Ficha La Muchacha que Sabía Demasiado

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Críticas de La Muchacha que Sabía Demasiado (14)




gines

  • 8 Feb 2023

6


Para ser considerada la primera peli giallo en realizrse no es tampoco para tirar cohetes, es buena, pero no me convence como otras que he visto de este subgénero, tanto de este director como de otros.

La peli es más una historia de investigación policial que un giallo puro y duro, no hay apenas muertes, y el asesino como tal ni se ve, solo al final se descubre quien estaba detrás de todo.

Eso sí, el blanco y negro le sienta muy bien, es como una de Hitchcook pero con el sello, Bava.

Buena, pero de verdad que me esperaba más giallo/slasher.



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ivankiller

  • 23 Oct 2021

7


Furor de misterio y crimen.

Este Proto-Giallo se siente mas como una cinta clásica de Hollywood que otra cosa, teniendo la ventaja de ostentar una sobresaliente cinematografía gracias a un buen uso de las luces y sombras. Es uno de esos casos donde el blanco y negro ayuda a acentuar la atmósfera elegante y el suspenso de la película.
La protagonista es particularmente identificable. Adora las historias de crímenes al igual que la audiencia prevista, y logra darse cuenta de que esta por formar parte de una, usando esto para su ventaja... ¿O tal vez lo lleve demasiado lejos? Les recuerdo que esto no es Hollywood sino una producción italiana, un tributo de Bava para Alfred Hitchcock. Por experiencia, seria sabio asumir que nada esta fuera del alcance y cualquier cosa puede pasar.

En general, es un thriller correcto donde todo encaja bien, teniendo un humor sutil y a un joven John Saxon todopoderoso para animar las cosas.



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TANO

  • 22 Jan 2021

8


Esta película es básicamente el proto-giallo, o al menos una de las que dieron lugar a ese subgénero que tanto nos gusta a algunos de nosotros.
La película tiene uno de los mejores comienzos que recuerdo haber visto en una película, es todo tan exageradamente intrigante que uno desea que la película acelere para ir descubriendo todos los pequeños detalles de una trama que está bien tejida y va resolviéndose muy poco a poco, dando lugar en ocasiones a más intrigas y callejones sin salida.
Para mi gusto, el toque de humor sobra, o al menos no está bien implementado en la peli, siendo la mayoría de las veces más tonto que divertido.
La parte final es realmente buena, marcando como serían los típicos finales inesperados de los giallos. Una película que vale la pena ver.



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Orlak

  • 25 Jul 2019

6


Para ser sincero esperaba mucho más de esta película porque siempre había escuchado maravillas de ella. Pero la encontré muy rutinaria, sin ritmo y aburrida por momentos. Lo único que puedo decir a su favor es que tiene buena fotografía, notable ambientación y alguna que otra escena bien realizada; fuera de eso la historia no me convenció y se me hizo que tiene algo de relleno y situaciones ridículas e innecesarias.



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mahotsukai

  • 26 Apr 2019

7



Correcto giallo, considerado el primero del género, a cargo del gran Mario Bava.

Nora Davis, una chica aficionada a las novelas policíacas, viaja a Roma para visitar a su tía. Luego de que ésta sufra un infarto y Nora salga a pedir ayuda, presenciará un horrible crimen en plena calle.

A inicios de la década de los 60s, tras el éxito e impacto mediático de los thrillers “Psicosis” (1960) de Alfred Hitchcock y “Pepping Tom” (1960) de Michael Powell, se llevarían en Italia a cabo las primeras incursiones cinematográficas basadas en las emblemáticas y clásicas historias pulp de misterio conocidas como “II Giallo Mondadori”, publicadas a partir de 1929, y que en primera instancia eran traducciones al italiano de novelas de misterio y crimen de autores británicos y estadounidenses como Agatha Christie, Edgar Wallace y Ramond Chandler, entre otros. Su éxito posibilitó que durante los 50s especialmente se comenzaran a publicar obras locales, que en formato bolsillo y con sus características portadas amarillas, finalmente se hablara del giallo all’italiana.

