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A mir me resultó bastante pesada la película más que nada por que además de ser un poco excesiva, no tiene casi situaciones interesaltes a lo largo del film,muy pocas las aparaciones del viejo acosando a las chicas,y encima no hay una explicacion para esto.Actuaciones bien y el final tampoco se luce,una película que a mi no me gustó y si me saco más de un bostezo.Mi puntuacción para esta película es un 4.
“El llanto” es una propuesta novedosa en el panorama del cine de terror español de los últimos años. Con una estética y fotografía estupendas y estilizadas, explora el terror contemporáneo y la metáfora experimental, en este caso la violencia contra las mujeres.
La acción se desarrolla en dos momentos temporales distintos, separados por 20 años: en el primero en España conocemos a Andrea, tiene a su novio en Australia con el que se conecta on line y termina descubriendo un terrible secreto. En el segundo momento temporal veremos a Camila, en Argentina, veinte años atrás, una estudiante de cine, obsesionada con una chica francesa, Marie, y veremos cómo ambas se conocieron.
La película combina detalles de memoria y pesadilla con la delicadeza de un rompecabezas, juega con las líneas temporales, muestra terrores reales sin trivializarlos y sin sacrificar la naturaleza lúdica del cine de género y se beneficia de un buen trabajo actoral de las tres actrices protagonistas, la española Ester Expósito, la argentina Malena Villa y la francesa Mathilde Ollivier.
Pues discrepo de algunos comentarios. Me ha parecido una película soporífera disfrazada de metáfora. Le sobra por lo menos media hora de trama. El terror aquí es un mero espectador, que se quedó como barco a la deriva. Aunque tiene algunas escenas inquietantes, no se salvan de otras igualmente aburridas y sosas. Completamente olvidable y sobrevalorada.
Inquietante y efectiva creación prima de Martín-Calero que, con la ayuda de tres coproductores -España, Francia y Argentina-, consigue embelesar al respetable. La película goza -o adolece, según- de impactantes imágenes, en detrimento de un libreto parco en diálogos, pero con una escenificación muy bien planteada.
Y me gustó, de manera que no entonaré «El llanto» quejumbroso de mi persona por desperdiciar mi tiempo visionando esta cinta, a diferencia de otras muchas del mismo género. .MUY ACEPTABLE. .3️⃣/5. ··PICARD··
Es de las que se cocinan a fuego lento, para lograr ese ambiente opresivo que se mantiene durante todo el film.
Narrada al estilo tres historias vistas desde el punto de vista de tres personajes que les toca vivir el mismo fenómeno paranormal y están dispuestas a todos por averiguar de que se trata.
Tiene buenas actuaciones, así como el misterio no pierde fuerza al momento de querer descubrir cuál es la verdad de ese puso en donde los involucrados escuchan un llanto.
Pero a mi me han sobrado minutos por todos lados, subtramas o situaciones que no llegan a nada y terminan por bajarle puntos a una película de casi dos horas , que en hora y media habría quedado perfecta.
La película va despacio, buscando mantener la tensión con miradas y primeros planos muy marcados que le dan un toque hipnótico, aunque, la verdad, a ratos se pasa de lenta y le vendría bien algo más de movimiento. Los silencios y las expresiones están bien trabajados, pero esa calma puede resultar excesiva para algunos.
El guion tiene su gracia, pero con tantos inversionistas extranjeros metidos en el proyecto, se nota que cada país mete mano para que su escena se ruede en su propio territorio. Así que, claro, toca filmar en España, Argentina, Francia, y si hubiera otro socio, pues ahí también. Esto hace que la historia se vuelva algo forzada, con coincidencias que cuesta tragarse. Pero ya sabes, quien pone el dinero, manda.
Lo que más se extraña es que no se le haya dado más definición a los elementos sobrenaturales. No están bien trabajados, simplemente aparecen y ya, sin explicación ni mucho sentido. Al final, es como que intentan dar miedo, y lo logran en parte, pero la película se queda con algunos cabos sueltos que la hacen menos redonda de lo que podría haber sido.
Y ojo, que cuando empiezan a hablar de que es una “metáfora” o “alegoría”, ya puedes ir temblando. Muchas veces, esas palabritas son una señal de que te van a dar una de esas películas donde falta claridad y sobra humo. Cosas de los tiempos que corren.
El llanto avanza lentamente y puede desorientar al espectador en su primera mitad, con un ritmo pausado y algunos cabos sueltos. Aunque la historia parece familiar dentro del género de terror, esconde un trasfondo que aborda temas como la violencia de género, dejando al público el desafío de descifrar el verdadero sentido de la trama. La narrativa incluye giros temporales y referencias a otros géneros, recordando en ciertos momentos a la Nouvelle Vague y a cintas emblemáticas como la trilogía de Tres colores de Kieslowski o 2001: Odisea en el espacio en su uso de la atmósfera. El desarrollo toma su tiempo, profundizando en los personajes y ofreciendo actuaciones sólidas que sumergen al espectador en la historia. En el aspecto técnico, destaca el uso de la cámara, la riqueza de las ambientaciones y la continuidad de escenas entre Madrid y Buenos Aires, creando una cinta que combina varios estilos en una. El llanto es una propuesta fresca y ambiciosa dentro del cine español, y con el apoyo suficiente, no sería raro pensar en una segunda parte que continúe explorando su mundo y sus temas.
