Una película que inicia con nazis y el espeluznante apuñalamiento de una bebé parece anunciarnos que las cosas se van a poner bastante densas.
Un grupo de siete turistas (que al parecer representan los siete pecados capitales), y entre los que se encuentra un seminarista, deben pernoctar en el castillo del Barón Von Rohnenberg, sin imaginar que recibirán la visita de una súcubo (Ericka Blanc) cuya tarea será asegurarse de que mueran en pecado para que el mismísimo Satanás pueda llevarse sus almas al infierno.
“La terrificante notte del demonio”, única película del director belga Jean Brismée, es una coproducción belga italiana, puro eurohorror, con toques vintage de erotismo y luciferismo, y cuyo estilo visual y narrativo nos puede recordar al mejor terror gótico italiano o francés setentero.
A pesar de ser una película poco conocida, de bajo presupuesto, y con una fea banda sonora, debo reconocer que va generando interés conforme avanza su malvada trama, convirtiéndose en una historia siniestra bien hilvanada que cuenta incluso con alguna que otra sorpresa.
El cine italiano no es de mi preferencia, precisamente por sus historias que no terminan de atraparme, y finalmente en esencia son todas similares.
En esta historia, tenemos un grupo de personas en un castillo a merced de un súcubo que los asesina uno a uno.
Con escenas calentorras de sexo gratuito que poco se justifican en la historia no viene a nada, una iluminación saturada más propia de culebrones que de cine y unos efectos que son demasiado notorios, está historia solo me causó bostezos.
Interesante film alternativo de horror gótico europeo, a cargo de Jean Brismée.
Un tétrico castillo alemán se convertirá en una trampa mortal para un grupo de turistas que se ven obligados a pernoctar en él. Dados a los placeres y vicios más variopintos, cada uno caerá víctima de un demoníaco súcubo que tiene la apariencia de una joven y bella mujer.
Luego de poco más de una década de éxito, proliferación y explotación de variadas temáticas de horror gótico en Europa, especialmente en Inglaterra e Italia de la mano de cineastas como Terence Fisher (“Horror of Dracula”, 1958), Freddie Francis (“Dr. Terror’s House of Horrors”, 1965) y John Hough (“Twin of Evil”, 1971) e Italia con Ricardo Freda (“I Vampiri”, 1956), Mario Bava (“La maschera del demonio”, 1960) y Antonio Margheriti (“Danza Macabra”, 1964) parecía que había muy poco nuevo que proponer en el subgénero. Sin embargo, aunque de forma tardía, surgirían interesantes propuestas de otros países con menos tradición en el gótico o derechamente coproducciones como las franco-belga-germana “Les Lèvres Rouges” (1971) y “Malpertuis: The Legend of Doom House” (1971) de Harry Kümel y la belgo-italiana “La Plus Longue Nuit du Diable” (1972) que nos convoca hoy.
Así, a pesar de ser un producto de bajo presupuesto y un ejemplo tardío de un subgénero en decadencia, y que el film no deja de tener un argumento básico y ya abordado en varias ocasiones -un tenebroso y viejo castillo o caserón en donde un grupo de turistas debe pasar la noche y son uno a uno asesinados- el guionista Patrice Rohmm introducirá el concepto, primero, de una alegoría a los siete pecados capitales en la figura de los turistas y, segundo, una irresistible súcubo al servicio del Diablo que se encarga de atraerlos, hacerlos morir en pecado original y finalmente quedarse con sus almas. De esta forma, aunque tenemos personajes totalmente arquetípicos, también es cierto que se trata de personajes con los que el público no logrará encontrar empatía, cumpliendo con efectividad la sensación de que el trabajo del Diablo es sencillamente justiciero o por lo menos justificable.
Otro elemento narrativo interesante del film y que pudo haber sido mejor abordado es el tema de la maldición que aqueja a la familia Von Rhoneberg. Puede que Rohmm pensara erróneamente que darle más desarrollo a la trama perjudicaría la trama central, la del súcubo y los siete pecados capitales, pero lo cierto es que bien podría haberse explorado mejor este hilo, del cual sólo tenemos el prólogo explicativo ambientado en la Berlín de 1945 y unas conversaciones al paso del mayordomo con fines documentales con los turistas en donde habla de escabrosos eventos en el edificio en el siglo XI (pactos diabólicos) en 1437 (asesinatos), en 1569 (exorcismos) y en 1735 (accidentes fatales). Asimismo, la subtrama de la periodista y fotógrafa asesinada al inicio tampoco tiene mayor desarrollo.
