En la sociedad contemporánea, la contemplación de temas trascendentales como la muerte, la divinidad y la existencia del mal suele ser esquivada, relegada a las sombras de un mundo dominado por lo inmediato y lo material. Sin embargo, “Nefarious“ se atreve a desafiar esta tendencia, invitando a los espectadores a sumergirse en una profunda reflexión sobre estas realidades ineludibles.
La trama se centra en la figura de un joven psiquiatra, cuya existencia se ha visto marcada por una serie de errores personales que rara vez ha enfrentado o reflexionado. Su camino se cruza con el de un convicto en el corredor de la muerte, cuyo destino inminente coloca al psiquiatra frente a un dilema crucial: determinar si el reo, afirmándose poseído por entidades más allá de nuestra comprensión, conserva la cordura suficiente para enfrentarse a la ejecución o si su locura lo exime de la pena máxima. Este encuentro no solo es el eje central de la trama sino también el catalizador que propulsa al profesional, y por ende al espectador, hacia un viaje introspectivo sobre la naturaleza del mal, la responsabilidad ética y la posibilidad de redención.
Contrario a lo que podría sugerir su premisa, “Nefarious“ trasciende el género del terror convencional. Más que buscar asustar, su propósito es provocar una introspección profunda acerca de las realidades últimas que nos aguardan después de esta vida, en especial el Juicio Final. La película se aleja de los sustos fáciles y las imágenes macabras para tejer una narrativa que interroga, de manera implacable, nuestras convicciones más profundas y nuestros temores más ocultos respecto a la moralidad, la fe y nuestro destino último.
A través de diálogos cargados de tensión y revelaciones perturbadoras, “Nefarious“ nos enfrenta a la posibilidad de que las fuerzas del mal puedan no solo influir sino también manifestarse en nuestro plano existencial. La película se convierte así en un espejo que refleja nuestras propias luchas internas, nuestras dudas y nuestra búsqueda constante de significado en un mundo que frecuentemente parece indiferente a las preguntas fundamentales de la existencia.
En este sentido, “Nefarious“ es una obra audaz que no solo desafía las expectativas del espectador sino que también invita a una reflexión más amplia sobre la condición humana, el bien y el mal, y la eterna pregunta sobre qué nos espera después de la muerte. Es una propuesta cinematográfica que, lejos de conformarse con el entretenimiento superficial, busca resonar en la conciencia de quien la observa, instándonos a considerar aspectos de nuestra existencia que, aunque incómodos, son fundamentales para comprender quiénes somos y hacia dónde vamos.
“Nefarious“ emerge como una exploración osada y sombría del lado más oscuro del ser humano, presentando un viaje cinematográfico que oscila magistralmente entre luces y sombras. Esta dualidad visual no solo enriquece la narrativa, sino que también establece un entorno envolvente y misterioso, capturando la complejidad del guion con una eficacia notable.
La interpretación de Sean Patrick Flanery es, sin duda, digna de elogio. Encarnando al protagonista, Flanery entrega una actuación que es tanto perturbadora como fascinante, logrando mantener al público completamente absorto. Exhibe una habilidad excepcional para navegar por un espectro amplio de emociones, desde una serenidad casi helada hasta instantes de vulnerabilidad palpable.
No obstante, “Nefarious“ no logra esquivar ciertas debilidades. La película se esfuerza por abarcar múltiples dimensiones del alma humana, lo que en ciertos momentos puede resultar en una narrativa algo dispersa. Esta dispersión ocasionalmente desvía la atención de la trama principal, introduciendo líneas argumentales secundarias que no siempre parecen fundamentales o bien integradas. A pesar de estos tropiezos, “Nefarious“ consigue ofrecer un relato provocador y estimulante, presentando un examen valiente de los rincones más sombríos del alma humana.
