Frases célebres de M, el Vampiro de Düsseldorf



Los fantasmas de las criaturas siempre están ahí. ¡Siempre,siemrpre,siempre! Entonces solo tengo una solución: Matar.


Yo no soy responsable. No lo soy. No puedo impedirlo


Espera solo un ratito, de negro el monstruo vendrá, sólo con su cuchillito a ti te rebanará.


Si están cantando, sabemos al menos que están bien.


Qué pelota tan bonita, ¿cómo te llamas? - Elsie Beckmann.


El peligro a menudo se esconde tras una atractiva carnada: un caramelo, un juguete, una fruta pueden ser las armas del asesino.


Ciertamente usted y sus hombres actúan bien, no obstante sin resultados, debemos tener resultados. ¡Resultados!


No olvide que este trabajo es muy estresante, sobre todo cuando los éxitos son tan escasos.


¡Si los ciegos pudiesen escuchar el color!


Esta noche hay más policías que putas en las calles.


El mejor hombre entre Berlín y San Francisco.


No lo han atrapado aún, pero los perros pueden matar lobos.


Alguien ajeno a nosotros está jorobando nuestros asuntos. Operativos policiales, diarios, buscando al asesino de niños, interfieren con nuestros negocios.


Nosotros hacemos el trabajo que se debe hacer para vivir. Pero ese monstruo no tiene derecho a vivir. ¡El debe desaparecer!


La mayoría de la gente no siente que le concierne. A la mayoría no le parece que la desaparición de un niño es su problema.


La dificultad de resolver un problema como este proviene de que el criminal y la víctima están conectados sólo por casualidad. Un impulso instantáneo es lo único que motiva al asesino.


De ahora en adelante ningún niño dará un paso sin que esté vigilado.


Deja de roncar, despertarás a los piojos.


Cuidado con las luces y no caminen como elefantes.


Soy inocente, como un bebé recién nacido.


Es sorprendente lo que uno puede recordar si uno se queda solo por unas cuantas horas.


Yo tengo el dudoso honor de defenderlo legalmente. Pero me temo que no le seré de mucha utilidad.


No tengo control sobre mí mismo, ¡el fuego, las voces, la tormenta!


El acusado ha dicho que él no puede ayudarse a sí mismo. Es decir, él está obligado a matar.


Y si ese es el caso, él ha pronunciado su propia sentencia de muerte. Alguien que admite ser un asesino compulsivo, debe ser apagado, como una vela.


Es esa profunda obsesión la que hace que mi cliente no sea responsable. Y nadie puede ser penalizado por algo que no puede controlar.


Quiero decir que este hombre está enfermo. Un hombre enfermo debe ser puesto al cuidado de los médicos, no ejecutado.


¿Usted cree que ellas tengan misericordia?


En nombre de la ley...


En nombre del pueblo... - Esto no nos devolverá a nuestros hijos. - Nosotros también deberíamos mantener estrecha vigilancia sobre nuestros niños.


Intentan silenciarme. No puedo permitir que un crimen se cometa en mi presencia. Exijo que a este hombre se le garantice protección legal. Exijo que este hombre sea entregado a la policía.


Nunca ha tenido niños ¿no? De modo que no ha perdido a ninguno. Pues si supiera lo que se siente al perder uno.


Esa bestia no tiene derecho a la vida. Hay que suprimirla. Tiene que ser ajusticiada sin piedad, sin misericordia de ninguna clase!