Gran curiosidad cinematográfica al ser no solo una producción más del alquimista George Pal - que además dirige junto a otro cineasta, Henry Levin - sino por ser a su vez la primera de las dos películas de ficción que se hicieron expresamente para el fomato Cinerama (junto a la por meses posterior “La conquista del Oeste”), con proyección en tres pantallas.
La peli tiene un reparto bastante destacado en las cuatro historias que conforman: la central, que es una biografía con muchos elementos fantàsticos de los Grimm, y tres adaptaciones independientes de cuentos. Éstas últimas cuentan con nombres como Russ Tamblyn, Yvette Mimieux, Jim “Mr. Magoo” Backus, Terry-Thomas o Buddy Hackett ,y están dirigidas por Pal.
El cuerpo principal de la película, dirigido por Levin, cuenta con Laurence Harvey (que también protagoniza, irreconocible tras toneladas de maquillaje, uno de los cuentos) y Karlheinz Böhm (el inolvidable psicópata de “El fotógrafo del pánico”) como los hermanos Grimm junto a Claire Bloom y la entrañable Barbara “Jeannie, Mi bella genio” Eden. Las personalidades de los hermanos parece que se corresponden muy ligeramente con la realidad: Wilheim (Harvey) era un literato apasionado por el “sturm und dang” romántico y las tradiciones germanas, y Jacob (Böhm) fue un polifacético, casi genial, pero aburrido académico y alto funcionario.
Con cuatro guionistas (entre ellos Charles Beaumont, miembro de la “Troupe Corman”, y William Roberts, de “Los siete magníficos”) la película sufre, lógicamente, altibajos, pero logra su cometido de entretener y es más fiel a la vida real de los protagonistas de lo que pueda parecer.
Técnicamente, la fotografía es bellísima, reflejando las localizaciones bávaras a la perfección, auténtico “scenery porn”, que se dice, pero debido a que es una película hecha expresamente para ser vista en Cinerama, muchos planos resultan algo “raros”, y al ser imposible trasladar a formato doméstico la espectacularidad de este formato: en este aspecto, pese a que ganó muchas y merecidas aclamaciones en su tiempo, no ha envejecido bien. Las escenas animadas del maestro George Pal son aún hoy muy bonitas de ver, y el vestuario supuso un Oscar para la diseñadora Mary Wills.
Buen y entretenido film que debe ser visto como un producto de su época para ser bien entendido. Se ha quedado algo desfasado (esencialmente por el tema del Cinerama) pero no desmerece el mérito general del personal que trabajó en él.
Una gran película clásica de fantasía. La recuerdo con gran nostalgia de mi niñez.
La película se compone de una historia principal, salpicada de cuentos breves que la amenizan.
Algunos momentos lacrimógenos y un final bastante emocionantes.
Los FX se basan en la técnica del stop-motion y hay que recordar que la película tiene la inocencia de otros tiempos, así que hay que volverse un poco niño para disfrutarla.
Críticas: 3
Ryo
8
Me ha parecido una exquisitez.Un homenaje a la vida y obra de los hermanos Grimm,creadores de algunos de los cuentos mas famosos de la historia(Caperucita Roja,Cenicienta,Blancanieves,etc.)con una puesta en escena increible,con un colorido y un vestuario ganador del Oscar espectacular.
Los Fx son bastante decentes para la epoca y la pelicula destila una inocencia parecida a las de Disney, siendo la gracia y los chistes su premisa basica,aunque se pone un pelin dramatica al final.
Si quizas es medio pesado el hecho de que practicamente todas las escenas estan filmadas en ese formato exageradamente ancho,quedando a veces todo lejos,incluso casi sin distinguir los rostros de los actores.
Entretenida.
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