Una película de mucho diálogo pero a pesar de elllo resulta interesante ya que tenemos a un psiquiatra que trata de ayudar a un preso que está condenado a morir en la silla eléctrica , de manera que la historia vuelve a mostrarnos la eterna lucha del bien y el mal , de la existencia de dios y del diablo y de como este incita a algunos humanos a cometer actos aberrantes , tocando también otros temas sobre la iglesia , el aborto , la familia entre otros , además de que destacan las actuaciones de los personajes principales, es una historia que no sorprende con su desenlace aunque me mantuvo al tanto por su dramatismo y por sus diálogos referentes al existencialismo
Cinta que me animé a ver a pesar de que no me llamaba mucho la atención y me ha parecido bastante interesante. Se desarrolla casi en su totalidad entre cuatro paredes y con dos protagonistas, que he de destacar sus convincentes y magníficas actuaciones. El diálogo de la peli no tiene desperdicio, que va entre el existencialismo, la teología y las relaciones humanas, todo esto rodeado con un toque de misterio. El final no me convenció del todo, pero no le quita su buen desarrollo y guión. Una grata sorpresa
“Nefarious“ es una película que vale la pena ver si quieres darle al coco.
La trama de la película se centra en un condenado a muerte que intenta convencer a su evaluador de que está poseído por un demonio ancestral. Durante este extenso diálogo, se exploran temas como la existencia humana, la batalla por las almas y cómo las ofensas a Dios han evolucionado en la actualidad.
Las actuaciones en la película son de elogiar, ya que todo elnpso de la película recae en estos dos personajes y destaca el interesante planteamiento de la trama. Además, la película es de las que deja al espectador reflexionando incluso después de que los créditos finales hayan terminado.
Si te gustan las tramas existencialistas, deberías darle una oportunidad.
Película: ¨Nefarious¨ (2023).
No le tenía fe a esta cinta y me termino gustando bastante. La historia es bastante simple y se ejecuta de buena manera. Diálogos coherentes, de hecho es su punto más alto. Actuaciones correctas. Personajes adecuados. De ritmo nada bien, jamás se vuelve pesada. Efectos visuales cutres. Banda sonora correcto. Muertes simplonas. Desarrollo decente y buen final.
Mi puntuación para ¨Nefarious¨ es 6 de 10 posibles. Cinta bastante entretenida y que para pasar el rato es bastante correcta. Recomendada y es un buen ejemplo que con poco es posible realizar una cinta decente.
Tabo.
Esta es la segunda película que mi Youtuber favorito, muy antirreligioso y apolítico, recomienda encarecidamente una peli muy criticada debido a que ¨Es propaganda Cristiana de derechas¨. La primera fue ¨Immanence¨, y aunque no compartí su amor por aquel film, tampoco compartí la opinión de que era un intento de colocar a los cristianos por encima de la ciencia.
Soy un ateo a favor del aborto que no vota, y estoy de acuerdo en que ¨Gods Not Dead¨ es cáncer, así que según muchas reseñas, debería odiar esta película. Pero la pregunta que me hago cuando llega una película influenciada por la religión es si funciona como una película por sí sola o es solo una excusa de rodaje película con el único propósito de sermonear.
Personalmente, pensé que la película funciona bien como una forma de entretenimiento, y no está tratando descaradamente de empujar sus ideales políticos al espectador. Analizemos la trama: ¨Un demonio intenta manipular a un psiquiatra joven e inexperto que él mismo eligió para que le dé lo que quiere¨. Y como el demonio antiguo e inteligente que es, obviamente intentará engañarlo, hacerle sentir culpable y abrumarlo. ¨¿Apoya esta persona el aborto, la eutanasia y la pena capital? Pues utliizare los argumentos que la gente usa para ir en contra de estas cosas para hacerle pensar que es malo.¨
Estoy a favor de los tres, y dado que mis convicciones son fuertes, y el guión usa estos temas de manera efectiva para mover la trama, nunca sentí que yo fui atacado por mis creencias.
