CORRECCIÓN 1: SOBRE LA ESCENA DEL RELOJ
Fue colocado en la falsa fachada, no muy lejos del suelo aunque lo suficiente como para que Lloyd pudiera darse un buen tortazo. De hecho, cuando quiso probar la seguridad de los andamios donde se había dispuesto una colchoneta, que debían salvarle en caso de caída, Lloyd lanzó un muñeco y éste rebotó contra la colchoneta y se fue al suelo. Igualmente, decidió hacer la escena.
El reloj era completamente funcional y fue fabricado por una compañía que con los años sería conocida como IBM.
Fue colocado en la falsa fachada, no muy lejos del suelo aunque lo suficiente como para que Lloyd pudiera darse un buen tortazo. De hecho, cuando quiso probar la seguridad de los andamios donde se había dispuesto una colchoneta, que debían salvarle en caso de caída, Lloyd lanzó un muñeco y éste rebotó contra la colchoneta y se fue al suelo. Igualmente, decidió hacer la escena.
El importante historiador Jefferey Vance reveló la existencia de un segundo doble, el colaborador habitual de Harold Lloyd Robert A. Golden, que lo dobló en varias películas. Se supone que Golden aparece en la secuencia en que un ratón se mete en los pantalones de Lloyd.
La mayor parte del edificio era una pared falsa colocada la azotea de un segundo edificio, bastante bajo. El vertiginoso efecto de Harold Lloyd escalando se logró mediante un magistral trabajo de cámara que pasó desapercibido hasta los años 80.
Por otro lado, Lloyd fue doblado en las escenas de lejos por el joven Harvey Parry, doble de dilatadísima carrera que incluso trabajó con John Carpenter en “1997: Rescate en Nueva York” y varias veces con Mel Brooks y con Roger Corman. Parry negó haber participado en la película hasta años después de la muerte de Harold Lloyd porque no quería romper la ilusión y por respeto al actor, del que dijo que, en efecto, se jugó la vida varias veces durante sus escenas.
La idea de la película fue del propio Harold Lloyd, que vio casualmente al que sería su compañero de reparto en la película, el temerario profesional Bill Strother, escalar el famoso Edificio Brockman de Los Ángeles sin apoyo alguno.
Muy valiente cuando tenía que hacer una escena arriesgada pero extremadamente aprensivo cuando veía a otro hacerla, Lloyd se escondió en una esquina asomándose de tanto en cuando para ver como ascendía el saltimbanqui, temiendo constantemente que se cayera.
Cuando llegó sano y salvo a la azotea, Lloyd corrió hacia allí, se presentó y le propuso un proyecto conjunto.
Curiosidades: 6
bigladiesman
CORRECCIÓN 2: SOBRE EL CURIOSO RELOJ DE MARCAR QUE SALE AL PRINCIPIO
El reloj era completamente funcional y fue fabricado por una compañía que con los años sería conocida como IBM.
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