pelicula cincuentera de alienigenas bastante adelantada para su epoca por sus temas sexistas, sin contar que el atuendo de la marciana era muy sensual para aquellos años, la idea esta muy bien para plasmarla con platillos voladores y marcianas, los efectos acorde a su epoca y con pocos recursos no esta nada mal.
lo malo quizas es que a pesar de su corta furacion se hace bastante pesada por sus dialogos y escenas inecesarias para alimentar metraje...
en definitiva, una mas de extraterrestres de los 50s, que tiene sus detalles curiosos.
“Devil Girl from Mars” es un buen ejemplo de lo mejor y lo peor de las películas de ciencia ficción de los 50s, es un clásico sin duda, llena de encanto y bizarrismo casi a partes iguales. Es dirigida por un desconocido David McDonald y con un guión escrito por James Eastwood basándose en una obra anterior pensada para el Teatro.
La trama va de un extraño meteorito, un OVNI en verdad, que se estrella en la campiña escocesa muy cerca de un apartado Hostal, por cierto antes de estrellarse derriba a un avión de pasajeros cosa que a nadie parece importar pues en toda la película no se vuelve a mencionar el asunto. El OVNI tiene como única tripulante a Nyah, tremendo personaje, inolvidablemente interpretada por Patricia Laffan, con una estética “Nazi-Dominatrix” que la ha vuelto objeto de culto.
Nyah viene de Marte, un planeta donde la “guerra de los sexos” se volvió literal y las marcianas terminaron exterminando a los marcianos, algo que por supuesto se ha convertido en un grave problema, pues como harán ahora para reproducirse? Solución: viajar a la tierra en búsqueda de algunos especímenes masculinos. La cosa se vuelve más bizarra cuando Nyah no tiene escrúpulos en pensar en llevarse a Tommy, un niño de unos siete años, ups vaya futuro de semental en un planeta lleno de sexys mujeres que le esperaba al “pobre” Tommy!
A destacar los simpáticos Fxs, efectivos para la época y pese al bajo presupuesto del film, al estrambótico robot, que pese a parecer una lavadora con patas tiene el mérito de ser realmente mecánico, o al menos eso cuenta la leyenda e, insisto, el entrañable personaje de Nyah, que se ve estupenda en medias negras y esa minifalda de cuero negro, derrochando maldad con sus duras frases y sus gélidas miradas, una especie de Darth Vader femenina y bizarra de serie Z.
Y pues sí, la película tiene momentos pesados, escenas de puro bla bla que aburren un montón, sus decorados son de cartulina, las actuaciones son regulares tirando a malas, pero tiene el sabor inconfundible de lo clásico y sin duda merece una oportunidad. En mi opinión es imprescindible para cualquier degustador de ci-fi.
Los Ingleses eran mas aburridos a la hora de las invasiones, de produccion de presupuesto bajo, es el justo para mostrar un platillo volante como tiene que ser. Lo demas, un guion nada belicoso de noveleta de relatos pulp, pero que aquí se tiran toda la pelicula diciendo muchas cosas, y sobre todo amenazas por parte de ¨La Marciana¨ de turno, que es mas pesada que otra cosa y que lleva una ropa de lo mas kitsch. Aunque seamos sinceros, aquí no pasa casí nada. Las escenas dan para hablar al igual que su dialogo, mas cercano al ¨Retrospect¨ de ¨La Hora Chanante¨.
La década de los cincuenta, un caldo de cultivo perfecto donde nacieron miles de joyas cinematográficas que pasaron a engrosar las filas del vasto ejercito de la ciencia ficción. Desde “La mujer avispa” del incombustible Roger Corman, “Musarañas asesinas” y “Plan 9 from outer space” que rezuman cutrerío por doquier, hasta clásicos imperecederos como “La mosca”, “The blob”, o “El increíble hombre menguante”. Desde que se descubrió que un par de hilos podían hacer naves alienígenas o que el papel maché tenía infinidad de posibilidades plásticas nacieron miles de monstruos y extraterrestres que intentaron conquista una y otra vez la Tierra, casi siempre en Estados Unidos.
De entre toda esa parafernalia de ciencia ficción se alza un título que sirve para demostrarnos cuanto puede conseguirse con un bar, cartón-piedra e imaginación. “Devil girl from Mars” es la precursora de un subgénero que tendría su explotación en las décadas de los setenta y ochenta: la guerra interminable entre hombres y mujeres.
La película rompía la fijación extraterrestre con Washington situando el drama en un pequeño pueblo escoces donde un platillo volante aparecía dejando atónitos a los siete habitantes de una pequeña pensión. Su único tripulante humano era una mujer, de cuero de cabeza a los pies, se encontraba tras la búsqueda de especímenes masculinos que salvaran a su especie de la extinción. Esto era debido a que las mujeres habían, literalmente, aniquilado y esclavizado al sexo opuesto.
Este delirante y original argumento rompía los moldes del machismo tipificado de la época, aunque fuera en Marte, creando un grave contraste entre las historias alienígenas de misandria con la sumisión de la mujer con respecto al hombre que se dan en la propia pensión. Las tres mujeres que componen el elenco protagonista no pasan de desmayarse, llorar o esperar a que el hombre de turno las salve. Este caso no es aislado, es la tónica general de las películas de la época pero dadas las circunstancias argumentales de esta película resaltan todavía más si cabe.
