Aceptable miniserie realizada por el canal Syfy, que posiblemente sea uno de los proyectos más interesantes que han hecho en los últimos años.
Ascensión plantea una sinopsis de lo más interesante: una nave espacial llamada Ascensión inició en los años 60 un viaje interespacial que durará 100 años y cuyo objetivo es llegar a un determinado planeta con atmósfera habitable e iniciar una colonización. Dado que es un viaje tan largo, las personas que subieron a la nave al inicio del viaje irán muriendo con el paso de las décadas, y quienes terminen llegando serán los nietos de los primeros tripulantes. En la Ascensión viajan los mejores científicos, doctores, filosófos, historiadores, etc, es decir, toda la gente necesaria para poder fundar una nueva civilización.
Sin embargo, lo que los habitantes de la Ascensión no saben es que, en realidad, ellos nunca despegaron, sino que han permanecido en la Tierra durante todos estos años, víctimas de un experimento sociológico que pretende averiguar qué sucedería en una situación real de colonización espacial. Aunque la parte sociológica solo es la punta del iceberg de lo que pretende el gobierno. La verdad intención de este proyecto es el de ver hasta qué punto podría avanzar un grupo de personas viviendo aisladas del mundo y de la cultura actual, sin influencias de eventos traumáticos como La Guerra del Vietnam, Irak, el 11S, etc. Un concepto de lo más interesante que, obviamente, no se puede abarcar en solo tres episodios.
Por otro lado, se nos muestra la trama del director de este proyecto, que está interpretado por Gil Bellows, un tipo que vive por y para Ascensión, el hijo del creador del proyecto, y que parece hasta cierto punto obsesionado. Una agente del FBI interpretada por Lauren Lee Smith es enviada para investigar a Gil Bellows para saber si oculta algo, ya que se produce un asesinato dentro de la Ascensión y se sospecha que Bellows tuvo algo que ver.
Ahora bien, a pesar de que el concepto que plantea la serie es sumamente interesante, está totalmente desaprovechado, y las cuatro horas de duración de la miniserie son invertidas en algunas subtramas que no llevan a nada. Creo que principal error que padece esta ficción es que, más como miniserie, está enfocada como si fuera el episodio piloto de una futura serie, algo como sucedía con Galáctica Estrella de Combate, que comenzó siendo una miniserie de tres horas y gustó tanto que la convirtieron en una serie con cuatro temporadas. Aquí literalmente, pretende coger la piel del oso antes de cazarlo.
Por ello, no dejan de presentarnos y profundizar en subtramas dentro de la Ascensión, subtramas que no aportan nada a la miniserie, y a la larga el producto se resiente mucho. Haciendo un recopilatorio de subtramas, tenemos las siguientes:
-La trama conspirativa de Lauren Lee Smith indagando acerca del personaje de Gil Bellows y la Ascensión.
-La trama del personaje de Brad Carter, uno de los trabajadores de la nave, que es ejectado del interior de la Ascensión y descubre que esta nunca partió.
-La trama del asesinato de la chica joven.
-La subtrama de la niña que tiene poderes.
-La subtrama del oficial negro que sospecha que la Ascensión nunca despegó y está investigando el asesinato.
-La subtrama romántica del negro con la hermana de la muerta, que a su vez está casada con el personaje de Ryan Robbins
-Las corruptelas y luchas de poder de Tricia Helfer, su esposo el capitán de la nave, y el miembro del concejo.
-La historia a lo Romeo y Julieta de la chica pelirroja hija de la doctora y el chico de clase baja.
Pero lo peor de todo no es solo la gran cantidad de tramas que se establecen (y que quedan en el aire debido al final abierto), sino que muchas de ellas resultan muy innecesarias, como la de los dos jóvenes enamorados, el excesivo protagonismo del personaje de Tricia Helfer a pesar de que no aporta nada a las tramas principales, o la resolución que tiene la trama del oficial negro, totalmente abierta.
En definitiva, una miniserie con un concepto interesantísimo, pero que se queda en tierra de nadie. Hasta cierto punto olvidable.