El gran visionario y pionero de estas primeras adaptaciones al cine no fue otro más que el talentoso fotógrafo y director italiano Mario Bava, quien inauguraría el sugénero giallo con “La ragazza che sapeva troppo” (1963). Bava había participado activamente también en la inauguración del exquisito horror gótico italiano con “I Vampiri” (1956) de Riccardo Freda en la fotografía y dirigiendo algunas secuencias de ésta, teniendo su debut como director finalmente en la legendaria “La maschera del Demonio” (1960), considerada la película gótica italiana por excelencia. Por lo tanto, esta nueva aportación de creatividad no es más una nueva demostración de la enorme e innegable capacidad del futuro director de “L’ecologia del delitto” (1971) por ir siempre un paso más allá.

La génesis de “La ragazza che sapeva troppo” (1963) se encuentra en un periodo que los fanáticos podrían llamar “extraño” en la vida de Mario Bava, curiosamente después de haber alcanzado un sólido éxito en su debut con “La maschera del Demonio” (1960). El italiano seguía demostrando mayor interés en el cine épico y aventuras, y prueba de ello fue la prolífica producción en 1961 de cinco películas de este género (“Ester e il re”, “Ercole al centro della terra”, “Gli Invasori”, “Le meraviglie di Aladino” y “L’ultimo dei vikinghi”), pensando seriamente en dejar la dirección y volver a dedicarse exclusivamente a su mayor pasión, la fotografía. Fue en ese momento que los productores estadounidenses Samuel Arkoff y Jim Nicholson, que había distribuido “La maschera del Demonio” (1960) en Estados Unidos, evitarían lo que habría sido una lamentable decisión por parte del padre del giallo italiano, proponiéndole una comedia romántica con tintes de thriller. El director, que había estado familiarizándose frecuentemente de la literatura de crimen y misterio en el último, finalmente aceptaría la oferta y guiado por cierta inspiración que había encontrado en los libritos de giallo, transformaría la idea de comedia romántica en un interesante thriller de misterio en la línea de Hitchcock.

En el guión de “La ragazza che sapeva troppo” (1963), desarrollado por Enzo Corbucci, Ennio de Concini y Eliana de Sabata, Mario Brava introduciría los principios canónicos narrativos que harían del giallo uno de los subgéneros del terror y del thriller más populares y emblemáticos del cine de misterio europeo durante los 60s, 70s y parte de los 80s, subgénero al que posteriormente aportarían y consolidarían cineastas como Sergio Martino (“Lo strano vizio della signora Wardth”, 1971; “La coda dello scorpione”, 1971; “Tutti i colori del buio”, 1972), Umberto Lenzi (“Sette orchidee macchiate di rosso”, 1971, “Spasmo”, 1974), el subestimado Lucio Fulci (“Una lucertola con la pelle di donna”, 1971; “Non si sevicia un Paperino”, 1972) y, por supuesto, el gran Dario Argento (“L’uccello dalle piume di cristallo”, 1971; “Profondo Rosso”, 1975).

El primero de estos elementos es presentar una trama inicialmente anecdótica, con un protagónico también anecdótico, que termina involucrado en una intriga criminal como testigo ocular de un asesinato y que se convierte en una potencial víctima al ser perseguida por el asesino. Tal es el caso de Nora Davis, turista estadounidense que viaja a Italia a visitar a una tía, y asustada ante el ataque cardíaco de ésta, decide salir a buscar ayuda, presenciando un horrible crimen en la Piazza di Spagna. Luego de semejante espectáculo, la muchacha sufrirá el acoso constante del asesino, teniendo que hacerse cargo de averiguar la identidad de éste, ya que siendo extranjera nadie cree en su historia y todos parecen considerarla una loca.