Por otra parte, no se puede negar que “La Plus Longue Nuit du Diable” (1972) tiene una gran atmósfera gótica y una interesante fotografía surrealista y onírica de la vieja escuela. En ese sentido, el fotógrafo André Goeffers (“Plus jamais seuls”, 1969) demuestra tener sentido artístico para todo tipo de escenas, desde la brutal escena inicial en la que Brismée no se guarda nada para el infanticidio, pasando por las bellas postales externas del Castillo de Antoing levantado en el siglo XII, hasta las irreales escenas previas a las muertes de los turistas seducidos por el influjo de la súcubo y cayendo en sus propias debilidades mundanas y vicios. En cualquiera de los casos, la sensación que deja al espectador es la de una pesadilla seductora y perversa a la vez, reflejado ello no sólo el súcubo en toda su ambientación.
Asimismo, cabe destacar la sorprendente partitura de Alessandro Alessandroni (“Lady Frankenstein”, 1971). El italiano crea una atmósfera musical bastante sugerente y sombría que cautiva y contribuye fuertemente a la sensación irreal que respira el film, principalmente por medio de órganos góticos y cacofonías que simulan al viento y el mismo silencio. Además, el trabajo vocal de su hermana Giulia no más que aumentar esta sensación y le juega decisivamente a favor.
El reparto de “La Plus Longue Nuit du Diable” (1972) tiene una perfomance un tanto desigual, sin embargo, tiene el mérito de tener dos o tres personajes principales que cumplen con las expectativas. La bella actriz italiana Enrica Bianchi (“Io, Emmanuelle”, 1969; “Operazione Paura”, 1966) interpretó a Ilse, la extraña y hermosa pelirroja que guarda un especial secreto. El experimentado actor belga Jean Servais (“Les Centurions”, 1966) hace lo propio como el Barón Von Rhoneberg, que carga con una gran culpa del pasado. Finalmente, Jacques Monseau (“Michaella”, 1968) interpreta al seminarista que lucha contra la tentación y la pérdida de la fe.
Completan el reparto el emblemático actor chileno-francés Daniel Emilfork (“Casanova”, 1976) interpreta al enigmático sepulturero del pueblo; el belga Maurice De Groote como Hans, el mayordomo; Christian Maillet (“Il Court, il Court, le monde”, 1987) como el glotón guía de turistas Matt Ducard; Colette Emmanuelle (“Le Roi Danse”, 2000) y Lorenzo Terzon (“Lady Frankenstein”, 1971) como Nancy y Howard, el disfuncional matrimonio, ella muy dada a la codicia y él al adulterio; Lucien Raimbourg (“Fuga allegro vivace”, 1962) interpreta al malhumorado señor Mason; la bella rubia Shirley Corrigan (“Sette scialli di seta gialla”, 1972) a la perezosa Regina; e Ivana Novak (“La rossa dalla pelle che scotta”, 1971) a la lujuriosa Corrine.
“La Plus Longue Nuit du Diable” (1972) fue el único largometraje del director belga Jean Brismée, quien en realidad sólo dirigió unos cuantos cortos y documentales más, para luego hacerse cargo del Institut National Supérieur des Arts du Spectacle et des Techniques de Diffusion de su país natal. Es una lástima que no hayamos tenido más trabajos de Brismée, cuyo estilo visual se asemeja bastante al de otros directores góticos como Jean Rollin, Roger Vadim o Jesús Franco, aunque a juzgar por lo demostrado en este film, concedía una mayor importancia a la lógica narrativa que sus pares.
En resumen, un olvidada y efectiva película gótica que tiene el mérito por tomar lo más clásico del subgénero y aventurarse en otras cuestiones narrativas más interesante, con una lograda atmósfera, una destacable banda sonora y un reivindicable estilo visual.
