Inquietante ópera prima de la directora británica Rose Glass, una estupenda muestra del nuevo terror, una inmersión en la mística-religiosa más siniestra con la iluminación y el sacrificio de la carne como vía hacia el horror.
Glass sabe rodar potentes imagines, crear un horror psicológico sobre un lienzo febril sobre la fe, el autocastigo, la soledad y la demencia. El retrato de dos mujeres, Maud, una enfermera perturbada mentalmente y Amanda, la bailarina enferma de cáncer a la que cuida. Maud, atormentada por un terrible secreto y una vida horrible, se convence a sí misma de que debe salvar el alma de Amanda de las garras del demonio.
Eficaz en la creación de escenas malsanas y en mostrar el desmoronamiento psicológico, como cuando Dios le habla a Maud, en galés, a través de una cucaracha, o la búsqueda de la redención a través del martirio, estamos ante una directora que sabe perturbar, desde la fetichización de lo corpóreo y el sufrimiento, en una película que se va cocinando a fuego lento, como un irónico reflejo de los demenciales tiempos actuales, en que hasta las esquizofrénicas aspirantes a santas deben prenderse el fuego del martirio por sí mismas.
Pues a mí sinceramente no me ha gustado. Demasiado lenta, la chicha está muy al final, como en Hereditary. Esperaba ver una película de terror y no había terror, es más bien un drama psicológico, y no es que tenga algo en contra de los dramas psicológicos, pero que no me vendan como de terror una película que no lo es.
Le doy un 3.
La esperaba mucho mejor por las críticas que he leído y el avance que es muy bueno, comienza y se desarrolla de manera lenta y sólo despega en los últimos quince minutos, Maud es la protagonista principal, ella realiza asistencia a los enfermos terminales, consigue trabajo en lo de una mujer que años atrás fue una excelente bailarina pero tuvo un accidente y quedó lisiada, Maud tiene una vida rutinaria, es una chica normal pero día a día es como que va desmejorado sicologicamente hasta llegar al final, delirios mistico-religiosos, tiene una estética de los setentas según mi óptica aunque se desarrolla en la actualidad, buenos efectos y la historia es atrapante aunque tarde en explotar.
Fanatismo obsesivo - Saint Maud.
La productora de esta película no es de mi total agrado ya que si bien tiene productos interesantisimos otros son un sin sentido como la del repartidor de pizza pero bueno dejando a un lado eso esta en si me ha gustado un thriller psicológico aceptable que dura poco pero que se va a fuego lento hasta que llegar a ese final.
No la considero de terror puro a pesar de tener alguna escenita, la escena por el final con la vieja si da miedo sin embargo a pesar de ser corta ciertos momentos debieron ser mejores y de ahí se queda corta, de las actuaciones ninguna queja todas me han parecido a la altura hasta una Jennifer Ehle en un papel bastante siniestro.
Cabe destacar el final me ha parecido arte puro y a la vez siniestro lo mejor de la película fue esa escena final.
Recomendable.
No sé como describir mis sensaciones después de ver la película, básicamente porque estuve desconcertado en el transcurso del metraje. Y eso que en ningún momento aparté mi vista de la pantalla, me mantuvo todo el tiempo entretenido e interesado en ver como se desarrollaba la trama.
El final me dejó marcando ocupado, por bastante tiempo, y todavía estoy tratando de hilar las cosas al momento de escribir esta crítica.
Aún así, como dije anteriormente, la película me mantuvo entretenido todo el tiempo, pero me confié un poco, más que nada, porque A24 tenía los derechos de distribución, por lo tanto, esperaba ver algo como Hereditary o Midsommar, error mío.
Por cierto, en aspectos técnicos, la película es muy pulcra, tanto la fotografía como la dirección de arte, están cuidados al más mínimo detalle y es agradable de ver, al igual que las actuaciones, que destacan.
No sé, vi el trailer y no me generó gran cosa, tan sólo la imagen de la prota levitando. Luego, leí grandes y positivas críticas hacia ella por aquí y me decidí a verla.
Bueno, la película es bastante lenta, con planos muy buenos y ambiente bastante oscuro pero lo cierto es que aunque nunca termina de pasar nada, te termina enganchando y deseas seguir viendo, lo cual es muy positivo.
