El peculiar carácter de Lon Chaney Jr. provocó varias anécdotas durante el rodaje de esta peli, según su biógrafo Don G. Smith:
- William Farnum, que interpreta al párroco, era muy amigo de Lon Chaney Sr. Como era muy anciano, olvidaba las líneas con frecuencia y desesperaba al director, que no lo trataba nada bien. Chaney amenazó con abandonar el proyecto si no trataban bien al viejo y le daban una silla de estrella (un silla con su nombre).
- Por otro lado, los problemas de alcoholismo de Chaney se se acentuaron en esta película. Se metía entre pecho y espalda una botella de bourbon al día. Virginia Christine (Ananka), comentó que Lon era un buenazo, con un corazón tan grande como él mismo. Pero le gustaba demasiado beber. En una escena en que Kharis sube a Ananka por las escaleras de un templo, Christine tuvo miedo de tener un accidente: Lon iba caracterizado y llevaba un peo considerable. Encima esos escalones eran viejos y estaban medio podridos, y encima con una chica en brazos... Virginia pensaba ¨Se va a caer, se me va a caer encima, es el fin.¨ Afortunadamente, el director vio el esttado de Chaney y lo sustituyó por un doble sobrio.
- En otra ocasión Lon tuvo los santos cataplines de presentarse en el set caracterizado como Kharis con su botella de Bourbon en la mano. Se estaba allí, de pie, quieto, con su botellita, mirando como el equipo preparaba el material para rodar en exteriores. El director le rogó que se moderara con el bourbon de cara a la escena que tenía que rodar. Chaney, airado, le contestó: ¨Por qué? Si no tengo diálogos y solo tengo que arrastrar el culo por el lodazal este¨.
- Chaney y Martin Kosleck (Ragheb) se tenían una ojeriza enorme a raiz de un rodaje anterior. Parece que, deliberadamente borracho solo por fastidiarle, Chaney le pegó una bofetada ¨accidental¨ al más puro estilo Bud Spencer al girarse en una escena en que tenía que estrangularle. En una escena en que lo perseguía, tras cortar, Lon siguó haciendo de Kharis y fue acosando a Kosleck allí donde iba. Kosleck acabó de los nervios.
bigladiesman
El peculiar carácter de Lon Chaney Jr. provocó varias anécdotas durante el rodaje de esta peli, según su biógrafo Don G. Smith:
- William Farnum, que interpreta al párroco, era muy amigo de Lon Chaney Sr. Como era muy anciano, olvidaba las líneas con frecuencia y desesperaba al director, que no lo trataba nada bien. Chaney amenazó con abandonar el proyecto si no trataban bien al viejo y le daban una silla de estrella (un silla con su nombre).
- Por otro lado, los problemas de alcoholismo de Chaney se se acentuaron en esta película. Se metía entre pecho y espalda una botella de bourbon al día. Virginia Christine (Ananka), comentó que Lon era un buenazo, con un corazón tan grande como él mismo. Pero le gustaba demasiado beber. En una escena en que Kharis sube a Ananka por las escaleras de un templo, Christine tuvo miedo de tener un accidente: Lon iba caracterizado y llevaba un peo considerable. Encima esos escalones eran viejos y estaban medio podridos, y encima con una chica en brazos... Virginia pensaba ¨Se va a caer, se me va a caer encima, es el fin.¨ Afortunadamente, el director vio el esttado de Chaney y lo sustituyó por un doble sobrio.
- En otra ocasión Lon tuvo los santos cataplines de presentarse en el set caracterizado como Kharis con su botella de Bourbon en la mano. Se estaba allí, de pie, quieto, con su botellita, mirando como el equipo preparaba el material para rodar en exteriores. El director le rogó que se moderara con el bourbon de cara a la escena que tenía que rodar. Chaney, airado, le contestó: ¨Por qué? Si no tengo diálogos y solo tengo que arrastrar el culo por el lodazal este¨.
- Chaney y Martin Kosleck (Ragheb) se tenían una ojeriza enorme a raiz de un rodaje anterior. Parece que, deliberadamente borracho solo por fastidiarle, Chaney le pegó una bofetada ¨accidental¨ al más puro estilo Bud Spencer al girarse en una escena en que tenía que estrangularle. En una escena en que lo perseguía, tras cortar, Lon siguó haciendo de Kharis y fue acosando a Kosleck allí donde iba. Kosleck acabó de los nervios.
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