Mientras se producía el inesperado exito de ¨Duel¨, Steven Spelberg se puso a trabajar en este proyecto para TV, sobre una familia que se ha retirado a vivir en una casa rural, en Nueva Inglaterra, locación típica para este tipo de películas, y es perturbada por una presencia demoniaca.
El joven Spielberg se inspira en los viejos filmes ingleses de temática luciferina, pero agregándole sus propios códigos y símbolos, tales como la utilización del color rojo como metáfora de lo demoniaco; los estupendos planos, en un gran trabajo de cámaras; el terror que acecha desde el granero; sombras que se reflejan en las ventanas; la presencia del niño, que por cierto es pelirrojo.
Y aunque el guion no tiene suficiente fuerza para que el director realmente pueda hacer algo más memorable o cierre de una manera más provovadora, las escenas en que se presiente lo demoniaco están bien logradas, y Spielberg, pese a los limitados medios, logró momentos donde se respira una densa atmósfera de perturbación psicológica en los personajes.
Lo realmente curioso de este film es que en el ático de la casa que compra el matrimonio protagonista, hay justo la misma diminuta ventana o cristalera con, exactamente, la misma forma arqueada que la de Amityville (son exactamente iguales y, para más inri, ubicadas en el mismo lugar de la casa). Y lo realmente curioso del tema es que lo de Amityville ocurrió dos años después de que se estrenara esta película. Y, lo aún más chocante de todo es que la peli pone especial énfasis en dicha estructura, justo al comienzo y justo al finalizar. Eso sí que es realmente escalofriante. Respecto a la peli en si, solo dire que me he aburrido de lo lindo en sus escasos 70 minutos de duración. Me salía a cada momento de ella del coñazo que me estaba resultando. Lo que está claro son dos cosas. Primero: Es evidente que ha envejecido mal (para mí, en todo caso fatal) . Segundo: Posiblemente esta misma peli fotograma a fotograma, echa quince años atrás y en un majestuoso blanco y negro, entonces sí es seguro que me hubiese gustado.
Telefilme de 1972, sobre fenómenos paranormales y fuerzas malignas que acosan a una familia, tras instalarse en una vieja casa en el campo. Argumento sencillo y muchas veces ya visto en películas de temática similar. Sin embargo, esta cinta posee elementos bastante interesantes que la hacen merecedora de ser rescatada del baúl de los recuerdos.
Para empezar, es de esos films que pertenecieron a una serie de producciones televisivas de genero fantástico y terror, que surgieron en Estados Unidos sobre todo en las décadas de los 70 y 80. Eran películas de bajo presupuesto, de formato claramente de televisión, y de corta duración, que se solían emitir por los canales de USA, y que más tarde llegaban a Europa...y muchas veces se editaban en VHS. Recuerdo el espacio “Estrenios TV” en España, donde se emitieron telefilms muy interesantes, y muchas veces de género fantástico.
Una de las peculiaridades que tiene “Something Evil” (Algo Diabólico) es su dirección. Corrió a cargo de un jovencísimo Steven Spielberg, que ya empezaba a hacer sus pinitos y a dejar su huella personal...antes de irrumpir poco después en el mundo cinematográfico desde mediados de los 70.
Se nota su influencia en la cinta al centrar la historia en una familia, y en convertir el problema de ese ente maligno que los acechaba, en un drama familiar. Sobre todo en el personaje de la mujer, Marjorie, madre de dos hijos y esposa de un publicista...que es sobre la que gira el peso de la historia.
Los efectos especiales son bastante rudimentarios, pero en realidad no necesita más, pues la película se sobrelleva bien con ruidos, oscuridad, muebles que caen solos, o luces que se encienden y apagan solas.
Es curioso el símbolo que usa Majorie para la protección del hogar, una especie de pentagrama o estrella, aunque diferente al pentagrama conocido. También el detalle de cuando la actriz del anuncio que se rodaba en la casa le quita el colgante al niño Stevie. Con ese gesto lo desprotege de las garras del ente diabólico.
Los puntos a favor que tiene la película es mantener cierto enigma sobre que es lo que pasaba realmente en la casa, y a quien estaba tratando de poseer ese maléfico Ser. Todo indica a que influía a la madre, que casi pierde la cabeza y llega incluso a querer suicidarse en el granero...tal y como hizo el propietario anterior.