Sirviéndose de giros argumentales y, en muchos casos, delirantes que llevaban a ciertos problemas de coherencia, Bava invitaría al espectador a participar de un ingenioso juego de despites sobre la identidad del asesino, en donde las decisiones que toma la heroína y las meras coincidencias parecen no ir mucho en la línea coherente de la trama, pero sí marcar un estilo que se pasea entre lo anecdótico, lo alucinante y lo pesadillesco, que por supuesto Bava expondrá de forma sólida e interesante con su acostumbrada y notable fotografía, en un impecable blanco y negro, que a la postre sería la última película en fotografiar de este estilo. Desconcertante y, a la vez, seductora en este juego ambiguo, la posibilidad de que nuestra inteligencia deductiva sea puesta a prueba, remite a que, al final de cuentas, ésta sea una experiencia disfrutable.

Estas inquietudes no son más que una prueba concreta de la intención de Mario Bava de homenajear a Alfred Hitchcock, a la italiana. El leitmotiv del film presenta y explora las posibilidades del asesinato en serie en una clave perversa, pero no exenta de simbolismo, como es el hecho de que el asesino establezca su propio modus operandi, en base a las letras del alfabeto. De esta forma, concretados ya tres muertes (víctimas con apellidos que comienzan con A, B y C), será el turno de Nora de caer en la mira del criminal, no sólo en una cuestión de antojadiza selección (D por Davis), sino en el detalle que la mujer, al presenciar accidentalmente cómo ataca el asesino, termina por convertirse urgentemente en la próxima víctima, porque tal como lo señala el nombre del film, sabe demasiado.

Otro elemento que pudiera parecer desconcertante, en todo caso, en “La ragazza che sapeva troppo” (1963) es la veta cómica que el film posee en varias secuencias, y que los críticos debaten como una imposición -moderada, hay que recordar que el guión original definía concretamente una comedia romántica- de Arkoff y Nicholson, o una clara muestra de que Bava no se tomó nunca en serio el film, al tratarse de un experimento cinematográfico. De esta forma, se me vienen a la mente secuencias como la trampa de hilo que Nora arma en la casona donde se hospeda y que deja a su pretendiente, el Dr. Bassi, con media casa enredada en los pies y en el piso, o el constante flirteo entre ambos, con Bassi más preocupado de Nora que de atender a sus pacientes.

El reparto principal fue encabezado por la bella Leticia Román (“Sechs Pistolen jagen profesor Z”, 1966) quien encarnó a Nora y el ítaloamericano John Saxon (“Tenebrae”, 1982; “A Nightmare on Elm Street”, 1984) como el Dr. Bassi, pareja que a pesar de todo tiene una buena química escénica, secundados por Valentina Cortese (“L’iguana dalla lingua di fuoco”, 1971; “Fratello Sole, Sorella Luna”, 1972) y Dante DiPaolo (“Maciste nella terra dei ciclopi”, 1961), como Laura Craven-Toranni, la curiosa nueva amiga de Nora que le ofrece su casona para hospedarse en Roma y el reportero con un final trágico, respectivamente.

“La ragazza che sapeva troppo” (1963) tuvo dos versiones, una italiana y otra estadounidense, siendo la primera la más valorada por los fanáticos del giallo, ya que prescinde bastante más de la naturaleza de comedia romántica que inicialmente tenía el film. Esta versión italiana también contempla un relato en off y un énfasis mayor en la escena inicial del aeropuerto con el traficante de marihuana y la escena de los cigarros, que Bava decidió resaltar como una supuesta pista para que el espectador dudara si toda esta experiencia traumática, fue real o producto de una alucinación.

El tema musical de la película fue interpretado por Adriano Celentano, mientras que Roberto Nicolosi repite como compositor del score, después de haber trabajado con Mario Bava en “La maschera del demonio” (1960) y “Eric, el conquistador” (1961).

En resumen, un film interesante, no exento de detalles pero que se alza, una vez más, como uno gran ejemplo de la capacidad visionaria de su director, que buscando homenajear al gran Hitchcock, crearía uno de los más destacables y populares subgénero del terror italiano. La evalúo con un 7.5.