Una entrañable película de serie B, perteneciente al subgénero de terror gótico; realizada muy al estilo de los años setenta (sobretodo de los primeros 70, cuando estaban de moda las películas de la Hammer). Como curiosidad destacaría el hecho de que se trata de una co-producción italo-belga, algo poco visto en esa época. La verdad es que ésta película es una delicia para los aficionados del terror más añejo y anticuado; aunque argumentalmente no es que ofrezca mucho de nuevo: unos turistas perdidos van a parar a un castillo de lo más misterioso y van siendo aniquilados uno por uno. Vale, sí, es lo típico; pero también hay que destacar un argumento bastante aceptable (a veces sorprendente), una apreciable ambientación del castillo, unas potables escenas eróticas, algo de sangre y horror, y sobretodo una absolutamente genial banda sonora, que sin duda da mucha fuerza a la película. ¿Que más se puede pedir? Ah, y no os perdáis el espectacular e impactante final...es casi lo mejor. Aparte de todo eso, los asesinatos son bastante variados, incluso en cierta manera irónicos. Las interpretaciones en general son algo irregulares, pero tampoco están mal del todo; aunque podrían haber sido algo mejor.
En fin, que si lo que deseáis es visionar un buen terror fílmico de aquellos tiempos dorados del género, os la recomiendo completamente.
Puntuación: 8.
La peli gira en torno a una dinastia que debido a una maldicion,no pueden nacer hembras,pues estas se terminarian convirtiendo en demonios sucubos sedientos de sangre humana.Un autobus de turistas sufre una averia y terminan pernoctando en el castillo de un baron perteneciente a esta dinastia,pronto una joven hermosa que es un sucubo entrara tambien al castillo poniendo a prueba a los invitados.Llama la atencion el conductor gloton y como la hermosa diablesa lo pone a prueba.Decir que la peli tiene un ritmo bastante lento,pero tambien tiene un aura bastante tetrica,lo curioso es que el castillo no lo es demasiado,pero esa noche de relampagos acompañada de musica de organo,de vez en cuando se oye un replicar de campanas,son factores ambientales con los que gana muchos puntos.Luego en su parte final todo da un giro de tuerca que no afecta en absoluto a la trama,pues a mi gusto ese giro y su correspondiente final me gustaron mucho.Desde luego que la recomiendo
Primero decir que esta película tuvo que llegar bien tarde a España por el alto contenido en erotismo y “pechiguismo” que en ella se muestra. Luego, que parece, o sientes que estas viendo un video-clip más que una peli. Tiene una introducción curiosa y que es posible que Raimi si fijara para los planos del demonio en el bosque en su peli Posesión Infernal. El comienzo de la película, te hace pensar en lo peor, cine europeo de serie B y de coproducción con Italia… y efectivamente, lo primero que se ve y que realzan a la vista es a las actrices, que siendo honestos están muy bien las jamelgas. Se cierne una noche oscura y de tormenta, y los protagonistas se recluyen en un “cható” mu bonito, hacienda de un conde alemán en la que cae sobre su familia una temible y oscura leyenda. Metidos de lleno en la oscuridad, un ser (qué está cabreadísimo y no sabemos por qué) empieza a cargárselos como bien dice la sinopsis, a todos según sus pecados capitales. En prinicpio parece ese cine de “erótico-terror” cutre pero no putitas mías, es una peli bastante entretenida, pero que a muchos de vosotros os puede resultar aburrida ya que es de tratamiento lento… ento… y eso podrá cansaros. Según transcurre el largometraje te empiezas a sentir más frustrado porque no nos dice nada, situaciones típicas y mucho erotismo con escenas de “cucú-tras” (ya lo entenderéis, con lo de que se parece un videoclip) en las que os descojonaréis. Y ya por fin llega lo bueno, eso si tendremos que es perar hasta casi la hora, donde para quedar muy poquito de peli, las mueertes se abalanzan de uno en uno, pero bien tratads, y dándose el lujo de recrearse un poquito en llas, y se agradece. Resuemiendo: peli de dos partes super introducción y final, buen tratamiento en historia y desarrollo, buen, guión e interpretaciones, efectos especiales normaluchos pero que a mí siempre me han gustado, es una de esas joyas que para la mayoría de “vosotras mis putitas” no la conoceríais pero que al final gusta en mayor o menor medida. Puede que en Seven cogieran parte de la idea de esta peli (solo suposición mía), pequeña atención al personaje que va todo de negro al principio con una guadaña y con una cara a lo Nosferatu. Un 6
Coproducción belgo-italiana de los años setenta, muy interesante y con algunos aspectos muy bien explotados.
