Ficha El Color del Dinero

7.17 - Total: 33

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Críticas de El Color del Dinero (5)




TANO

  • 4 Dec 2022

8


Robert Rossen dirigió en 1961 una película protagonizada por Paul Newman dedicada al mundo del billar y las apuestas, un drama donde se nos contaba la historia de un hombre y su lucha día a día por sobrevivir haciendo lo que más le gustaba en esta vida: jugar al billar.
25 años después, Scorsese decidió continuar la historia, en donde tenemos al mismo protagonista, 20 años después, alejado de ese mundillo (al menos en lo que respecta a jugar), y el cómo descubrir a un prometedor jugador, protagonizado por un jovencísimo Tom Cruise haciendo un gran papel, le vuelve a introducir en todo eso de lo que se había alejado.
Esta secuela de ¨El Buscavidas¨ se centra mucho más en el billar como tal, aunque, por supuesto, la trama de la película nos muestra la relación entre los dos personajes, sus roces y su manera de vivir y pensar.
Ha conseguido gustarme incluso más que la otra, no es tan dura con la vida de nuestro protagonista y se hace más llevadera.



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Parnaso

  • 7 Jan 2021

6


Me ha gustado más que la primera parte. Es de ver el tupé que lleva Tom Cruise que parece el pájaro loco. La película sigue la línea que su antecesora, el personaje de Newman se encarga de persuadir a su discípulo para ir de gira de partidas de billar. Una especie de road movie algo reiterativa que no termina de lograr puntos álgidos, se deja ver y poco más, ahora bien, entraña una banda sonora rescatable.



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Mad Warrior

  • 10 Dec 2018

7



¿Qué pasó con Eddie Felson? Buena pregunta. Aquel joven que quería ser el mejor a cualquier precio y al que la mujer que amaba se le fue por culpa de su ambición.
Destrozado, habiendo aprendido lo que significa perder en la vida, tras confesarse a Bert y éste decirle ¨No vuelvas a entrar en una sala de billar¨. ¿Qué fue de aquel buscavidas?

25 años han pasado. Largo tiempo, y no en balde. Ahora, ese joven impetuoso, arrogante y cuya vida estaba en el taco de billar y en la mesa al que apodaban ¨El Rápido¨ se ha serenado, ha cambiado de aires y el peligro es algo que no le interesa; comercia con alcohol, se ha retirado del juego, ejerce de mentor para otros jóvenes que sólo piensan en el éxito mientras mantiene una relación con Janelle, la dueña del bar que frecuenta. En su vida ya no hay chispa, ha sido reemplazada por comodidad y se puede decir que el paso del tiempo y el peso del mundo han sido los causantes.
Lo que Eddie no ha perdido es su buena vista y su capacidad para aprovechar las oportunidades, y la ha visto en Vincent, un joven que se presenta como su vivo reflejo de hace años, un chico tan impulsivo y habilidoso jugando al billar como él, que le gusta alardear y caer bien...un ingenuo del que se puede aprovechar. Con ayuda de Carmen, la novia de aquél, que también lo explota a su manera, Eddie le enseñará a jugar y perder como un campeón, a vencer al contrincante perfecto para luego encontrar a uno mejor y, sobre todo, a ganar dinero.

Ganadora de dos Oscar, impulsora definitiva de la carrera de Paul Newman, ¨El Buscavidas¨ fue y será la obra maestra de Robert Rossen y para muchos una de las más grandes películas que ha dado el Séptimo Arte, ni más ni menos. Una película basada en la novela homónima de 1.959 de un Walter Tevis que se preguntaba cómo había cambiado la vida para su protagonista ¨Fast¨ Eddie 25 años más tarde, y ello fue la causa de una continuación titulada ¨The Color of Money¨, cuyo guión acabó en las manos de Martin Scorsese, que vivía una segunda juventud.
A finales de los 70 y comienzos de los 80 no hacía sino encontrarse una decepción tras otra; resultará extraño ahora, pero ¨New York, New York¨, ¨Toro Salvaje¨ y ¨El Rey de la Comedia¨ fueron sonoros fracasos de crítica y público. El guión que le ofreció Griffin Dunne, ¨After Hours¨, pequeña película que demostró que podía llevar a cabo un proyecto sin caer en la desmesura, apoyándose en su talento y no en los medios, fue lo que insufló vida a su carrera; tras eso, muchos guiones se le propusieron al cineasta, aceptando finalmente la adaptación del libro de Tevis. Pero la historia le gustó tan poco que pidió al escritor Richard Price que interviniera para cambiarla totalmente.

Ahí está ¨Fast¨ Eddie, envejecido aunque encandilando con mucha tranquilidad a la chica de la barra. Ese es el chaval que años antes sucumbía a los placeres del billar y el dinero, los mismos que le destrozaron la vida; de repente, el fuerte golpe de un saque en una partida parece transportarle a los viejos tiempos, y atónito queda con la destreza y el desparpajo del joven que la inicia. Un comienzo difícil de digerir, y es que seguramente nadie quería ver envejecer a Felson. ¨El Color del Dinero¨ prosigue en ese mundo sucio poblado de manipuladores y perdedores de ¨El Buscavidas¨, aunque algo esencial ha cambiado: el aspecto filosófico y el tono oscuro y sórdido que albergaba la de Rossen.
La profundidad moral y la sensación de malestar y dolor de aquella deja sitio al triunfo material, aun estando presentes reflexiones como la capacidad de vencer el orgullo, la importancia de la astucia por encima de la bondad y el conflicto entre la frialdad del mundo moderno y ese romanticismo perteneciente a una época lejana; los temas de Scorsese, la corrupción y la traición, están distanciados por un melodrama y una intriga demasiado bien conducidos: el viejo que desea explotar la habilidad del joven; todo resulta más artificial y malicioso, además de poco original. Por suerte, una irrupción fascinante da vida a la trama a eso de la hora y cuarto, iniciándose con una significativa frase (¨¿Eres jugador, Amos?¨).