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fabio2000

  • 6 Jan 2018

7


El hombre que sabia demasiado.

El auspicioso debut de Mario Bava como director en ¨La máscara del demonio¨ (1960) no hizo mas que poner feliz a los jefes de la Galatea Film, que junto a Riccardo Freda habían insistido tanto en que Bava se animara a dirigir un largometraje solo.
En ese intervalo de tiempo, Mario Bava siguió dirigiendo algunas películas que reclaman su autoria completa pero que tan solo fueron dirigidas por el en algunas pequeñas escenas. Ahí pasaron en 1961, ¨Hércules en el centro de la tierra¨, ¨Las maravillas de Aladino¨, y ¨La furia de los Vikingos¨, esta última película es en la que mayor participación tuvo (inclusive lo acabaron acreditando como único director).
Ya en 1963, Bava volvería a tener sus siguientes experiencias como director en solitario estrenando en el mismo año tres películas. La primera de ellas fue ¨La muchacha que sabia demasiado¨, un proyecto que la Galatea le desarrollo y termino significando el puntapié para iniciar un nuevo subgénero en Italia: el Giallo.
Pero el Giallo cinematográfico surgió como consecuencia de las baratas novelas policíacas italianas, y su traspaso al cine vino dado por la influencia de películas como ¨Psicosis¨ de Alfred Hitchcock y ¨El fotógrafo del pánico¨ de Michael Powell.
Básicamente el Giallo consiste en trabajar cada muerte con el mayor esteticismo posible, con un asesino de por medio, usando la iluminación como fuente primordial del suspenso, y consiguiendo una puesta en escena casi pictórica.
¨La muchacha que sabia demasiado¨ (1963), de Mario Bava, se considera el Giallo inaugural, que sera presidido con mucho éxito por otros autores italianos como Lucio Fulci, Dario Argento, Sergio Martino, Umberto Lenzi y Michele Soavi.
Este segundo largometraje oficial de Mario Bava fue llevado a cabo con casi el mismo equipo de ¨La máscara del demonio¨ (1960), incluyendo a uno de los guionistas de su primer film, Ennio De Concini.
-¨La muchacha que sabia demasiado¨ trata sobre una joven americana (Nora Davis) que va a visitar a su tía enferma en Roma. La misma noche de su llegada, la anciana muere, y al no funcionar el teléfono decide ir a buscar ayuda a la calle, donde un hombre le roba y le hace perder el conocimiento.
Nora recobra el conocimiento durante varios segundos, suficientes para ver cómo una mujer es asesinada a pocos metros.

