Para presentar la película, la productora (Lauren Films) empleó un trailer realizado específicamente para el lanzamiento del film en la red.
Al principio de la película, mientras Bartleby y Loki atraviesan la cinta transportadora del aeropuerto se puede ver por el fondo a una monja desquiciada y a un joven haciendo un gesto de cuernos de diablo.
Kevin Smith muestra su gran afición a los comics, colocandole una camiseta de "Hellboy" a uno de los tres siniestros jugadores de hockey.
En los títulos de crédito aparece la siguiente frase: "Jay y Bob el Silencioso volverán en "Clercks 2: Hardy Clerkin".
La empresa Mooby (o como se escriba), esa que los dos angeles caidos arrasan a tiros (bueno solo uno de ellos), sale en las siguientes partes, Jay y Bob El Silencioso contraatacan y Clerks 2, salen mucho y se ve claramente cuando estan en ellas xDD.
Esta pelicula fue acojida con muy muy mala fama, por la tematica que trataba e incluso hubo manifestaciones de ancianas catolicas y cristianas que se pusieron en contra de este film.
Brian O'Halloran, el comun de Kevin Smith, en todas las partes que ha salido de las peliculas de Jay & Bob El Silencioso, sus apellidos terminan en Hicks, el mismo apellido que tenia en su primera pelicula 'Clerks', Dante Hicks.
En esta pelicula de los inolvidables Jay & Bob El Silencioso, sale un comun en todas las peliculas de Kevin Smith, ya sea como protagonista o en cameos como aqui, se trata de Brian O'Halloran (aqui interpreta al tipo ese que sale en las noticias).
Esta seria la quinta entrega de la saga iniciada por Kevin Smith en Clerks (1994).
SPOILER: En esta película sale Dios!! xDD sí, sale el mismísimo Dios, y lo interpreta la cantante Alanis Morissette.
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Hume
La productora original, Disney, ante la llegada de las críticas sociales sobre la película que estaba a punto de producir, se desvinculó de la imagen de la película, exigiendo la salida de su marca de los títulos de crédito. Un ejecutivo delcaró entonces "Dogma no se ajusta a ninguna de las filosofías de ninguna de las empresas de Disney". Miramax, propieda de Disney, hubo de deshacerse del proyecto. Una de las posibilidades barajadas por Disney fue la de crear una nueva marca (cuyo coste sería de unos $10 millones de dólares) bajo la que distribuir, sin conexión pública de imagen con Disney, la película. De esta forma, los resultados económicos (esperadamente positivos) llegarían a las arcas de Disney sin comprometer su prestigio social.
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