Nueva entrega sobre las aventuras de Víctor crowley, ya sabéis, un despiadado asesino al que le encantan las hachas y que esta más muerto que vivo.
Lo cierto es que en esta saga, que intenta rescatar la formula de los slashers de los 80, lo que más destaca por encima de todo son las escenas gore que contiene.
En esta entrega nos encontramos con un toque de calidad y mejoría que resalta por encima de las anteriores, siempre utilizando FX artesanales para así dejar atrás el ya sobrecargado CGI.
Adam Green, el responsable y creador de la saga, cede la silla de director, el únicamente se encarga del guión y la producción.
Este cambio se nota bastante, sobre todo a la hora de mostrar las muertes, las cuales siguen siendo bestias, pero se ven de una manera acelerada que uno casi ni se entera. La razón es que hay demasiadas para una duración tan corta, además la acción se hace esperar.
Otra cosa que llamo mi atención es que esta vez la historia cobra más importancia con respecto a las anteriores, se toman su tiempo a la hora de contar las cosas, siempre sin perder ese tono de humor que caracteriza a la saga.
Las actuaciones son correctas, me hizo mucha gracia volver a ver a Zack Galligan, el pronta de los ¨Gremlins¨, al que hace tiempo que no veía. También siempre es un placer ver en acción a Danielle Harris, una de mis musas del cine de terror, al igual que Kane Hodder, mi Jason favorito en ¨Viernes 13¨.
La BSO es correcta, los escenarios no producen la sensación que deberían y la fotografía podría decir que es algo oscura.
Para ser una tercera entrega me pareció más que aceptable, aunque como todos sabréis tiene sus fallitos.
Si os gustan las buenas carnicerías cargadas de muertes, sangre y buen gore creo que deberíais de hecharle un vistazo, al igual que a las anteriores de esta saga.
COCO 1
6
Nueva entrega sobre las aventuras de Víctor crowley, ya sabéis, un despiadado asesino al que le encantan las hachas y que esta más muerto que vivo.
Lo cierto es que en esta saga, que intenta rescatar la formula de los slashers de los 80, lo que más destaca por encima de todo son las escenas gore que contiene.
En esta entrega nos encontramos con un toque de calidad y mejoría que resalta por encima de las anteriores, siempre utilizando FX artesanales para así dejar atrás el ya sobrecargado CGI.
Adam Green, el responsable y creador de la saga, cede la silla de director, el únicamente se encarga del guión y la producción.
Este cambio se nota bastante, sobre todo a la hora de mostrar las muertes, las cuales siguen siendo bestias, pero se ven de una manera acelerada que uno casi ni se entera. La razón es que hay demasiadas para una duración tan corta, además la acción se hace esperar.
Otra cosa que llamo mi atención es que esta vez la historia cobra más importancia con respecto a las anteriores, se toman su tiempo a la hora de contar las cosas, siempre sin perder ese tono de humor que caracteriza a la saga.
Las actuaciones son correctas, me hizo mucha gracia volver a ver a Zack Galligan, el pronta de los ¨Gremlins¨, al que hace tiempo que no veía. También siempre es un placer ver en acción a Danielle Harris, una de mis musas del cine de terror, al igual que Kane Hodder, mi Jason favorito en ¨Viernes 13¨.
La BSO es correcta, los escenarios no producen la sensación que deberían y la fotografía podría decir que es algo oscura.
Para ser una tercera entrega me pareció más que aceptable, aunque como todos sabréis tiene sus fallitos.
Si os gustan las buenas carnicerías cargadas de muertes, sangre y buen gore creo que deberíais de hecharle un vistazo, al igual que a las anteriores de esta saga.
Coco 1.
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