Tarantino ama a las mujeres. Las idolatra. Son sus musas inspiradoras. De aquí en adelante empezaría con la reivindicación del género femenino en el cine. Jackie Brown es la mujer que juega para el lado de los hombres, esa mujer débil con falta de caractér.
Pero no hay que negar que tiene una astucia y una fuerza interior indiscutiblemente perteneciente a las féminas. Esa astucia la lleva a lograr más cosas de la que nos podríamos imaginar.
Jackie Brown es sin duda más parecida a Pulp Fiction de lo que aparenta ser, a Tarantino le encanta jugar a 3 hilos, tres historias paralelas al estilo Pulp Fiction o 3 objetivos paralelos como en esta película. Otro punto a tomar en consideración son esos diálogos de temas tan cotidianos pero que lo transforman en un tema de conversación de largos minutos en que el aburrimiento ni se asoma, sencillamente impecable. Una interesante historia que te deja en suspenso las 2 horas y media de duración, con un desenlace poco predecible y actuaciones impecables, sobre todo Samuel L. Jackson y Robert De Niro. Definitivamente un trabajo novedoso y diferente pero con el sello innegable de uno de los grandes del cine inteligente que no podía ser otro sino Quentin Tarantino.
thirstyforblood
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Tarantino ama a las mujeres. Las idolatra. Son sus musas inspiradoras. De aquí en adelante empezaría con la reivindicación del género femenino en el cine. Jackie Brown es la mujer que juega para el lado de los hombres, esa mujer débil con falta de caractér.
Pero no hay que negar que tiene una astucia y una fuerza interior indiscutiblemente perteneciente a las féminas. Esa astucia la lleva a lograr más cosas de la que nos podríamos imaginar.
Jackie Brown es sin duda más parecida a Pulp Fiction de lo que aparenta ser, a Tarantino le encanta jugar a 3 hilos, tres historias paralelas al estilo Pulp Fiction o 3 objetivos paralelos como en esta película. Otro punto a tomar en consideración son esos diálogos de temas tan cotidianos pero que lo transforman en un tema de conversación de largos minutos en que el aburrimiento ni se asoma, sencillamente impecable. Una interesante historia que te deja en suspenso las 2 horas y media de duración, con un desenlace poco predecible y actuaciones impecables, sobre todo Samuel L. Jackson y Robert De Niro. Definitivamente un trabajo novedoso y diferente pero con el sello innegable de uno de los grandes del cine inteligente que no podía ser otro sino Quentin Tarantino.
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