De algún modo volvemos a los tiempos de ¨El Buscavidas¨. El timador es engañado, su tiempo ha pasado, su chispa se ha extinguido; no así, ese suceso le da fuerzas para sacudirse el polvo, volver a la realidad y hacer lo posible para ganar, no por dinero, sino por orgullo propio, para demostrar su valía como jugador. Entre tanto, Scorsese hace alarde de su virtuosismo sumergiendo al espectador en el juego, en la propia mesa de billar (la cámara sigue el movimiento de las bolas siendo golpeadas por el taco en perfecta sincronía con el ritmo de la música, creando una experiencia visual única...es casi erótico, demonios). Esta vibrante puesta en escena se refuerza por el gran trabajo de Thelma Schoonmaker al montaje y de Michael Ballhaus a la fotografía.
Por otra parte, Paul Newman deslumbra, como de costumbre, porque muchos sabemos que no hay otro buscavidas igual que él (sólo por verle manejar los tacos de nuevo ya merece la pena acercarse al film), aunque aquí su registro cambia radicalmente en comparación con el mostrado 25 años atrás; no puede decirse lo mismo de una Mary Elizabeth Mastrantonio tan guapa como enervante formando pareja con ese sobreactuado y chulo a más no poder Tom Cruise que está muy lejos de caer bien, y cuyo cambio de personalidad hacia el final resulta tan poco creíble que llega a ser mediocre. De secundarios, unos buenos John Turturro y Helen Shaver. Y ojo, que aparece Iggy Pop en un cameo.

Con todo, la gente acudió en tropel a las salas y ¨El Color del Dinero¨ fue todo un éxito, inaugurando una etapa más provechosa para su director, quien por fin pudo respirar tranquilo.
Es decir, una película bien dirigida, con un imponente protagonista y un final abierto genial, pero a años luz de su predecesora, y cuyo propósito comercial se nota a la legua.



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elalfon

  • 25 Apr 2015

8


Si todas las segundas partes fueran como estas el mundo sería un lugar maravilloso.

Y no estoy hablando de una película cualquiera. El buscavidas, de 1961 es sin problemas, una de las mejores películas de la historia, por lo que esta secuela rodada 25 años después era una tarea que requería la mejor mano posible, y no podía ser otro que Martin Scorsese. El resultado es muy satisfactorio, pues no solo sirve como película independiente por el salto temporal entre ambas, sino que además, para los que han visto previamente la primera parte sirve como una sensata continuación que muestra la evolución a lo largo de los años de Eddie Felson.
A pesar de que el recuerdo de la primera siempre está presente mientras esta se está viendo, el gran trabajo de ésta nos permite superarla y disfrutarla independientemente.

El guión es mucho más básico, incluso podría decir que se adaptó a los tiempos. Atrás queda el romanticismo y el retrato de la victoria y la derrota enmarcado en el personaje principal.
En esta ocasión el guión comprende a dos personajes con dos ideales diferentes unidos por el billar. Uno, a pesar de haber dejado atrás sus problemas económicos, busca la motivación moviéndose donde lo hacía de joven en busca del dinero y el otro, un joven talentoso que busca ser mejor que los demás pero es muy ingenuo y lo que es peor, un cabezón.

La película es ágil en su ritmo apoyado por ese guión que a pesar de su aparente sencillez comparado con la primera es muy interesante gracias al trabajo con sus dos personajes principales, una suerte que no corren sus secundarios y Mary Elizabeth Mastrantonio, dicho sea de paso y una evolución en el personaje de Tom Cruise excesivamente rápida.
Para apoyar el ritmo Scorsese dota esto de una selección musical espectacular y pone todo su empeño en las partidas de billar con un resultado parecido a los puños de Jake LaMotta en Toro Salvaje o los dados en Casino.

Pero el resumen general está en Paul Newman. Su personaje muestra la evolución del paso del tiempo y a su vez es el que más sensaciones transmite a lo largo de todos los sucesos del film y es el que lleva en volandas el resultado final.

Lo normal sería recomendarla de forma independiente a la original, pero para mí es gran logro es que El color del dinero resulte un gran complemento a aquel peliculón de 1961.



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olmix19

  • 22 Aug 2011

6


Película muy recordada de Tom Cruise que supuso uno de tantos saltos a su carrera, con un manífico como siempre Paul Newman. La película para mí no es más que entretenida, en instantes se hace algo lenta, no es de las mejores de Scorsese. Pero cumple entreteniendonos hasta el final, y muy recomendable para los amantes del billar, aunque se centre más en el tema de las apuestas. 6/10



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Críticas: 5


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