Nos encontramos ante un film británico con cocodrilo asesino de por medio, al estilo de tantos otros films como Mandíbulas. Sin embargo, lejos de tomarse en serio a sí misma, la película va por otros derroteros, tratando imitar el género de humor negro que caracterizó a la película de culto Shaun of the Dead y todas las películas que la sucedieron, como la divertida Attack of the Block, la hilarante Doghouse o esas dos maravillas llamadas Arma Fatal y Bienvenidos al Fin del Mundo.
The Hatching pretende ir en esa misma línea e incluso toma elementos que hicieron grandes a esas otras películas, como por ejemplo el protagonista que regresa a un pueblo donde no le tienen en gran estima, o el dúo cómico que forman el gordo y el flaco. Sin embargo, The Hatching no resulta divertida ni entretenida, es tópica y su primera mitad resulta totalmente previsible, además de que el cocodrilo aparece poco. El humor brilla por su ausencia, y las actuaciones en general son flojas, salvándose solo la del protagonista, Andrew Lee Potts.
En la segunda mitad de película, se produce un giro de guión algo interesante, cuando descubrimos que algunas de las desapariciones no se han producido a causa del cocodrilo, sino porque dos de los carniceros del pueblo se dedican a secuestrar gente y echársela de comer a los cocodrilos. Sin embargo, de nuevo el guión vuelve a caer en la mediocridad y todo se desenvuelve de forma previsible.
Raúl Rubio Peñas
2
Una auténtica bazofia de película.
Nos encontramos ante un film británico con cocodrilo asesino de por medio, al estilo de tantos otros films como Mandíbulas. Sin embargo, lejos de tomarse en serio a sí misma, la película va por otros derroteros, tratando imitar el género de humor negro que caracterizó a la película de culto Shaun of the Dead y todas las películas que la sucedieron, como la divertida Attack of the Block, la hilarante Doghouse o esas dos maravillas llamadas Arma Fatal y Bienvenidos al Fin del Mundo.
The Hatching pretende ir en esa misma línea e incluso toma elementos que hicieron grandes a esas otras películas, como por ejemplo el protagonista que regresa a un pueblo donde no le tienen en gran estima, o el dúo cómico que forman el gordo y el flaco. Sin embargo, The Hatching no resulta divertida ni entretenida, es tópica y su primera mitad resulta totalmente previsible, además de que el cocodrilo aparece poco. El humor brilla por su ausencia, y las actuaciones en general son flojas, salvándose solo la del protagonista, Andrew Lee Potts.
En la segunda mitad de película, se produce un giro de guión algo interesante, cuando descubrimos que algunas de las desapariciones no se han producido a causa del cocodrilo, sino porque dos de los carniceros del pueblo se dedican a secuestrar gente y echársela de comer a los cocodrilos. Sin embargo, de nuevo el guión vuelve a caer en la mediocridad y todo se desenvuelve de forma previsible.
Muy decepcionante.
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