Hoy rescatamos F/X: Efectos Mortales (F/X, 1986), una de esas películas que parecen haber quedado sepultadas bajo toneladas de franquicias más ruidosas, pero que en su día fue un éxito de taquilla y, lo más importante, una propuesta original, inteligente y con mucho estilo.
Dirigida por Robert Mandel y protagonizada por Bryan Brown y Brian Dennehy, esta joyita mezcla thriller policiaco, cine de acción y metacine, en una historia donde los efectos especiales no solo forman parte del espectáculo… ¡sino del propio argumento!
¿De qué va F/X?
Rollie Tyler (Bryan Brown) es uno de los mejores artistas de efectos especiales del cine. Maquillajes, explosiones, sangre falsa, trampas visuales… lo domina todo. Por eso, el gobierno le propone una misión muy peculiar: simular el asesinato de un mafioso (Nicholas DeFranco) que va a testificar contra la mafia y necesita desaparecer sin dejar rastro. Todo debe parecer real, pero sin matar a nadie.
Rollie acepta, pensando que es solo otro trabajo… hasta que se da cuenta de que le han utilizado como chivo expiatorio y alguien intenta matarlo de verdad. Lo que sigue es una persecución tensa, con Rollie utilizando todos sus trucos de cine para sobrevivir, esconderse y, por supuesto, contraatacar. Paralelamente, un detective veterano (Brian Dennehy) empieza a investigar el caso, descubriendo que nada es lo que parece.
Un thriller con alma ochentera (y mucho ingenio)
Lo que hace grande a F/X no es solo su premisa, sino cómo la desarrolla. No estamos ante una peli más de polis y criminales: aquí, el protagonista no es un agente secreto ni un superhéroe, sino un técnico de cine que, sin pegar un tiro, pone en jaque a todo un operativo corrupto usando ingenio, trampas visuales y mucho látex.
F/X es una carta de amor al cine artesanal. Cada truco que Rollie utiliza para engañar a sus perseguidores (desde explosiones falsas hasta dobles de cera) es una demostración de creatividad pura, una reivindicación del talento que hay detrás de cámara… y que aquí se convierte en arma.
Bryan Brown: héroe por accidente
En lugar del típico protagonista de acción musculado, F/X nos ofrece a Bryan Brown, un tipo común con un oficio inusual. Su Rollie Tyler es carismático, listo y perfectamente consciente de que está fuera de su elemento, pero también decidido a no dejarse pisotear. Brown hace que el personaje sea cercano, sin necesidad de frases lapidarias ni peleas espectaculares. Su arma es el ingenio.
Por otro lado, Brian Dennehy, como el detective Leo McCarthy, es ese clásico poli de la vieja escuela, que huele la corrupción desde lejos y no se deja manipular. La película se divide entre los dos puntos de vista —el del fugitivo y el del investigador— hasta que inevitablemente confluyen en un desenlace genial.
Cine dentro del cine
Una de las cosas más divertidas de F/X es cómo convierte el lenguaje cinematográfico en herramienta narrativa. No solo vemos los trucos del oficio, sino que se nos invita a entender cómo se fabrican las ilusiones del cine… y cómo esas mismas ilusiones pueden aplicarse a la vida real para confundir, manipular o engañar a los enemigos.
En cierto modo, F/X anticipa lo que luego haría Misión Imposible con sus máscaras o incluso Home Alone, pero desde una mirada más técnica y sin necesidad de gadgets imposibles. Aquí todo es maqueta, pólvora y arte de los efectos prácticos.
¿Por qué deberías verla (o revisitarla)?
Porque es un thriller diferente, lleno de ingenio, con una historia que te atrapa y unos personajes que caen bien desde el minuto uno. Porque homenajea al cine y a los que lo hacen posible. Porque no necesita tiroteos constantes para generar tensión. Y porque su mezcla de acción, suspense y amor por el oficio es tan efectiva ahora como lo fue en 1986.
Además, F/X dio lugar a una secuela bastante decente (F/X 2) y hasta una serie de televisión, lo cual dice mucho de su impacto.
Conclusión: Una joya ochentera que merece más reconocimiento
F/X: Efectos Mortales es ese tipo de película que demuestra que con una buena idea, personajes carismáticos y algo de ingenio, puedes crear una experiencia memorable. No necesita explosiones cada cinco minutos ni efectos digitales para atraparte. Solo necesita a un tipo con talento para el maquillaje… y una muy mala suerte.
Si aún no la has visto, prepárate para descubrir un thriller lleno de trucos. Y si ya la conoces, toca volver a disfrutarla como lo hacías en los 90, con una Coca-Cola, una cinta VHS y los ojos bien abiertos.
stoker dijo: Es una de esas pelis que vi mil veces en los videoclubs y jamás alquilé. Viendo la reseña, lo mismo me animo ya que veo que esta en movistar.
Lo mismo digo... tenía muy buenas reseñas intentaré verla
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660
Tasty
#8
Muy buena, sí que me había olvidado de ella. La verdad que no la he vuelto a ver desde hace la tira.
Tenia las dos en VHS (la segunda grabada) y la de veces que las vi. La primera es de mis favoritas en el estilo de “protagonista se venga“ y el tipo de humor que tiene Tyler me gusta.
La secuela me parece muy digna y años estuve buscando a ver si había una tercera, pero no.
El año pasado las volví a ver y me siguen pareciendo muy dignas.
stoker
#1
Es una de esas pelis que vi mil veces en los videoclubs y jamás alquilé. Viendo la reseña, lo mismo me animo ya que veo que esta en movistar.
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