Interesante film antiguo que despista al espectador con su título porque su historia no discurre para nada sobre un barco fantasma sino que se centra en la disputa entre un marinero y su superior en la que el primero quiere convencer a los demás integrantes del barco de la locura del primero y de que este no puede manejar el barco.
Correcta, la trama nos lleva por una serie de muertes y las dudas que tiene el marinero acerca de la verdad que lo que sucede. Se sigue con facilidad y los actores están más que correctos con algunos buenos encuadres de cámara con el mar.
De esos film que siempre valen la pena ver.
Película correcta de intriga con algunos altibajos. Está muy bien narrada y dirigida y las interpretaciones son correctas. Se puede ver si uno se considera cinéfilo.
Buena peli de misterio de los años 40 con ese aroma clasico que tienen este tipo de cine buen argumento y actuaciones bien interpretadas
Es una de esas películas que para los amantes del cine de misterio de los años 40 en blanco y negro, es de obligado visionado. La película tiene un comienzo prometedor, con un barco que zarpa hacia alta mar, un capitán misterioso, un nuevo miembro en la tripulación y unos marineros característicos, sobre todo el mudo.
La atmósfera promete de verdad, con un halo de desconcierto, niebla, soledad y tétricas secuencias del barco en blanco y negro. Cuando se está visualizando el film, titulado el barco fantasma, no se sabe bien a lo que te enfrentas....¿un barco encantado?, ¿un fantasma?, ¿un asesino?....esa es la baza principal de la película.
Lo malo que tiene es que hacia la mitad del film, abandona esa magnífica atmósfera, para hacer una especie de drama y crítica sentimental, aprovechando que el barco atraca en un puerto. Para mi aquí pierde la calidad que tenia al principio. Por suerte, la película entra en una 3ª fase de nuevo en el barco magnífica donde ya se muestra la verdadera intención de la historia que se acerca más hacia la psicopatía que a lo fantástico.
Me pareció magnífica la secuencia con la que se resuelve el film por su sencillez y a la vez por su efectividad; mientras el protagonista está atado, el mudo lucha con un cuchillo contra el malvado capitán, en silencio, por el alboroto de la música del exterior. Pero es una lucha incluso sangrienta por la época y una buena utilización del arma blanca, terroríficos cuchillos.
Recomendable dentro del suspense y misterio de los años 40, en blanco y negro.
Críticas: 5
Miguel Arkangel
7
Producida por el gran Val Lewton, padre del cine de terror de la RKO, dirigida por Mark Robson (que también dirigirá La séptima víctima) y con la presencia de Richar Dix, la película no tuvo distribución durante muchos años debido a una demanda por plagio.
Tom Merriam es el nuevo tercer oficial en el barco The Altair al mando del Capitán Stone. Al principio las cosas se ven bien. El Capitan y el joven oficial parecen congeniar. Pero cuando los miembros de la tripulación comienzan a morir misteriosamente, Merriam comienza a pensar que el Capitán es un loco psicópata obsesionado con la autoridad de poder decidir sobre la vida y la muerte de sus hombres. Intenta decírselo a los demás, pero nadie le cree...
Estamos ante un buen thriller, ambientado casi en su totalidad en un barco. No hay fantasmas ni nada sobrenatural, como podría suponerse por el título del film, pero si hay una interesante visión de las consecuencias de cuestionar, y enfrentar, al poder y a la autoridad. Dix le da a su personaje una sombra de lo monstruoso, que bajo la máscara de un hombre de pose aristocrática, que representa la autoridad, apenas oculta la maldad que anida en su interior.
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