¨La muchacha que sabia demasiado¨ es una película tan Hitchcockiana como de Mario Bava por varias razones: presenta la esencia (alternando los tonos graves y distendidos) y aborda los temas típicos de los films del mítico cineasta británico, pero también tiene la magia y el talento del autor italiano, así como un siempre fundamental trabajo lumínico.
Por medio de una trama bien Hitchcockiana, Mario Bava establece los primeros parámetros del Giallo de manera formidable. El argumento abre una serie de incógnitas y dilapida cualquier predicibilidad argumental, así va construyendo una entretenida y solida producción con mas aroma del los 50 que de los años 60.
Mario Bava se encarga -nuevamente- de la fotografía, presentando un trabajo mucho mas básico y clásico pero no por ello menos importante para la trama.
La iluminación le servirá a Bava para darle a los exteriores una atmósfera sombría, urbana y sucia, mientras que en los interiores del departamento se crea en los espacios algo inquietante y amenazante.
No es el mejor film de la filmografía de Mario Bava, pero si es una pieza realmente atractiva y bien realizada, donde Bava viste de Hitchcock y repite sus operaciones principales, consiguiendo escenas interesantes combinadas con una excelente puesta en escena, algo que Bava ya demostró saber hacer muy bien desde su prometedor debut.
Leticia Román aporta la cuota de belleza y simpatía que su personaje necesaria. Resiste el peso de una trama de una sola linea narrativa que siempre empieza y termina en su personaje. La secunda correctamente el galán John Saxon con poca expresividad pero de rendidora presencia.
¨La muchacha que sabia demasiado¨ posee un guión que construye muy bien el suspenso, pero claro que lo que coopera también es la elección de los planos, donde se muestra lo justo y necesario para sembrar el factor duda. El film distribuye el conocimiento que tiene el espectador y el que tiene el personaje de una manera formidable, al punto de que jamas uno iguala al otro, y eso es lo que hace que ¨La muchacha que sabia demasiado¨ funcione como una gran película de suspenso.
La película no olvida nunca el humor y le da con ello una cierta ligereza a la trama, descomprimiendo la densidad con muy buenos momentos como los del inicio del film o el propio final, donde el personaje de Leticia Román suelta una linea que podría chistosamente justificar todo lo que vimos.
La banda sonora es ágil y funcional a lo que ocurre en la cinta. Roberto Nicolosi compone a la altura de las circunstancias, y siempre lo hace con la característica que la escena requiere.
Una gema valiosa de los inicios de Bava. Este segundo largometraje no llega a ser riguroso como su ópera prima, pero es imprescindible para entender la evolución del Giallo, y de paso para disfrutar de otra extraordinaria cinta que el director italiano nos regalo en sus comienzos.
Actuaciones:7.0
Música:7.0
Historia:7.5
Final:7.0

Mi nota para ¨La muchacha que sabia demasiado¨ es un 7.5/10. Muy buena.



Lo mejor: La ligereza de la trama que le juega mucho a favor.
Lo peor: Para llegar a un final redondo, el guión recurre a una serie de trampas algo tiradas de los pelos pero funcionales.



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bigladiesman

  • 8 Oct 2016

7


Mario Bava dio el tiro de salida al giallo cinematográfico (el literario ya hacía tiempo que existía) con esta película de suspense sobre una muchacha bastante gafe y demasiado aficionada a la novela negra y detectivesca que presencia la detención de un camello y ve como todo se le tuerce a partir de entonces, sintiéndose cual Quijote como una Jane Marple, una Michaela Hammer o una Phillipa Marlowe.

Protagoniza la película Letícia Román, bella actriz que tuvo una corta carrera entre Hollywood e Italia antes de dedicarse a los negocios con grandísimo éxito. Su interpretación es bastante buena, moviéndose entre la jovialidad natural de su Nora Davis y la inseguridad y pánico que le provocan las desdichas que le están pasando. John Saxon estaba en su etapa de conversión de chico surfero de la Costa Este que fascinaba a las chicas y a Terenci Moix a icono de la serie B internacional protagonizando algunas de las muchas pelis que hizo en Italia, patria de sus padres. Aquí es un médico evidentemente prendado de Nora y que tiene dudas sobre si lo que le pasa es de verdad o un transtorno psicosomático, y por todo ello se mete el pobre en unos berenjenaless... Hace un buen papel de galán cómico, pero está más bien para complementar a Román que para tener entidad propia. No nombro a ningún intérprete más salvo pasar de puntillas por la aparición de una grande del cine europeo: Valentina Cortese, aclamada por crítica y público por su aparición en ¨La noche americana¨, de 1973. Por el riesgo de spoilers, me abstengo de decir más.

Bava, junto a un equipo de varios guionistas encabezado por el oscarizado Ennio de Concini, se viste de Hitchcock y aplica casi toda la fórmula del director británico, con situaciones que son un auténtico ‘mindfuck’ al estilo de “Vértigo” o “Recuerda”, un buen uso del blanco y negro, mucho humor, y hasta un cameo del propio Bava.

Ya he nombrado la buena fotografía en blanco y negro del propio Bava, pero tampoco podemos obviar la banda sonora del compositor (y dentista) Roberto Nicolosi, habitual de Mario Bava, que combina el jazz con el repetido uso de una canción del celebradísimo y siempre divertido ídolo del rock humorístico que es Adriano Celentano.

