La leyenda urbana de Hoodman es ficticia, pero tiene fundamento en hechos reales. Los espíritus encapuchados empezaron a aparecer en la literatura a partir del siglo III. A estos también se les conoce como ¨Genii Cucullati¨ y también han sido representados en esculturas religiosas en regiones romanas y celtas.
Gerpro
Ariana tiene una distracción mientras maneja su auto y tiene un grave accidente. Lo peor es que estaba en compañía de su pequeño hijo Joshua.
Ella recupera el sentido en el hospital, donde los médicos y la policía la consuelan por la pérdida del bebé, pero contra toda lógica, la protagonista comienza a argumentar que el pequeño no está muerto sino que fue secuestrado por ¨Hoodman¨, una leyenda urbana con la figura de un hombre con capa negra... (seguir leyendo)