Harry H. Novak, se especializó en películas grindhouse, repletas de desnudismo, violencia y tramas baratas, produciendo docenas de provocativas sorpresas a través de Boxoffice International Pictures a lo largo de dos décadas. Novak sabía que el sexo y la violencia venden, así que era una buena idea unirlas en una misma película, como hizo en “A Scream in the Streets” dirigida a los ansiosos y lujuriosos clientes de los cines de barrios sórdidos de las principales ciudades de EEUU.
La trama, aburrida y ramplona, sigue a dos policías de la ciudad de Los Ángeles, que “investigan” sobre un psicópata travestido que asesina a cuchillazos a mujeres indefensas (incluida una adolescente) en los parques de la ciudad y a plena luz del día. Al menos esa es la excusa para mostrar larguísimas escenas de sexo entre personas que no tienen nada que ver con la trama principal, destacando las escenas de un calvo follando a una masajista antes de golpearla con un cinturón, o aquella en la que dos lesbianas montan un espectáculo para un voyeur.
Miguel Arkangel
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Harry H. Novak, se especializó en películas grindhouse, repletas de desnudismo, violencia y tramas baratas, produciendo docenas de provocativas sorpresas a través de Boxoffice International Pictures a lo largo de dos décadas. Novak sabía que el sexo y la violencia venden, así que era una buena idea unirlas en una misma película, como hizo en “A Scream in the Streets” dirigida a los ansiosos y lujuriosos clientes de los cines de barrios sórdidos de las principales ciudades de EEUU.
La trama, aburrida y ramplona, sigue a dos policías de la ciudad de Los Ángeles, que “investigan” sobre un psicópata travestido que asesina a cuchillazos a mujeres indefensas (incluida una adolescente) en los parques de la ciudad y a plena luz del día. Al menos esa es la excusa para mostrar larguísimas escenas de sexo entre personas que no tienen nada que ver con la trama principal, destacando las escenas de un calvo follando a una masajista antes de golpearla con un cinturón, o aquella en la que dos lesbianas montan un espectáculo para un voyeur.
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