La segunda temporada es igual o mejor que la primera. En ella, cabe destacar que ya hay un inquisidor como tal que cace o persiga a las brujas y lo que nos encontramos más bien es una guerra entre dos brujas poderosas.
Las actuaciones, como dije en la anterior crítica, son de primer nivel y en esta temporada se les une como personaje recurrente la actriz Lucy Lawless, famosa por interpretar a Xena, y que aquí interpreta a la condesa Marburg, una bruja milenaria a la que no se le puede matar y que en siglos anteriores ha recibido otros nombres, como Bathory, Medea o Hécate. Sin duda, el personaje de Lawless es uno de los mejores puntos de la temporada, ya que no solo es una villana, sino también un personaje que sirve de engranaje para todas las brujas, ya que las convence para ponerlas en contra de Mary Sibley.
En lo referente a los demás personajes, en esta temporada Mary Sibley está increíble y su personaje, presentado en un primer momento como la antagonista de la serie, resulta ser el más humano y uno de los que más matices tiene. Eso sí, espero ver a Janet Montgomery en la tercera temporada, aunque parece que va a estar difícil.
Por el contrario, el personaje de John Alden ya no da mucho más de sí. En esta temporada, unos indios le entregan poderes para que pudiera adivinar qué persona es una bruja y se convierte en una especie de Solomon Kane, lo malo es que poco a poco va consumiéndose a causa del poder que tiene dentro de su cuerpo. Como digo, el personaje, por más que le hayan dado una trama atractiva, no aporta mucho y solo en los últimos capítulos adquiere algo más de protagonismo con la trama del hijo demoníaco.
Luego tenemos a Cotton Mather, que en esta temporada está buscando redención por haber matado a su padre, y es increíble lo mucho que ha cambiado este personaje desde el comienzo de la serie. Seth Gabel está increíble y además tiene muchísima química con Tamzin Merchant, quien interpreta a Anne Hale. Anne en esta temporada también está genial, ya que pasa de ser una chica inocente a una bruja ambiciosa con los mismos escrúpulos que Mercy o Tituba.
Hablando de estas dos, Mercy en esta temporada comienza muy fuerte y, una vez que su personaje es quemado por Mary Sibley, resulta incluso más aterradora y la actriz lo hace genial, consiguiendo parecer un auténtico monstruo. Es simplemente increíble que esta chica con veintidós años consiga ofrecer un villano tan odioso y a la vez tan carismático. Por el contrario, en esta temporada queda claro que Tituba no tenía mucho más que ofrecer como personaje tras su traición a Mary Sibley, por lo cual su final a manos de los cuervos me parece muy acertado. Es una pena porque la actriz no lo hacía mal, pero si uno se fija en esta temporada, Tituba se había limitado a ser una mera secundaria.
También es destacable hablar de Isaac el Fornicador, interpretado por Iddo Goldberg, un personaje que es algo así como el Hodor de Salem, el típico personaje con pocas luces que a todos nos cae bien. En esta temporada, el personaje comienza sufriendo, luego se enamora de la dulce Dollie y cuando se la arrebatan, jura venganza por su muerte. Es increíble el cambio que tiene este personaje, ya que durante los dos últimos capítulos deja de ser el ¨tonto del pueblo¨ y se convierte en un protector de niños, torturado y con ganas de acabar con toda bruja de Salem.
Pero sin duda el gran descubrimiento es el hijo de Mary Sibley, un niño que es el mismísimo Diablo y que ahora se encuentra en Salem, dominando a Sebastian Marburg. No dudo de que este niño será una pieza fundamental en la tercera temporada.
Una gran serie. Recomendable.
Una gran serie absolutamente infravalorada, sobre todo porque no ha llegado ni a retransmitirse en España y ya han pasado dos años desde que comenzó. Salem básicamente narra los sucesos de los Juicios de Salem, pero con un toque fantástico de brujería que le sienta muy bien.
¿Cómo definir la serie en una serie? Pues yo diría que es un cruce entre las intrigas y traiciones de Juego de Tronos con la historia del héroe puritano y cazador de brujas Solomon Kane. La serie básicamente nos cuenta la historia de una bruja llamada Mary Sibley que gobierna Salem desde la sombra y quiere conseguir llevar a cabo un macabro ritual, para lo cual manipula a los puritanos para que cacen a ¨supuestas brujas¨. El problema empieza cuando regresa al pueblo su antiguo amor, John Alden, quien decide averiguar quiénes son las verdaderas brujas junto al reverendo Cotton Mather.
Al margen de la dirección y los guiones, el punto fuerte de esta serie son las actuaciones, bastante buenas, y sobre todo la complejidad de los personajes. Por ejemplo, el personaje de Mary Sibley, interpretado por Janet Montgomery, es genial, ya que no es solo una villana mala porque sí, sino que tiene muchos matices y durante esta primera temporada John Alden es su punto débil, ya que ella lo sigue queriendo y llegará a interponerlo antes que los intereses del aquelarre.
