“Alien: Resurrección” (1997), dirigida por Jean-Pierre Jeunet, retoma la saga 200 años después de los eventos de Alien 3. En esta entrega, un clon de Ellen Ripley, llamado Ripley 8, es creado por científicos militares para extraer un embrión de Xenomorfo reina de su cuerpo. Este experimento combina ADN humano y Xenomorfo, otorgándole a Ripley 8 habilidades mejoradas, un vínculo psíquico con las criaturas y fragmentos de recuerdos de su vida pasada.
La trama sigue a un grupo de mercenarios y a Ripley 8 mientras intentan sobrevivir a una invasión Xenomorfa a bordo de la nave USM Auriga, que se dirige automáticamente hacia la Tierra con un destino catastrófico.
Final explicado de "Alien: Resurrección": ¿Qué ocurre con Ripley 8 y la amenaza Xenomorfa?
En el clímax de Alien: Resurrección, Ripley 8 es llevada al nido de Xenomorfos, donde presencia el nacimiento de un nuevo híbrido Xenomorfo con características humanas. Este ser, nacido de la reina mutada, rechaza a su progenitora y la mata, reconociendo a Ripley 8 como su verdadera madre. Aprovechando la confusión, Ripley 8 escapa hacia la nave Betty, donde se reúne con los demás supervivientes.
El híbrido logra alcanzar la Betty y mata a DiStephano mientras ataca a Call. En una escena desgarradora, Ripley 8 utiliza su sangre ácida para perforar una ventana y empuja al híbrido hacia la apertura, causando su descompresión y una muerte violenta al ser expulsado al espacio.
Mientras tanto, la Auriga, programada para colisionar con la Tierra, impacta y genera una explosión masiva que destruye la nave y los Xenomorfos restantes. Los supervivientes observan el planeta desde la Betty, contemplando su futuro. Cuando Call pregunta a Ripley 8 qué hará a continuación, ella responde: “No lo sé. Soy una extraña aquí misma”, dejando el final abierto para reflexiones sobre su identidad y propósito.
El nacimiento del híbrido humano-Xenomorfo
El híbrido representa la culminación de los experimentos genéticos de los científicos de la Auriga. Con rasgos humanos, como ojos expresivos y piel más suave, este ser encarna la perversión del intento de manipular la naturaleza Xenomorfa. Su vínculo con Ripley 8 como “madre” subraya las tensiones entre los instintos Xenomorfos y su lado humano, culminando en su trágico final a manos de quien considera su figura materna.
El sacrificio de Ripley 8
La decisión de Ripley 8 de destruir al híbrido y a la Auriga es un acto de redención. A pesar de su conexión con los Xenomorfos, se alinea con los humanos restantes para evitar que la amenaza llegue a la Tierra. Este sacrificio simboliza su lucha interna entre su humanidad y los rasgos alienígenas que ahora forman parte de ella.
Conclusión de "Alien: Resurrección"
Alien: Resurrección cierra con un tono melancólico y reflexivo. Ripley 8, atrapada entre su pasado humano y su nueva identidad híbrida, enfrenta un mundo que ya no reconoce. Su enigmática respuesta final refleja su lucha por encontrar un propósito en un universo donde ya no pertenece completamente ni a los humanos ni a los Xenomorfos. La película plantea preguntas sobre la manipulación genética, la identidad y la redención, dejando un legado ambivalente en la saga de Alien.