que cuenta no está nada bien desarrollado, y es que de tres subtramas que se lanzan sobre Maradona, Fellini y Zafirelli están cogidas por los pelos. No transmite absolutamente nada, ni hace gracia ni estremece, ni nada de nada.
Parnaso
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DE COMO SORRENTINO SE OBSESIONA CON LA FOTOGRAFÍA Y DEJA DE LADO PROFUNDIZAR EN SU HISTORIA PERSONAL
Digo, pues, que la historia, supuestamente dramática que vivió en su infancia Sorrentino, es fría como carámbano y en ningún momento me pareció entretenida y mucho menos le encontré momentos chispeantes que los supuestos péritos del cine han resaltado de ella. Acá las escenas se suceden demasiado asépticas, como demasiado pensadas para chirriar y ser superficiales. Algunas de ellas se destacan por el contraste y la inclusión de figurantes dando un toque dantesco a la película. Si en algún momento aparece un hombre sentado encima de un coche, detrás aparecen niños jugando en el columpio sin ningún sentido. Lo que cuenta no está nada bien desarrollado, y es que de tres subtramas que se lanzan sobre Maradona, Fellini y Zafirelli están cogidas por los pelos. No transmite absolutamente nada, ni hace gracia ni estremece, ni nada de nada.
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