Por otra parte, John Alden es un personaje que comienza siendo muy prometedor, pero con la llegada de Increase Mather, el padre de Cotton, Alden queda relegado a un segundo plano y deja de ser el cazador de brujas que era y se convierte en un galán de telenovela. Por otra parte, Cotton Mather, quien es interpretado por Seth Gabel (el sádico Conde Vértigo de Arrow), comienza siendo un personaje fanático que poco a poco se va ablandando y convirtiéndose en mejor personaje, y en la segunda mitad de temporada empieza a tener problemas con la bebida tras perder a su amada.
Por otra parte tenemos al grandísimo Stephen Lang haciendo de Increase, el padre de Cotton, un personaje que desde su primera aparición deja claro que es genial, un inquisidor badass al que no le importará sacrificar lo que sea necesario con tal de acabar con la última bruja de Salem. No obstante, considero un error haber acabado con su personaje tan pronto, ya que podía haber sido mejor aprovechado.
En papeles secundarios tenemos a Iddo Golberg, quien interpreta a un simpático personaje llamado Isaac el Fornicador, que es algo así como el Hodor de Salem y que tiene mucha más relevancia de la que parecía en un primer momento. Otros tres personajes muy prometedores son Tituba, Anne Hale y Mercy Lewis. Es curioso el caso de esta última, que en tan solo trece capítulos pasa de ser una chica débil poseída por las brujas a una bruja de gran poder, malévola y traicionera, capaz de enfrentarse a brujas de mayor jerarquía sin parecer una mocosa, y es que la actriz que la interpreta lo hace genial, increíble que solo tenga veintidos años.
En definitiva, una buena serie por desgracia aún no ha llegado a nuestro país, y es una auténtica pena. Creo que merece mucho la pena.
Recomendable.
Salem es una serie infravalorada. Una serie poco común, con elementos muy trabajados, cuidadosos detalles y aunque la historia real solamente sirva como trasfondo para la fantasía de Brannon Braga y sus personajes, al menos tenemos el atrevimiento de algo diferente.
Está segunda temporada incluye la aparición de dos actores estrella; Lucy Lawless (¨Xena¨, ¨Espartacus¨) y Stuart Townsend (¨La Reina de los Condenados¨, ¨La Liga de los Hombres Extraordinarios¨) junto con el reparto clásico de la primera temporada, donde nuevamente, todo el peso recae sobre una increíble Janet Montgomery, que sigue realizando una actuación ejemplar y maravillosa.
La aparición de los Marburg (Sebastian y la Condesa) le imprime un toque siniestro y sanguinario a una temporada ya de por sí brutal.
También cabe destacar la nueva personalidad de Anne Hale (interpretada por una genial Tamzin Merchant).
Entre los demás protagonistas John Alden (Shane West) y Cotton Mather (Seth Gabel) siguen en su línea, con un aporte mucho más profundo, donde uno busca venganza y el otro redención.
Aunque al principio cae un poco pesado, Isaac (Iddo Goldberg) se convierte en uno de los más destacados. En los últimos episodios llega incluso a ponerte los pelos de punta, en su búsqueda de justicia por la muerte de Dollie (Sammi Hanratty).
La historia ahora no trata únicamente de la venganza de las brujas de Essex sobre los puritanos de Salem. Se unen varios conflictos entre las distintas brujas, sus prioridades y el nacimiento del señor oscuro.
Todo se vuelve más trágico y rodeado de un aura mística y tétrica.
Los efectos visuales, el maquillaje y el vestuario están muy bien diseñados. Influye en cada capítulo, haciendo que sea más intenso uno tras otro, sin perder el hilo, ni el interés.
Salem es una serie que merece el reconocimiento que debe, a pesar de la lamentable audiencia que le precede. Debería ser más apreciada y puede que eso le cueste la tercera temporada. Aunque quien sabe...
El final es abierto, un final inusual, donde el mal prevalece y no hay sonrisas.
Después del caótico desarrollo en las vidas de los personajes que representan en la serie, del dolor de su pasado y presente, el futuro ennegrecido sin compasión, sirve únicamente para acrecentar más el interés de seguir su desarrollo.
Impresionante segunda temporada.
Me ha gustado mucho esta primera temporada de Salem.
La puesta en escena es bastante buena, y la trama engancha bastante, ademas de que los actores son bastante convincentes, sobretodo los principales, aunque quizás un poco cargante el personaje masculino principal.
La serie tiene escena bastante fuertes que no pasan para nada inanvertidas y que llegan a impresionar.
Y tampoco puedo dejar pasar su opening, interpretado por Marilyn Manson, que creo que hizo engancharme aun mas a la serie.
En fin la serie empieza bastante fuerte y a pesar de que a mitad tiene un par de altibajos en general esta bastante y el final es muy, pero que muy bueno. Esperando estoy su segunda temporada.
Aún sigo alucinando tras acabar de ver la primera temporada, y tal es mi asombro que se me hace cuesta arriba esperar por la segunda. No solo eso, sino también la incógnita de ¨¿cómo será?¨.
