Si su primera parte era entretenida y tenía una gran ambientación, este ejercicio de estupidez cinematográfica convierte aún más a aquella primera parte en un decente retrato del Zorro. Éstupida, idiota, sosa, aburrida, con un argumento irrisorio y absurdo más propio de una telenovela que de una película de aventuras, con ausencia de épica y una ridiculización de los personajes que no hace ni puta gracia y situaciones tan absurdas que lo único que producen son vergüenza ajena. Un insulto al personaje de Don Alejandro de la Vega y una secuela espantosa.
billy_lum
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Si su primera parte era entretenida y tenía una gran ambientación, este ejercicio de estupidez cinematográfica convierte aún más a aquella primera parte en un decente retrato del Zorro. Éstupida, idiota, sosa, aburrida, con un argumento irrisorio y absurdo más propio de una telenovela que de una película de aventuras, con ausencia de épica y una ridiculización de los personajes que no hace ni puta gracia y situaciones tan absurdas que lo único que producen son vergüenza ajena. Un insulto al personaje de Don Alejandro de la Vega y una secuela espantosa.
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