Sinopsis:
El protagonista es el cazador de vampiros Simón Belmont que, después de derrotar al conde Drácula, queda con heridas que le provocan una maldición. Para liberarse de la maldición, deberá recolectar 5 partes de Drácula (uña, hueso, corazón, anillo y ojo) y quemarlas. Estas partes se encuentran en las cinco mansiones de Drácula que aparecen en el juego y que, para ser obtenidas, deberá lanzarse + una estaca sobre ellas. Cada una de estas partes de Drácula le brinda a Simon Belmont una habilidad especial como, por ejemplo, el hueso de Drácula, que le permite obtener un escudo que lo protege de los ataques de los enemigos. Además, en esta serie, a diferencia de las otras que se desarrollaron para la NES, se presentan algunos conceptos interesantes, como el ganar experiencia al derrotar enemigos y así obtener mayor energía y resistencia, finales alternativos y el cambio entre día y la noche. En el día, los enemigos serán más fáciles de derrotar, pero en la noche, éstos adquieren mucha más resistencia y sus ataques afectarán más al protagonista del juego. Otro aspecto interesante es que en este juego pueden visitarse pueblos en los cuales Simon puede recuperar su energía, conversar con personas que le dan pistas para conseguir objetivos (algunas pistas pueden ser falsas) y comprar ítems que le faciliten su misión.
Jack el Destripador
¨Castlevania II: Simon¨s Quest¨ es uno de esos juegos de culto que o los amas o los odias. Los que lo aman, lo aman por hacerles vivir auténticas aventuras. Los que lo odian, lo odian por no ser lo que ellos esperaban. A mi, por mi parte, me entretuvo. Es más, me pareció bastante original y viví en él una experiencia que nunca volveré a vivir en otro juego, aunque debo reconocer que tiene sus fallos.
El juego pertenece al subgénero... (seguir leyendo)