En cuanto a la parte mas técnica del largometraje es casi olvidable, robots de cartón y cuadriculados, escenarios de estudio, murales que intentan parecer montañas y mansiones victorianas, rayos mortales de mercadillo, atuendos alienígenas reflectantes y superposición de imágenes un tanto descuidada. Eso si, hay que alabar el diseño y la puesta en movimiento del susodicho platillo volante, que aunque solo ocupe unos pocos minutos del metraje, esta bien llevado, con calidad y algo mas de seriedad que el resto de la película. No perderse la actuación de la visitante espacial, fría y altiva.
Las actuaciones son típicas y tópicas, nada nuevo. El científico resabidillo, el periodista de acción, galán y con cierto toque de héroe, el villano asesino que en realidad no lo es, el niño en peligro, la doncella modelo guapísima que no sabe tenerse en pie y la acérrima enamorada. De todas formas no rechina ninguna lo cual es de agradecer.
Resumen:
Película de ciencia ficción de los 50, eso lo dice todo. Hay que destacar ese toque prematuro de guerra sexista que tan común se hará 20 años más tarde.
Alucinante y bizarra propuesta británica sobre una marciana bastante sexy y embutida en lo que se ha descrito como “una mezcla de uniforme nazi y vestido de dominantrix” que secuestra a los machos terrícolas para usarlos como material reproductor. Además trae un robot.
La presencia femenina destaca sobremanera en esta película. La malvada protagonista es la veterana pero aún de muy buen ver Patricia Laffan, acompañada de la especialista en cine fantástico Hazel Court y una joven Adrienne Corri, habitual de la Hammer que recordamos por haber sido violada en “La naranja mecánica”. En el reparto masculino solo destacaría a Joseph Tomelty, que me gustó mucho en “Meet Mr.Lucifer”. Laffan en concreto, sin hacerlo mal del todo y mostrar bastante compostura (en “curiosidades” os podéis hacer idea de la profesionalidad que mostró la actriz), no acaba de robar la escena como se le supone a un personaje de sus características. Los otros hacen simplemente el ridículo con mucha sobreactación.
La película tiene un inicio que mezcla churras con merinas: La llegada de un OVNI que ha desintegrado un avión con un hombre fugado de la cárcel que encuentra acomodo en la posada donde trabaja su novia, donde también están la propietaria malhumorada, su marido borrachín, una actriz del East End, un señor un poco trastocado, un niñato y un periodista y un científico que buscan juntos el OVNI. El ambiente empieza siendo cordial y relajado. Parece la típica película inglesa de intriga, no? Incluso la primera aparición del, OVNI, visto por la actriz, no parece estorbar el buen rollo: el científico la convence de que ha visto mal una estrella fugaz… Pero algo tiene que pasar no? Llevamos un cuarto de hora de peli y hemos visto lo dicho… El elemento irruptor debe aparecer… Y APARECE AL ACTO!
Los efectos especiales están muy bien. La nave es bonita, y el robot, a pesar de su cómico aspecto fue un intento de innovar, pues era REALMENTE mecánico y controlado mediante mandos en lugar de tener una persona dentro.
Pero, para ser sincero, esta es una película fallida debido a un factor clave: la falta de acción. Se nota en exceso que está basada en una mediocre obra de teatro: hablan y hablan, diciendo frases absurdas sobre las mayores trivialidades metiditos en la posada (bajo la excusa de que se encientran atrapados en un campo magnético) y apenas si tiene escenas “moviditas”. Y esto no es una obra sesuda de Stanislav Lem ni es “An Inspector Calls” donde lo de esperar es diálogo, profundidad y un discurso interesante, sino una peli de serie B de aquellas que ponen en los programas dobles los domingos por la mañana. Se suponen que son de acción y aventura, entretenidas. Y esta no lo es.
En resumen, una película que podía haber sido buena de verdad si se le hubiera incorporado más movimiento y se hubiera tomado a si misma menos en serio, pero que no llega a cumplir ciertos mínimos.
Série B de ciencia ficción de los 50,hecha en inglaterra,que pretendía abrir mercado con este título,donde lo mejor no és su argumento y desarrollo demasiado teatral,sino algunas ideas de atrezzo,como el traje de la dominatrix extraterrestre del film,muy cercano a Darth Vader,y unos decorados,como la de la nave bastante currados para la época y una estupenda fotografía en blanco y negro.El film se hace un tanto pesado a ratos,y se puede ver,pero hay opciones mejores si no se quiere perder el tiempo.
Bueno, no esta mal, es muy clásica, con un platillo volante muy chulo, al igual que el traje de la marciana y robot, que es magnífico, pero la historia en sí deja algo que desear, y la película en general se hace muy lenta. Buenos efectos especiales (para la época, claro.
Críticas: 8
DE NIRO
6
En su momento, mediados de los cincuentas creo que algo de terror daban, ya que estaba la población influenciada por Roswell y los marcianos, ahora en la actualidad ya dan un poco de risa, tanto por los efectos y por la trama, un ovni es golpeado por un meteorito y cae en la Tierra, una hermosa mujer tiene planes malevolos, llevar hombres al Planeta Marte con el fin de reproducción ya que las guerras en ese planeta los llevó casi a su extinción, en blanco y negro por la epoca está mejor, las actuaciones son creibles, me encanta la pasión con la que realizaban estas producciones y con tan poco presupuesto.
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