continuacion de Mad Doctor Of Blood Island, que a mi parecer se queda muy por debajo de su antecesora, sin ser la gran maravilla la primer parte, es toda una maravilla al lado de esto.
el monstruo esta muy bien en esta pelicula, sus escenas sin cabeza da mucha gracia en si,pero cumple,lo malo es que desaprovecharon a don ramon (asi se llama el monstruo) con muy pocas apariciones, y el resto del filme es una lucha entre los buenos y los malos,,, mas que nada pasearse por la jungla armados y con dialogos muy mal hechos.
en definitiva una mala continuacion que podria haber dado mucho mas.
Críticas: 2
Miguel Arkangel
5
El director Eddie Romero y Josh Ashley volvieron a formar equipo para esta secuela, de hecho, “Beast of Blood” comienza en el punto exacto en que terminó “Mad Doctor of Blood island”. La primera escena, previa a los créditos, te mete de lleno en la trama, con un zombi de sangre verde que mata a machetazos a un grupo de personas a bordo de un barco antes de que explote, sobreviviendo solo el Dr. Foster (Ashley).
Foster es un suertudo, pues su amor se lo disputan la rubia Celeste Yarnall, que interpreta a la intrépida periodista Myra Rusell, y la filipina Liza Belmonte, que interpreta a Laida, una guía nativa. Ambas mujeres son más carismáticas y llenan más la pantalla que sus compañeros varones. Salvo, claro, el monstruo (que tienen el nombre de Don Ramon) cuya cabeza, separada de su cuerpo, descansa en un frasco y está conectada a cables, luciendo como un vampiro que ha sido gravemente quemado. Este ser monstruoso, y de nombre gracioso, es una buena razón para ver este film.
Los primeros y últimos cinco minutos de la película son, de largo, los mejores; aunque las escenas en el laboratorio del Dr. Lorca también tienen su encanto bizarro.
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