Tenía muchas ganas de ver esta segunda parte ¨Return of the Street Fighter¨, película en la que vuelve el brillante Sonny Chiba ¡Que rodó las tres películas de la trilogía en el mismo año! Yo cuando me enteré me quedé un poco loco, pero sí, las tres películas de esta trilogía se estrenaron en el mismo año, ya no sé muy bien si se estrenaron las tres juntas como las vio Clarence, el protagonista de ¨Amor a Quemarropa¨ o si las estrenaron con algún tiempo entre ellas ¡Porque vaya empacho! Aunque claro, he de decir que eran los setenta, era otra época y el mundo tenía la fiebre de las artes marciales, estaba Sonny Chiba, pero también estaba el genio mundial Bruce Lee.
Como ya sabéis, yo solo recomiendo ¨Return of the Street Fighter¨ a los verdaderos admiradores de las artes marciales ¿Por qué? Pues porque todo lo que pasa está preparando una pelea, es decir, los momentos en los que la trama avanza y se producen diálogos son excusas para una larga, innecesaria y genial escena de peleas en las que veremos a un portentoso Sonny Chiba repartiendo leña.
Lo cierto es que la película es corta, entretenida y supongo que sacó para hacer dinero tras el éxito de la primera porque hay injertos de esta que aumentan en duración a ¨Return of the Street Fighter¨.
He de decir que si pusiera las dos películas en una balanza, la primera me gustó, pero ¨Return of the Street Fighter¨ me agradó un poquito más, al ser más corta es más directa, y además es una película un poquito más ¨De occidente¨ ¿Por qué digo esto? Porque aparecen personajes de fuera del Japón, si en ¨The Street Fighter¨ la peligrosa mafia de China estaba detrás del asunto, en ¨Return of the Street Fighter¨ son los italianos, se hacen llamar la mafia y son muy, pero que muy malos.
Otra cosa que si que tengo que mencionar es que he encontrado a ¨Return of the Street Fighter¨ un poquito menos gore que su predecesora, sin embargo tiene mejores momentos, destacando en el que Sonny Chiba tiene sexo con una muchacha que acaba siendo una asesina, Chiba le rompe el brazo y después la mata, acto seguido entra un tío árabe dispuesto a matarle y acaba con él reventándole la cabeza con una mano...¡Excepcional! Después de un buen arrumaco a la gente le entra sueño, a Sonny Chiba sed de sangre.
Otro momenazo es cuando le lanaza un cuter al villano ¡Y se lo clava en el ojo! Me encantan estas películas ¡Son una fábrica de momentazos!
Si es que a veces ¨Return of the Street Fighter¨ hasta se convierte en una comedia involuntaria, como cuando saca los ojos de uno con una colleja mortal o cuando lucha con el tío de las cuerdas vocales robóticas....O la escena de la sauna con el tío que dice ser karateka.
En serio brillante película, a mi me ha divertido más que la primera y por eso le voy a dar un puntito más...¡Pero ambas son geniales!
Ahora me invade una mezcla de sentimientos, no sé si ver la tercera parte ya que me apena que se acabe esta disparatada saga...¡Pero tengo muchas ganas!.
Críticas: 2
bigladiesman
7
Sonny Chiba está de vuelta como Takuma Tsurugi en esta segunda entrega de su trilogía The Street Fighter, en una historia donde un par de personajes de la anterior entrega también retornan.
A Sonny Chiba le sigue dando por imitar a Bruce Lee, especialmente en las escenas de lucha. Da la sensación de que empieza más comedido, pero conforme avanza la acción empieza a imitar más y más lo inimitable. Creo que siendo él mismo hubiera hecho de esta trilogía un producto aún más memorable.
Con un papel aumentado respecto a la anterior entrega, el maestro de karate Masafumi Suzuki interpreta a Kendō Masaoka, quizá el único hombre del mundo al que Tsurugi admira: en la anterior entrega lo venció limpiamente, y además conoció personalmente su adorado padre. De algún modo, es su conexión con los únicos tiempos en que fue feliz… Así que cuando le encargan eliminarlo, Tsurugi se niega y inicia el conflicto de la película.
El cineasta nipón-quebequés Claude Gagnon es el maloso de turno: un gangster llamado Don Costello que quiere básicamente hacerse con el monopolio mundial del pujante negocio de los dojos. Cuenta para ello con un ejército de expertos en diversas disciplinas y en el uso de armas.
Argumentalmente es una de las pelis más simples que hayáis visto: “Tsurugi sabe demasiado, hay que darle lo suyo”, y el que les da lo suyo es él, que reparte más tortazos que Popeye tras comer espinacas caducadas y ver que hay cola en el retrete. Y eso que le envían a gente de medio mundo y hasta a un viejo conocido de la peli anterior. Que da para un producto muy entretenido, y tanto: parece un videojuego beat em up rollo Streets of Rage o Final Fight, solo que que 15-20 años antes y en modo demo permanente, aunque debe decirse que se abusa de los flashbacks de la anterior. La Toei, como productora de películas de imagen real, tenía unos presupuestos bastante magros, y se nota en cosas como esta de llenar metraje tontamente.
A nivel técnico, pues es lo mismo que la anterior película: espectaculares escenas de acción y ritmo ultra-acelerado, algo de gore sin sentido que da un paradójico toque divertido, y la música… ¿Pues para qué vas a cambiar ese temazo setentero tan pegadizo?
Simple y con bastantes cosas recicladas de la primera parte, opino que el encanto de esta segunda parte de The Street Fighter se encuentra precisamente en dicha simplicidad: Chiba pone su magnetismo (pese a no estar inspirado a nivel de actuación) y el equipo pone acción desenfrenada. Y a gozar, oigan, que el nivelazo se mantiene.
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