Cuando un juez maduro, su joven y bella esposa, el antiguo amante de ésta y un escultor bohemio se encuentran en una isla solitaria, todo puede suceder. Incluso que uno de ellos se convierta en un asesino.
Intriga y divertir al espectador es todo lo que se propuso el realizador Jim Wilson al aceptar la dirección de esta película y sin duda lo consigue.
El principal aliciente de la película reside en la soberbia interpretación de Harvey Keitel que, de magnánimo y comprensivo, acaba devorado por el fantasma de los celos.
j.muñoz
7
Cuando un juez maduro, su joven y bella esposa, el antiguo amante de ésta y un escultor bohemio se encuentran en una isla solitaria, todo puede suceder. Incluso que uno de ellos se convierta en un asesino.
Intriga y divertir al espectador es todo lo que se propuso el realizador Jim Wilson al aceptar la dirección de esta película y sin duda lo consigue.
El principal aliciente de la película reside en la soberbia interpretación de Harvey Keitel que, de magnánimo y comprensivo, acaba devorado por el fantasma de los celos.
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