Empieza con un ritmo pausado, pero a medida que avanza el metraje, este va aumentando y la cosa se hace más interesante.
Muy buena la idea de representar los 7 pecados capitales por medio de personas, ya que da mucho juego, y lugar a muertes de lo más variadas.
La premisa es bastante simple, y el la más común dentro de las películas de terror gótico. Un grupo de personas que hacen un viaje, se produce una avería/pinchazo y una posterior tormenta y éstos se refugian en el sitio más cercano, que siempre resulta ser un castillo maldito.
Buena atmósfera, buena ambientación la del castillo, banda sonora atrapante, actores que cumplen su papel a la perfección y un final algo precipitado, pero adecuado.
Una película muy destacable.
curiosa pelicula sobre demonios y sucubos, si bien para los que no estan acostumbrados al cine setentero seguramente les parecera un embole, pero si te gustan las peliculas añejas hay que darle una oportunidad.
tenemos a un grupo de turistas estereotipados que llegan a un castillo( gracias a dios no son adolescente) y cada uno sera acechado por una sucubo ( el maquillaje esta bien para la epoca, sin muchas pretenciones logra quedar bien) y luego tenemos al heorico cura que se enfrenta a lo demoniaco ( lo hemos visto miles de veces a esto pero nadie dijo que no fuera reiterativa).
caso aparte y para mi lo mejor del filme, el diablo, no se esperen cuernos ni mascaras de latex, este diablo es una persona normal que ya su apariencia intimida (la cara perfecta del diablo)
Entrañable serie-B setentero y de nacionalidad...belga! insólito. Esta película es una delicia; aunque no ofrezca nada nuevo: unos turistas perdidos van a parar a un castillo misterioso y van siendo asesinados uno por uno. Si, tipico; pero hay que destacar un argumento aceptable y a ratos sorprendente, una destacable ambientación siniestra del castillo, buenas escenas eróticas, algo de sangre, y sobretodo una absolutamente genial banda sonora que da mucha fuerza a la película. ¿que mas se puede pedir? Ah, y que nadie se pierda el espectacular final...es casi lo mejor. Los asesinatos son variados, e incluso irónicos. Si deseais buen terror de los `70, es muy recomendable. P:8.
Extrañísima película, que parece ¨tocada¨ por una magia especial, que la diferencia de muchas otras. La historia es muy previsible, el guión poco creible y con muchos fallos, pero a favor, cuenta con escenas sobrecogedoras y con una ATMÓSFERA, AMBIENTACIÓN Y BSO, DE SOBRESALIENTES; inquietante, surrealista y con unas sobrias interpretaciones. Una de esas películas enigmáticas y como he dicho anteriormente...con esa magia especial. Recomendada.
Una película rarilla pero interesante, bastante parecida a otras mucha spor el estilo, pero eso no le quita la ¨gracia¨. Bastantes muertes, una historia aceptable y una parte final xunga. El actor que hace del demonio, que no se quyién es y recuerdo haberlo visto en alguna otra película, se merece un oscar. Ese hombre nació para hacer de Satanás.
Críticas: 12
edcarpenter
5
Película setentera con unos efectos acordes a esa época y unos escenarios decentes para la historia de terror que nos ofrece en la cual un grupo de turistas después de un percance en la carretera , terminan pidiendo albergue en un lujoso castillo , desde su llegada empiezan a experimentar varios sucesos raros hasta que llega una mujer atractiva a complementar la velada , en un desarrollo que muestra escenas eroticas , bellas mujeres y una érica blanc interpretando a un súcubo que busca algunas víctimas, una historia por demás sencilla pero resulta aceptable si consideramos que el film ya tiene sus años
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