En El llanto, Ester Expósito da un giro en su carrera hacia el terror, esta vez bajo la dirección de Pedro Martín-Caldero. La película tiene una historia inquietante que te atrapa con su toque feminista y la inclusión de personajes LGTB , abordando temas importantes como la violencia de género. Sin embargo, la narrativa se dispersa un poco al cambiar de perspectiva entre las tres protagonistas, lo que hace que algunas preguntas interesantes queden sin respuesta. Aunque el final se siente un poco apresurado, el ambiente de terror y el uso de la tecnología para intensificar la sensación de peligro están muy bien logrados. A pesar de algunos altibajos en la tensión, El llanto logra construir un universo oscuro y visualmente atractivo, tocando temas profundos y actuales.
Pedro Martín-Calero debuta en la gran pantalla con El llanto, y su propuesta le ha valido la Concha de Plata a la mejor dirección en el Festival de Cine de San Sebastián. Este primer largometraje destaca no solo por su estilo visual, sino también por abordar el terror desde una perspectiva que evita los clichés del género. Aunque su narrativa puede resultar confusa al principio, con escenas que parecen desconectadas, la película logra cohesión a medida que avanza, revelando una estructura interna sólida.
El llanto elige un camino original al explorar el tema del maltrato femenino a lo largo de varias épocas, presentando a tres protagonistas que, desde lugares distintos, enfrentan un mismo misterio y terror. La historia, lejos de depender de trucos o sobresaltos superficiales, transmite un horror más profundo y social, tratándose con elegancia y respeto hacia el espectador. Además, cuenta con algunos momentos de auténtico impacto que, sin esperarlos, logran sorprender y causar escalofríos.
Visualmente cuidada y con interpretaciones notables, El llanto no solo es innovadora en su enfoque del terror, sino que también resulta una experiencia cinematográfica profunda y merecedora de su reconocimiento.
El Llanto, coescrita por Isabel Peña y dirigida por el debutante Pedro Martín-Calero, atrae con grandes expectativas: Ester Expósito vuelve al terror, y Martín-Calero ganó el premio a mejor dirección en San Sebastián. La película se centra en Andrea, quien, lejos de su novio, descubre un oscuro secreto familiar y empieza a ser acechada por una inquietante presencia.
La primera parte, enfocada en Andrea, destaca por su estilo y habilidad para crear una atmósfera genuinamente aterradora, con una dirección que utiliza bien la cámara para transmitir miedo y malestar. Sin embargo, cuando la historia transita hacia los personajes de Camila y Marie, el tono cambia, dejando de lado el terror para volverse más convencional y menos impactante. Aunque Ester Expósito brilla en el reparto, el desenlace deja cabos sueltos y una sensación de falta de claridad.
Pese a sus debilidades, El Llanto logra mostrar talento en producción y un buen manejo del género, aunque pierda fuerza en su desarrollo.
Historia de terror única que explora la violencia de género desde una perspectiva visual y emocional. Con guion de Isabel Peña, la narrativa sigue una atmósfera inquietante y cautivadora, centrada en los hipnóticos personajes femeninos interpretados por Ester Expósito, Mathilde Ollivier y Malena Villa. Este enfoque permite que el film transmita el miedo y la indefensión de las protagonistas sin depender de diálogos explícitos, sino mediante imágenes perturbadoras que capturan el terror psicológico y la sensación de atrapamiento que atraviesa generaciones.
Es una propuesta innovadora y visualmente impactante que conecta con un público joven y amante del género.
Críticas: 12
Furiosa
6
Una película que toma ideas prestadas de otras obras del género puede acabar pareciendo una copia sin alma… o encontrar la forma de hacer algo propio con todo ese material.
El Llanto (2024), dirigida por Pedro Martín-Calero, se sitúa en ese segundo grupo. No oculta sus influencias —desde It Follows hasta el estilo found footage—, pero las usa con inteligencia para armar una historia fragmentada y atmosférica sobre tres mujeres marcadas por una presencia inquietante. Lo que podría haber sido un batiburrillo de sustos y tópicos se convierte en una experiencia sombría y sensorial, con momentos que incomodan más que asustan.
No es una cinta de gran presupuesto ni de terror convencional, pero sabe usar su sencillez para construir una sensación constante de inquietud. El desenlace, abierto y sugerente, deja una última nota de malestar… y quién sabe si espacio para una continuación.
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