Un pianista no muy bueno decide venderle su alma al diablo pero las consecuencias serán aterradoras, cada vez que toca una determinada melodía se transforma en una criatura del infierno, me imagino que en su época daba mucho miedo esa caripela especie de hombre lobo con pelos en toda la cara, sinceramente al verlo ahora me dio mucha risa, pero entiendo el contexto y los efectos de la época, me saco el sombrero ante esta joya del cine Mexicano de una época dorada que no se repetirá lamentablemente.
Film correcto que trata el tema de vender el alma al diablo por otra cosa a cambio,esta vez el prota vende su alma al diablo a cambio de que le de el dón de ser el mejor pianista del mundo puesto que una envidia/odio le corroe por las venas viendo como la pianista mejor considerada le supera siempre.
La transformación del prota a hombre lobo cada vez que toca el piano es de chiste.Realmente ridículo,la cinta cuenta con poca emoción y poca garra,así que se queda a medias y no transmite gran cosa.
Excelente filme del terror mexicano, género semioculto y perdido en su totalidad en la década de los 80¨s. A pesar de algunos detalles inverosímiles (el choque de la mujer al arranque de la peli), la trama se va desarrollando de tal forma que el final realmente es revelador.
La fisonomía del monstruo da un poco risa, pero hay que situarse en la época.
Críticas: 4
Miguel Arkangel
7
Otra de las joyitas a descubrir del género fantástico de la edad de oro del cine mexicano. La desesperación por convertirse en un gran concertista lleva a un pianista a vender su alma al Diablo. El precio que debe pagar es que se convierte de un frágil hijo de mamá a un monstruo sediento de sangre, pero con una cara que causa más risa que miedo, con una nariz de cromañón, cejas de Groucho Marx y dientes mal colocados.
El director, Rafael Baledán, logra un replanteamiento bastante inteligente de la historia de Jekyll y Hyde, con algunos guiños a la licantropía. El inicio es estupendo, una chica estrella su auto contra un árbol. Sale en busca de ayuda y escucha tocar el piano en una casa cercana. Llama a la puerta de esa casa y el piano se detiene. De repente, una voz comienza a suplicarle que abra la puerta. Es uno de esos comienzos que realmente despierta la curiosidad.
Tenemos una elegante película de terror gótico que rebosa atmósfera; un cuento fáustico con algunas revelaciones sorprendentes, con la música como vínculo de una historia dramática de condenación, con suspenso y hasta con humor.
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