Viendo la ambientación y por donde iba la trama ya sabía que me gustaría, a no ser que lo hicieran fatal. Black Mountain Side es una película de suspense de cocción lenta, de esas que permite que el ambiente sea un personaje mas y cuya trama avanza despacio para que empatices con sus personajes, pero en mi opinión llega un momento donde se pasa de lenta, hasta el punto de llegar a ser un poco cansina, y más teniendo en cuenta que es bastante corta.

Riesgo de Spoilers!!! Lo mejor de la película es que sabe mantener la dualidad de la explicación de lo que ocurre, y es que usa el descubrimiento arqueológico de un monumento antiquísimo para darnos varios motivos: quizá una bacteria antigua desconocida, quizá una deidad antigua, quizá sea todo mera paranoia causada por el aislamiento. Lo importante es que poco a poco este grupo de compañeros de trabaja van desconfiando y convirtiendo la película en un survival. Y aquí tenemos la parte fuerte de la peli, simplemente una matanza a bocajarro y fría (como toda la película) como muestra de la locura que se ha apoderado del lugar.

A partir de ese momento, toda esa parte final me ha chirriado mucho. Primero porque rompe la magia de la duda de toda la locura, y segundo porque toma total protagonismo la voz en off, un recurso que para un rato está bien pero, y en mi opinión logicamente, cuando toma demasiado protagonismo se carga la película.

Técnicamente y aparte del lento ritmo la película es interesante. Con un aire indie y con planos muy bien hechos, aprovechando totalmente el paisaje hostil. Respecto a las actuaciones... simplemente pasables, ningún personaje me ha parecido reseñable.

Buena ambientación y buenas maneras, pero ese ritmo tan lento en este caso me ha jugado en contra, y además la voz en off no me convence en absoluto.

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Un grupo de científicos y arqueólogos vive recluido en una estación de investigación que se encuentra en medio de unos nevados parajes en el norte de Canadá. En una de sus excavaciones descubren una estructura milenaria que no debería estar allí y que parece haber despertado algo que llevaba miles de años dormido. Por si esto no fuera suficiente sus transmisores dejan de funciona y pierden la comunicación con el resto de la humanidad y las posibilidades de escapar de allí ya que no disponen de ningún medio de transporte.

Este es el punto de partida de la canadiense Black Mountain Side, un argumento que seguro que a más de uno recuerda a The Thing de John Carpenter, pero no os hagáis demasiadas ilusiones ya que está a años luz de la obra del maestro del terror estadounidense.

Estamos ante una de esas películas que no acaban de funcionar por culpa de un guion que no sabe cubrir todos los minutos de metraje y que nos ofrece muchas escenas y diálogos irrelevantes que son totalmente de relleno e interrumpen el ritmo de la acción. Quizás si se hubiera quedado en corto o medio metraje la sensación sería muy diferente, ya que cuando la película se pone seria y quiere ofrecer cosas al espectador es realmente satisfactoria.

Durante gran parte de la película se intenta dar explicación del origen del parásito que está llevando a la locura a los científicos, pero tras tanta palabrería no hay ningún fundamento ni explicación relevante. Para nuestra suerte todo empieza a mejorar cuando el parásito y la soledad empiezan a apoderarse de las personas, ofreciéndonos un par de escenas de casquería interesantes y buenos momentos de locura reforzados por una misteriosa criatura con cornamenta de reno que se comunica con ellos.

El reparto está compuesto por Shane Twerdun, Michael Dickson, Carl Toftfelt, Marc Anthony Williams, Andrew Moxham, Timothe Lule y Steve Bradley, ofreciendo todos ellos unas solventes actuaciones.

Black Mountain Side es la segunda película de Nick Szastakiwskyj y pese a sus buenas intenciones y alguna que otra escena destacable acaba resultando fallida debido a la superficialidad de su guion y a su falta de ritmo durante su parte central.

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