La trama es sobre una enfermera con algún tipo de psicopatología y se cree que es una santa y ha llegado al mundo para salvar al prójimo, entre ella a una de las pacientes a las que cuida. Aquí no hay nada paranormal o sanguinolento, tan sólo la paranoia de la protagonista y su devoción hacia Dios y su fe incondicional hacia él.
No era lo que esperaba; pues de terror poco o nada, sino más bien un dramón en toda regla. Lo mejor es la ambientación austera, devota y religiosa que embarga toda la trama, así como el papel de la protagonista.
No concuerdo con las grandes críticas que casi la catalogan como una película de culto pero tampoco me ha parecido una aberración. Se deja ver, entretiene a pesar de ser lenta y poco más. Eso sí, quien vaya con expectativas de terror al uso, tal vez se lleve un chasco.
Para mí, ver y olvidar. Sin más.
Saint Maud es un grandioso debut para la directora Rose Glass que pisa fuerte con esta obra de terror religioso lleno de suspense. La fotografía es bellísima, disfruté las escenas de Maud recorriendo el centro y esa paleta de color verdosa en la casa de la mujer que Maud cuida. Es una gran crítica al fanatismo religioso enfermo, donde acaba con el creyente, representado de una manera inmersiva que nos hará sentir esa enfermedad que azota a Maud hasta el final (que es perfecto).
Tan inquietante como verosímil, Saint Maud es otra vuelta de tuerca y otra gran razón para que admiremos su espléndida fotografía y la labor magis
tral de su intérprete en un cine, ya que, inmersos en un retrato a la vez terrorífico e íntimo, asistimos a un feliz acontecimiento que engrosa el panteón reciente de grandes films cuyo enfoque es igualmente visceral
y austero: Dogman, Corpus Christi y El Reverendo.
Cuando una cartelera aglutina tan pocos alicientes, un film como Saint
Maud se merece un monumento. Y si no, al tiempo..
Bajo la radiografía de un fanatismo y su aparente afán de denuncia se revuelven otras cuestiones: es esa isla mental -como en ese hito que to
davía resuena que es Joker-, la única meta, una tabla de salvación, o el producto de una sociedad que hostiga y premia el individualismo
sin hacerse responsable de los efectos patológicos que genera?
El fanatismo religioso es tan dañino como la falta de fé absoluta. Sobretodo cuando la soledad reina en la psique de la gente. El ser humano necesita encontrar una razón para estar en este mundo.
Maud, es una enfermera que llega al cuidado de una bailarina enferma de cancer en su casa.
Al ver que es lesbiana y se entrega a los placeres carnales, Maud se propone ayudarla espiritualmente para salvar su alma. Pero todo esto sólo ocurre en el mundo de fantasía que su delirante mente ha construido.
Las directoras mujeres tienen esa visión más íntima de los personajes, y eso es lo más destacable en esta cinta. Con impecables planos fotográficos, logramos como espectadores sumergirnos en este mundo en el cual Maud es un ángel Salvador de almas perdidas.
Es de esas películas que se cocinan a fuego lento, y su estética recuerda a la serie ¨Servant¨ , con esos primerísimos primeros planos. Siempre en el rostro de la protagonista.
Y es aquí en donde la actuación de su protagonista, ese rostro, esa mirada, es el tronco sobre el cual descansa todo el peso de los sentimientos generados por la historia.
Lo que se le podría criticar, es que todo lo que supones que va a pasar, pasa. En eso, es bastante lineal. Pero es esta niña solitaria la que nos produce cierta empatia, cuya visión de la fé la lleva a martirizarse, en la búsqueda frenética de esa misión encomendada a nuestra llegada a la tierra, aunque a veces tome un tinte espeluznante.
Final, perfecto.
Críticas: 10
antaguco
7
Es una muy buena película. Técnicamente se puede decir que la iluminación, la música y las actuaciones consiguen envolverte en una atmósfera inquietante. Ciertamente no es una película para amantes de la acción trepidante ni de los efectos especiales. Es otro tipo de cine más psicológico que aborda temas como el fanatismo religioso o la.locura. Recomendable.
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