Me resultó muy interesante la visión de este capítulo, como las redes sociales pueden condicionar a la opinión pública, en éste caso se da en el Reino Unido, el primer ministro es extorsionado para tener sexo con un porky a cambio de devolver con vida a la princesa de ese país, y ser filmado durante el acto hacia todo el mundo, se siente la tensión ya que el hecho en sí es de una rareza desopilante.
El himno Nacional.
Está película de black mirror me parece que le faltó mucho en sí, la historia es simplemente una llegada al morbo donde secuestran a una princesa y el primer ministro le piden una situación de morbo de violar un cerdo para su liberación.
Lo bueno es que es corta y en momentos mantiene atención sin embargo le falta ritmo y las actuaciones no están a la altura del todo, lo que se tiene que ver ni se ve y seguramente fue cortado al menos en la versión que vi.
Aunque la única escena asquerosa fue ver el ministro vomitando y cayéndosele la baba en el baño y poco más...
Vamos por mas pero esta no vale la pena.
Despues de escuchar buenas criticas sobre esta serie decidi ver este primer capitulo llamado El Himno Nacional donde te muestra como el primer ministro interpretado por Rory Kinnear tiene que afrontar el secuestro de una princesa y la demanda del secuestrador.Desde ese punto se torno mucho mas interesante todo lo que pasa y uno ve como tienen que ir afrontando todo desde el intento de recuperar a la princesa como tambien si hara lo que dice el secuestrador o no y digamos que lo que pidio no es dinero ni nada por el estilo,con todo eso el capitulo esta lleno de suspenso si lo hara o no.
Es bastante entretenido y diria que comenzo bien esta serie
Película: ¨Black Mirror: The National Anthem¨ (2011).
La verdad es que esperaba mucho más por su alta puntuación y por su sinopsis que me parece genial, quede con gusto a poco. La historia no se explica mucho el por que el primer ministro es el elegido, quizás debieron darse un poco el tiempo o las razones del secuestrador para raptar a la Princesa Susana. Los diálogos son coherentes respecto a lo que busca entregar. Las actuaciones son correctas. Los personajes son aceptables, les falto un mayor desarrollo, más considerando que son capítulos auto-conclusivos. De duración esta muy bien, son cuarenta y cinco minutos que pasan muy rápidos por la historia. El ambiente es adecuado. La tensión esta en cada momento. La muerte que hay es regular.
Mi puntuación para ¨Black Mirror: The National Anthem¨ es 6 de 10 posibles, juega mucho con el morbo de ver al Primer Ministro de manera explicita realizando el antojo del secuestrador, sin embargo hay censura, al igual con la muerte, al final fue mucha expectativa, para tan poco entregado. De todas maneras no deja de ser un material muy interesante de ver. Aceptable y recomendado.
Tabo.
Lamentable capítulo de Black Mirror que parte de la premisa de que al primer ministro británico le envían una cinta en la que muestran a una princesa de Inglaterra, la cual ha sido secuestrada por alguien que le envía un mensaje al primer ministro: antes de las cuatro de la tarde, el primer ministro deberá realizar relaciones sexuales con un cerdo a través de la principal cadena de televisión pública, ya que, de otro modo, la princesa será asesinada.
El capítulo juega muy bien con las diversas aristas de este peculiar asunto: por ejemplo, los compañeros de partido del primer ministro, a los que no les importa lo más mínimo que la carrera de su colega se vaya al traste; la gente, que decide contemplar el espectáculo, a pesar de lo desagradable únicamente porque les gusta el morbo; los periodistas, dispuestos a hacer cualquier cosa para ser los primeros en dar cada avance sobre el tema. En general, toda la trama está muy bien llevada, pero entonces, ¿en qué falla este capítulo de Black Mirror?
Pues muy sencillo: el capítulo resulta predecible como él solo, y cualquier espectador con dos dedos de frente sabrá desde el principio que todo va a acabar con el primer ministro teniendo relaciones con un cerdo. No hay ningún giro de guión apasionante ni nada que haga al espectador levantarse del asiento, sorprendido. Todo es demasiado previsible y orientado al morbo, quizá incluso un tanto escatológico.
Muy decepcionante.
Interesante forma de criticar la tecnología, una muy buena primera parte que da que pensar mucho en como la tecnología así como nos ayuda, también es capaz de destruirnos.
El Himno Nacional es el primer capítulo de la aclamada miniserie británica Black Mirror, en la que se critica la importancia que hoy en día tienen las tecnologías en nuestras vidas.
Este episodio, partiendo de una historia que en los primeros minutos puede desconcertar bastante, logra impactar al espectador y hacer que este no se aburra durante todo su metraje.
La historia es como poco innovadora, y durante todo el capitulo se muestra como hoy en día la intimidad no existe, y todo lo ocurre se transmite de forma inmediata de un lugar a otro del mundo. Vemos como la opinión publica varia en cuestión de horas y como los partidos políticos no están liderados por su presidente, sino por la gente que controla los hilos que mueven el país.
Las actuaciones son geniales, y cabe destacar el final del episodio en el que la historia da un giro radical y hace que nos cuestionemos nuestra forma de vida. Sin lugar a duda esta serie dará mucho que hablar y se convertirá en un clásico de culto.
Lo mejor: El final y la forma satírica de criticar las tecnologías.
Lo peor: Su corta duración.
Críticas: 8
Miguel Arkangel
7
“Black Mirror“ se estrenó en 2011, cuando el mundo era un lugar muy diferente. O quizás no tan diferente. “The National Anthem“ es el episodio estreno de esta serie antológica británica de ciencia ficción. Fue escrita por el creador de la serie, Charlie Brooker, y dirigida por Otto Bathurst.
Una princesa, muy querida por el pueblo, es secuestrada y se promete su liberación si el primer ministro de Inglaterra (Rory Kinnear) tiene relaciones sexuales con un cerdo, acto de zoofilia que debe ser transmitido en vivo, humillándose a sí mismo.
“The National Anthem” es una excelente y mordaz iniciación al entorno futurista de Black Mirror. Te plantea cuestiones morales, desde la comedia absurda, la crítica a la amoralidad de los medios de comunicación y el morbo de la gente, sin dejar de ser un intenso thriller político. Una combinación estupenda.
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