Detrás de ese poco agradable título, se esconde una poco conocida, pero maravillosa película de Marco Ferreri; el cuál entremezcla de forma insólita varios géneros como surrealismo, ciencia-ficción, drama... La verdad es que es muy difícil clasificarla... Puesto que esta película se aleja totalmente de cualquier cliché o tópico, aunque es comparable con el estilo surrealista de L.Buñuel. Después de un apocalíptico inicio, una pareja se refugia en una especie de isla o playa desierta, alejándose de los devastadores desastres que asolan el mundo. Allí vivirán con total tranquilidad, mientras van sucediendo cosas bastante extravagantes... De las cuales destaca una inquietante ballena muerta (comentada con proféticos diálogos), y una curiosa intrusa que acabará fatal. La película tiene una gran profundidad de lectura, con muchas alegorías filosóficas y sociales que son muy difíciles de explicar... simplemente, hay que verla, y dejarse llevar por su irreal atmósfera visual... ah, y el final es realmente inesperado! y no muy feliz, por cierto. La primera vez que vi esta película, no me convenció; mas que nada porque me pareció demasiado rara, pero después de verla varias veces... ahora la encuentro fascinante. Eso sí: no la recomiendo a quién esté acostumbrado a ver el típico cine comercial. Lo que no entiendo es que la película tenga ese título tan poco apropiado, puesto que NO es un film erótico ni nada parecido; esto tiene que quedar claro. La recomiendo. Puntuación: 8.
Críticas: 2
Miguel Arkangel
6
Película de título peculiar con toques surrealistas, ciencia-ficción y crítica social, aunque en realidad difícil de clasificar, dirigida por el siempre interesante Marco Ferreri, y a la que, definitivamente, hay que darle un vistazo.
En un futuro distópico, una pareja sobrevive a una plaga devastadora que ha aniquilado a la mayoría de la población y se refugia en una casa aislada en una playa. El hombre desea embarazar a la mujer para comenzar a repoblar el mundo, pero la mujer se resiste. Entonces aparece otra mujer que no parece resistirse al sexo y al embarazo. Parece algo simple, pero en realidad suceden varias escenas memorables como el encuentro con una botella de Pepsi voladora, una ballena varada en la playa y un granero lleno de monigotes.
El ritmo por momentos es estático, pero su visión es aguda y anárquica sobre el futuro incierto que nos espera. En el rol protagónico femenino está Anne Wiazemsky, esposa de Jean-Luc Godard, que aceptó participar sólo cuando Ferrari le juró que eliminaría una escena de desnudo en un ménage à trois.
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