Está temporada ha concluido de la forma más macabra posible, no obstante deja en el aire demasiado interrogantes, ¨¿qué pasará?¨.
Comencé a ver la serie por el interés de encontrar una buena recreación del pueblo de Salem durante los juicios y la caza de brujas sucedido entre 1692 y 1693.
La serie comienza de forma estrepitosa dando a conocer al señor Sibley, un personaje despreciable en todos los sentidos.
Todo empieza a coger forma una vez John Alden debe partir para luchar en la guerra. La chica con quien mantenía una relación en secreto, Mary, se une a las ¨fuerzas de la oscuridad¨ y entrega un hijo nonato para sellar ese pacto.
Tras largos años desaparecido y dado por muerto entre la multitud, Alden regresa y se encuentra con una cacería implacable sobre algunas gentes sentenciadas por brujería.
El pueblo y sus habitantes ya no son lo que eran. El señor Sibley es el marido de su antigua novia, y un nuevo reverendo, causa estupefacción entre la plebe con sus acusaciones e investigaciones.
Otro personaje de vital importancia, el reverendo Cotton Mather. Un ser repulsivo al principio, pero poco a poco su carácter y sus sentimientos se muestran más perceptibles, sobre todo cuando apartan de su lado a la puta de la que estaba enamorado.
Seth Gabel, quien da vida al reverendo Mather, es ante todo desdeñable. Una gran actuación. Desde su terrible cometido hasta su decadencia influida por el alcoholismo y la gran tristeza que le asola.
Pero si de alguien concretamente hay que reseñar, es de Janet Montogomery. La auténtica protagonista de la serie y quien nos deleita con una actuación iluminada, llena de fuerza y conmovedora.
Su personaje, un triste ser frío, distante, deprimido... Ha cambiado su vida de plebeya por las riquezas, ha entregado su cuerpo al hombre que le privo de su verdadero amor y ahora, cumple una venganza ritual para un aquelarre que posee los mismos deseos que la pobre Mary.
Mary Sibley es belleza y crueldad, amor y odio constante. Un personaje que conmueve, que transmite todo tipo de emociones, que hace temblar tu pulso y mantener fijados los ojos en cada detalle que le acompaña.
Una actuación sublime.
En cambio Shane West, el querido capitán John Alden, no transmite la misma fuerza, ni la misma emotividad que su acompañante. No obstante, no le resta merito, pues su cometido aunque sea como un hombre ignorante con un pasado turbulento, le da mayor importancia de la que al principio parece tener.
Otros interpretes que veremos a lo largo de la serie, no causa la misma estupefacción que los anteriormente mencionados, salvo uno, Stephen Lang. Quien sorprende a mitad de serie, interpretando al padre del reverendo Mather, y el auténtico villano de la serie.
Sanguinario, frío, calculador, un psicópata fanático con ropas sagradas quien se considera juez, jurado y verdugo. No duda de utilizar cualquier método por brutal que pueda ser, para dar caza a las brujas.
Su interpretación es genial, pero su personaje es odioso desde el primer momento.
Xander Berkley, Tamzim Merchant, Ashley Madekwe, Elise Eberle o Iddo Goldberg, también son fundamentales a lo largo de la serie, cada uno en su papel, cada uno con una función concreta que vivirán su propio calvario y disfrutaremos de verles actuar. Cada uno tendrá su propio cometido, sus minutos de gloria y cuando llegue el final, ¨¿quién merece morir?¨ y ¨¿quién merece vivir?¨.
Un estupendo vestuario. Me ha encantando, pura representación del siglo XVII.
Realmente merece una mención especial, tal trabajo. El vestuario, una parte fundamental de la serie. Da vida a los personajes que visten.
Pero no únicamente todo es cuestión de vestuario. La escenografía, la fotografía, el montaje, la banda sonora... Han sido detalladas al milímetro, un esfuerzo encomiable para representar tan loablemente al terrorífico pueblo de Salem durante la caza de brujas por parte de fanáticos puritanos, un hecho histórico, real y que condenó a la muerte a varias personas inocentes.
Una serie estupenda. Magistral en todos los sentidos.
La considero uno de los tridentes de series favoritas que tengo, junto a ¨Juego de Tronos¨ y ¨Twin Peaks¨, las que hasta ahora para mí habían sido insuperables, cada una en su estilo.
Como serie de terror, Salem, está un escalón por encima de todas las que he visto, que no han sido pocas, y sin duda, ampliamente las supera.
Genial de principio a fin. Necesitas 1 minuto para engancharte en el primer capítulo, y después desearás que no termine jamás.
13 capítulos memorables, alucinantes y brutales.
Críticas: 6
DE NIRO
8
es una serie que los amantes del terror y sobre todo de la histora de las brujas de salem deben ver obligatoriamente, las tres temporadas no tienen desperdicio si bien hay altibajos como en todas las series, algunos capitulos tienen mucha sangre y escenas de las brujas que son muy sexies y bonitas, lo mejor es la ambientacion de esa ciudad de salem, está cuidado hasta el mas minimo detalle, buenas escenas de terror, nose puede pedir más.
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