Raúl Rubio Peñas
5
Aceptable miniserie realizada por el canal Syfy, que posiblemente sea uno de los proyectos más interesantes que han hecho en los últimos años.
Ascensión plantea una sinopsis de lo más interesante: una nave espacial llamada Ascensión inició en los años 60 un viaje interespacial que durará 100 años y cuyo objetivo es llegar a un determinado planeta con atmósfera habitable e iniciar una colonización. Dado que es un viaje tan largo, las personas que subieron a la nave al inicio del viaje irán muriendo con el paso de las décadas, y quienes terminen llegando serán los nietos de los primeros tripulantes. En la Ascensión viajan los mejores científicos, doctores, filosófos, historiadores, etc, es decir, toda la gente necesaria para poder fundar una nueva civilización.
Sin embargo, lo que los habitantes de la Ascensión no saben es que, en realidad, ellos nunca despegaron, sino que han permanecido en la Tierra durante todos estos años, víctimas de un experimento sociológico que pretende averiguar qué sucedería en una situación real de colonización espacial. Aunque la parte sociológica solo es la punta del iceberg de lo que pretende el gobierno. La verdad intención de este proyecto es el de ver hasta qué punto podría avanzar un grupo de personas viviendo aisladas del mundo y de la cultura actual, sin influencias de eventos traumáticos como La Guerra del Vietnam, Irak, el 11S, etc. Un concepto de lo más interesante que, obviamente, no se puede abarcar en solo tres episodios.
Por otro lado, se nos muestra la trama del director de este proyecto, que está interpretado por Gil Bellows, un tipo que vive por y para Ascensión, el hijo del creador del proyecto, y que parece hasta cierto punto obsesionado. Una agente del FBI interpretada por Lauren Lee Smith es enviada para investigar a Gil Bellows para saber si oculta algo, ya que se produce un asesinato dentro de la Ascensión y se sospecha que Bellows tuvo algo que ver.
Ahora bien, a pesar de que el concepto que plantea la serie es sumamente interesante, está totalmente desaprovechado, y las cuatro horas de duración de la miniserie son invertidas en algunas subtramas que no llevan a nada. Creo que principal error que padece esta ficción es que, más como miniserie, está enfocada como si fuera el episodio piloto de una futura serie, algo como sucedía con Galáctica Estrella de Combate, que comenzó siendo una miniserie de tres horas y gustó tanto que la convirtieron en una serie con cuatro temporadas. Aquí literalmente, pretende coger la piel del oso antes de cazarlo.
Por ello, no dejan de presentarnos y profundizar en subtramas dentro de la Ascensión, subtramas que no aportan nada a la miniserie, y a la larga el producto se resiente mucho. Haciendo un recopilatorio de subtramas, tenemos las siguientes:
-La trama conspirativa de Lauren Lee Smith indagando acerca del personaje de Gil Bellows y la Ascensión.
-La trama del personaje de Brad Carter, uno de los trabajadores de la nave, que es ejectado del interior de la Ascensión y descubre que esta nunca partió.
-La trama del asesinato de la chica joven.
-La subtrama de la niña que tiene poderes.
-La subtrama del oficial negro que sospecha que la Ascensión nunca despegó y está investigando el asesinato.
-La subtrama romántica del negro con la hermana de la muerta, que a su vez está casada con el personaje de Ryan Robbins
-Las corruptelas y luchas de poder de Tricia Helfer, su esposo el capitán de la nave, y el miembro del concejo.
-La historia a lo Romeo y Julieta de la chica pelirroja hija de la doctora y el chico de clase baja.
Pero lo peor de todo no es solo la gran cantidad de tramas que se establecen (y que quedan en el aire debido al final abierto), sino que muchas de ellas resultan muy innecesarias, como la de los dos jóvenes enamorados, el excesivo protagonismo del personaje de Tricia Helfer a pesar de que no aporta nada a las tramas principales, o la resolución que tiene la trama del oficial negro, totalmente abierta.
En definitiva, una miniserie con un concepto interesantísimo, pero que se queda en tierra de nadie. Hasta cierto punto olvidable.
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