Una crítica válida que se le hace a esta cinta es que el psiquiatra es inepto: ningún psiquiatra debería ser manipulado de esta forma, pero una vez que entra en juego el aspecto sobrenatural, puedo entender por qué fue abrumado. Y la película tiene la excusa de que Nefarious eligió a este tipo, probablemente porque conocía sus limitaciones.
Si el propósito de todo esto era difundir ideales de extrema derecha, pues hicieron un pesimo trabajo: describen a Dios como un tirano sin darle al espectador ninguna razón para pensar lo contrario. Y estoy bastante seguro de que los no creyentes abrazamos la idea de que somos ¨demoníacos¨ y ¨malvados¨ a los ojos de la iglesia tradicional; entonces, ¿Qué tiene de ofensivo que un demonio nos exponga por ¨jugar a ser Dios¨ y ¨ser insensibilizados¨ cuando Dios en la Biblia es un hijo puta de todos modos?
La película esta bien llevada y los diálogos son intrigantes, en parte debido a la actuación exagerada pero convincente de Sean Flanery. Me cautivo bastante.
El último cuarto sí que fue un poco anticlimático, especialmente porque precedió a una confrontacion muy buena que mereció una mejor conclusión. Deberían haber hecho algo mas atrevido, pero tuve que conformarme con la aburrida ruta y segura que decidieron tomar, y no es como si la cinta no hubiese demostrado tener huevos: hay una escena bastante gráfica antes de eso. Supongo que realmente querían ese cameo de Glenn Beck.
Yo no senti que esta cinta fuese un ¨Gods Not Dead pero Terror¨ como se dice, a pesar de estar dirigida por el mismo tipo. Cada punto que se hace aquí funciona bien para la trama, y no trata desesperadamente de ir mas alla de la ficción. Si tus creencias personales son sólidas y no sacas conclusiones apresuradas solo porque surge un tema controversial, verás que Nefarious es un thriller psicológico decente.
Críticas: 8
MadLoco
5
Aunque el tema central es una posesión demoníaca, esta película se desmarca del terror convencional para adentrarse en el terreno del suspense psicológico. Con un enfoque que roza lo teatral, dada su limitación a tres personajes y un único escenario, la historia se despliega con una premisa que captura el interés desde el inicio.
Edward Wayne Brady, un asesino en serie a punto de enfrentarse a la pena capital, ve en James Martin, un psiquiatra, su última esperanza para eludir la ejecución. La tarea de Martin es discernir si Brady está genuinamente trastornado, lo que le relegaría a un tratamiento psiquiátrico, en vez de al corredor de la muerte. La advertencia del alcaide sobre la astucia y capacidad manipuladora de Brady precede un encuentro lleno de revelaciones sorprendentes, donde Brady asegura que, antes de su posible muerte, tres personas más perderán la vida…
Dirigida por Cary Solomon y Chuck Konzelman, conocidos por “Unplanned“, esta cinta actúa como precuela de la novela “A nefarious plot“ de Steve Deace, explorando la incursión de un demonio en nuestro mundo con el objetivo de esparcir el mal y cosechar adeptos.
La tendencia de Solomon y Konzelman a entrelazar mensajes religiosos en sus obras anteriores me preparó para abordar esta película con una mente abierta. Sus intentos de influir sutilmente en la audiencia mediante discursos cargados de significado son evidentes también aquí, donde se insinúa una manipulación similar en la narrativa.
El filme aborda temas como la creación, la prevalencia del mal en la sociedad, y otros dilemas humanos desde la perspectiva de un demonio en cuerpo de condenado, dejando claro que nadie, ni siquiera los no creyentes, está a salvo de su influencia.
La interacción entre los dos personajes principales, marcada por diálogos que oscilan entre lo tedioso y lo cautivador, confiere a la película una dinámica de altibajos que, sin embargo, permite un visionado agradable. En cuanto a las actuaciones, Sean Patrick Flanery a veces desentona con excesivas expresiones faciales, mientras que Jordan Belfi entrega una interpretación convincente y consistente como James Martin.
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