En las últimas secuencias es cuando más fuerza adquiera la película, al descubrirse quien era el que realmente estaba siendo poseído (atención a la escena de Stevie siguiendo a la rana y a lo que cuenta Harry momentos antes en su casa) y como se establece una lucha de fuerzas...El Mal contra el Amor. El Amor era a lo que Majorie se había referido varias veces en la historia, que era lo más importante para mantener unida a una familia...y el arma más poderosa para derrotar a aquella fuerza que poseía a Stevie. “Te Quiero”, llega a decir desesperada varias veces…
No hay mucho más a destacar en los apenas 70 minutos que dura el film… Algunas escenas, cuya fotografía se nota ciertos gestos de Spielberg vistos en films posteriores, algunos primeros planos, o el uso de la iluminación. Me viene a la cabeza la secuencia en casa de Harry, cuando este le habla a la madre sobre temas esotéricos...sentado en su sillón, con un trasfondo de luz de la ventana, mientras Stevie juega y Majorie atiende a sus explicaciones.
Los créditos iniciales también son interesantes...Con Majorie dibujando la casa mientras suena de fondo la inquietante melodía de Wladimir Selinsky… y Paul juega con sus hijos en un ambiente bucólico y campestre.
Merece la pena rescatarla del olvido y echarle un vistazo. Por lo menos para descubrir el buen hacer de Spielberg en sus humildes comienzos.
Cuarta película dirigida por Steven Spielberg y toda una demostración de por qué le llaman uno de los reyes del entretenimiento en el mundo del cine. En menos de hora y media, con un argumento ya muy trillado (y que aún así funciona y que influenció a películas posteriores) y un escaso presupuesto, logró dirigir con sumo acierto, una película de terror sobrenatural, en donde a penas hay efectos especiales y en donde el mal se encuentra en estado latente, sin la urgente necesidad de ser mostrado fisicamente. A ello ayuda una fotografía y una ambientación que recuerdan incluso a las antiguas historias de brujería, donde los hechos se sucedían en la Nueva Inglaterra de mediados del s.XIX. Sin inventar nada nuevo, terror sobrenatural de estilo clásico que conviene rescatar del olvido.
telefilme de steven spielberg cuando nadie conocia su potencial, en esta pelicula podemos ver el tipico caso de una casa embrujada que dicha entidad molesta a la familia de turno,,, un tema ya muy conocido hoy por hoy, pero consideremos que esta pelicula es del 72 y para ese entonces algunos momentos de la pelicula estan mas que aceptables, el llanto del bebe por ejemplo... en esta realizacion spielberesca podemos ver que la trama esta bien planteada, tiene una fotografia acertada y por mantiene algunos cliches del cine spielberg.
una curiosidad digna de fans de este director.
Se nota que esta como director steven spielberg, que si llega a ser otro madre mia en que hubiera acabado esto, porque para ser un gran director el que está detrás de la cámara la película deja muxo que desear.
No es mala pelicula pero me esperaba una buena de fantasmas y se queda ahí, flojilla pero aún así entretenida.
Bastante destacable para ser de las primeras realizaciones por aquel entonces, de un gran desconocido llamado Steven Spielberg.Recomendable.
curiosilla, con un par o tres de momentos inquitantes
desde luego tiene pinta de telefilm ... porque lo es, una peli para tv, como El diablo sobre ruedas
Puede que en su momento fuera una pelicula interesante, pero hoy en dia ya estamos saturados de este tipo de films de casas misteriosas. Ademas del bajo presupuesto la pelicula tiene pinta de telefime.
Muy buen film setentón que podría igualarse estéticamente a Poltergeist y que logra entretener bajo una sinopsis que hoy ya nos suena mucho, pero que en esa época creó escuela.
Críticas: 11
DE NIRO
6
Con la diección de Spielberg para mi sorpresa, esta pelicula es mas de suspenso que de puro terror, lo tipico de estas peliculas, la trama casi por completa se da en una granja, una pareja y sus dos hijos deciden alquilarla, alejandose del ruido de New York, pero lo que parece algo muy idealizado y de paz se convierte en una pesadilla, es precursora de Polstergeist, por algunos planos secuencias y efectos, todo un hallazgo, no es gran cosa pero eran los comienzos del genial director.
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