Pasable película de zombies y fútbol, donde lo que más destaca son los efectos visuales.
La historia es típica pero no por ello mala, tiene muchísima acción y le sobra ese humor francés que no hace gracia ninguna.
Es demasiado larga para el tipo de película que es, tiene bastante relleno de escenas tontas y algunas cómicas que pasan bastante desapercibido. Roza el género bizarro, pero no logra superar las puertas.
Actualmente el género zombie es uno de los más explotados comercialmente y en el año del mundial nos llega desde Francia ¨Goal Of The Dead¨ de los mismo productores y uno de los directores de la correcta y entretenida ¨The Horde¨.-
El guión es regular, tomando como escenario un partido de futbol y la posterior infección zombie nos lleva a situaciones comunes vista una y mil veces, sin sorpresas ni vueltas de tuercas con toques de humor que restan en vez de sumar.-
Las actuaciones también son regulares con personajes bastantes planos y sin desarrollo alguno, lo mejor del film son sus fx´s en especial el maquillaje, los infectados están bien caracterizados aunque se extraña la falta de mayor gore, muertes y enfrentamientos más violentos.-
La dirección es mala, el film se estructura (cual partido) en 2 tiempos de 1 hora c/u con un toque particular de presentar los créditos iniciales y su títulos luego de la primer hora en el ¨entretiempo¨. En el ¨primer tiempo¨ no pasa casi nada se nos presenta a los personajes pero el desarollo es tan cansino que se torna aburrido; en el ¨segundo tiempo¨ con la infección desatada el film levanta un poco pecando en prometer más de lo que realmente ofrece al espectador y su final me pareció algo precipitado.-
Mi puntuación: 4 MUY REGULAR ¨TARJETA NARANJA¨ para ¨Goal Of The Dead¨ sin llegar a ser roja zafa del aplazo por algunos momentos del segundo tiempo y sus efectos y buen apartado técnico. Personalmente no la recomiendo, están avisados...
Saludos y un abrazo desde Argentina.-
De lo peor que he visto este año.
Larga hasta decir basta, sin ninguna gracia pese a venderse como una comedia y con un argumento que parte de un foco de infección poco justificable para derivar en una mezcla de drama familiar y tópicos futbolísticos que no han captado mi interés ni por un segundo. Apareció en pleno Mundial y se nota que su mejor, y única al parecer, baza era venderse en ese contexto.
Una tremenda pérdida de tiempo su visionado y un ejemplo de cómo dar mal nombre al desgraciadamente vapuleado género zombi.
Está claro que en algo tan sobre explotado como los zombies ya vale cualquier cosa, y mas que valer es que se acepta, porque está todo tan visto que cualquier idea por tonta o increíble que parezca puede dar lugar a algo medianamente potable.
Esta vez toca mezclar fútbol con muertes vivientes, aunque más correcto seria llamarlos infectados vomitadores porque es lo único que hacen. La historia se sitúa en esa delgada línea que separa la comedia y el terror, con algún que otro susto o más bien arcada gracias a nuestros amigos los aspersores humanos. Que la verdad, hay que reconocer el resultado no está del todo mal, pero no, los franceses han querido hacer su propio ¨Dead Set¨ sin conseguirlo y a las casi dos horas que dura le sobra al menos media hora siendo generosos.
Pero hay que reconocerles el esfuerzo, y si bien el argumento es endeble no lo son los efectos especiales y el maquillaje que disfrutan de un trabajo soberbio, incluso esos efectos de cámara abusando un poco del slowmotion se agradecen.
Por lo demás, los actores son correctos no así sus personajes, sobre todo el eterno rival que parecía que iba a dar más juego y al final ni chicha ni limonada, vamos como casi el 90% de los infectados que salen, aparte de echar hasta la primera papilla (literal) poca acción más ofrecen.
No está mal dado los tiempos que la han visto nacer, pero pensado en frío tampoco es para tirar muchos cohetes.
Una comedia que es más acertada que algunas de zombies que pretenden asustar y que han salido últimamente.
La película no gasta mayor tiempo en explicar el origen de la epidemia, solo que un jugador se pinchaba y la droga lo trasforma en un zombie vomitador que va contagiando a todo un pueblo.
Pues esta epidemia justamente se desata en medio de un importante partido, y los hinchas pasan a ser zombies ... Emmm... Sedientos por ... Contagiar??. Hay algo que no me termina de calzar en la filosofía zombie de este filme.
Pero lo importante es que toda la película tiene deliciosos detalles humorísticos a veces obvios y otras veces bastante sutiles, pero que hacen que el filme sea entretenido.
Además hay una visión de cine francés en el , que le impregna cierta ¨profundidad¨ que la hace destacable.
Comedia alocada, que entretiene , aunque con 20 minutos menos estaría perfecta.
Película francesa de zombies, enfocada en el futbol y una epidemia que se desata en pleno partido de futbol. Pues bien, estamos ante una comedia con zombies, que no muerden, pero vomitan y de esta manera contagian.
El filme comienza bien y logra entretener, aunque no termina de convencerme del todo, tiene buenos momentos. El final en la cancha de futbol me pareció algo tirado de los pelos a mi parecer pero dentro de todo lo que ha salido de zombies ultimamente, es aceptable.
Película francesa muy en la linea de Dead Set, cargada de mucho humor negro, pero que al ser humor francés, personalmente no me ha hecho mucha gracia.
A parte del humor, estamos ante una cinta de gran presupuesto, una puesta en escena espectacular y grandes efectos especiales y gore. La historia entretiene, pero me parece que tiene una carga excesiva de humor negro que para mi rompe un poco el ritmo del filme.
Aún así, muy disfrutable por los amantes del subgénero de zombies.
Críticas: 8
Miguel Arkangel
5
Un equipo de fútbol parisino de primera división viaja a una localidad rural para enfrentar a un pequeño club amateur, pero ocurre un brote de infección zombi que pone a correr a todos por sus vidas.
Mezcla de géneros, se divide, como un partido, en dos mitades: la primera dirigida por Benjamin Rocher, la segunda por Thierry Poiraud. El humor francés no es especialmente de mi agrado. Así que una película francesa de humor negro y de zombis, me atrajo, pero no me convenció.
Hay un par de buenos chistes, una crítica al futbol (al mercantilismo que está matando su espíritu deportivo, según reconoce uno de los personajes), sus fanáticos ultras, sus viejas glorias, el entrenador, la estrella en ascenso. La parte zombi sí es divertida. El artesano de los efectos especiales Olivier Afonso hace un excelente trabajo al convertir el jarabe de maíz en un vómito alucinante y en los momentos sangrientos como una decapitación y la inevitable escena (teniendo en cuenta su temática) de una cabeza utilizada como balón de fútbol.
Se deja ver, pero dos horas de metraje me parecieron excesivas.
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