Un muy buen producto de suspense, sobrio, entretenido y realizado con mucho ahínco.



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19deMayo

  • 4 Jan 2014

6


Con esta película Bava puso la piedra fundacional del Giallo, aunque es mas que otra cosa un homenaje al cine de Hitchcock y no sería hasta Seis Mujeres para el Asesino que el director italiano daría forma al género. La historia en sí no es nada del otro mundo, pero la fotografía en blanco y negro es sencillamente fascinante. También tiene un interesante uso de la voz en off, una especie de narración que nos remite a las novelas de misterios y asesinatos que tanto le gustan al personaje principal.



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ragman

  • 6 Dec 2012

8


me quito el sombrero ante este filme, es muy bueno,se nota la influencia de Alfred Hitchcock en esta pelicula de Mario bava, logro captar muy bien el cine hitchcockiano en gran medida.
este filme fue el pionero de lo que luego se consideraria Giallo, que luego amoldarian otros grandes como Dario Argento, Sergio Martino y hasta Lucio Fulci.
le tengo un gran aprecio a la muchacha que sabia demasiado pues era un filme que no esperaba mucho y lleno mis espectativas, hasta su banda sonora que en su momento me parecio horrible, hoy la llego a apreciar.

recomendable a quienes gusten de peliculas de Hitchcock o incluso quienes quieran incursionar en el subgenero Giallo, una obra de culto de Mario Bava.



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churchburner

  • 18 Aug 2011

7


Considerado el primer giallo de la historia ¨La Muchacha Que Sabía Demasiado¨ se ha convertido en una película de culto para los amantes de este subgénero tan popular en Italia, sobretodo en la década de los 70.

Es la que plantea las bases de una temática que, a lo largo de los años se irá modelando y adaptando a cada década con el paso de los años de la mano de directores como el propia Mario Bava, Aldo Lado, Dario Argento o el hijo del primero, Lamberto.

Con un comienzo quizás un poco forzado, la película tarda un poco en entrar en materia, puesto que Bava invierte un tiempo importante en presentar a la guapa protagonista.

Una vez empieza la verdadera trama, nos encontramos los elementos ya de sobra conocidos: Un crimen, una testigo, una investigación y el descubrimiento final. Todo ello acompañado de un humor especial, que la ahce bastante amena y entretenida.

Si bien contiene elementos algo superfluos e innecesarios, como esa voz en off que aparece en alguna que otra escenam, aunque éstos no empañan del todo el resultado final.

Más que digna precusora.



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zamenhof

  • 22 Oct 2010

7


Interesante film de Bava que usa con maestría los tonos oscuros para formar una Roma lugubre por momentos. A través del juego de sombras claras y oscuras forma un film con una buena ambientación e intensidad aunque también es cierto con algunas escenas mal resueltas de manera precipitada. En todo caso se divisa una gran atmosfera y una gran actuación sobretodo de la mujer principal del film. No es de los mejores films de Bava pero si una gran muestra de su tipo de cine. Mas que recomendable.



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Gorraaladadesupermario64

  • 15 Oct 2008

7


Una genial ambientacion como es propio de BAVA y el inicio oficial de lo que seria el famoso GIALLO. El blanco y negro hace un gran favor a la pelicula.



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PERICO

  • 15 Jun 2008

6


PELICULA HOMENAGE AL MAESTRO DEL SUSPENSE ALFRED HITCHCOCK. AUNQUE AHORA NO SORPRENDE A NADIE A MI ME GUSTO. UTILIZA TODOS LOS TRUCOS DEL GUIALLO, QUE MAS TARDE UTILIZARIA EL AUTENTICO MAESTRO DEL GUIALLO DARIO ARGENTO



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coffinjoebasc

  • 12 May 2008

7


esta bien, la vi hace tiempo, aunque el final era ridiculo,
jejeje, rocordad el detalle de lo de las drogas,tiene miga.



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Críticas: 14


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