Jodorowsky buscó a dos grupos musicales para realizar la BSO de la película, uno por cada principal Casa de Dune. Pink Floyd fue elegido para representar a los Atreides y Magma para los Harkonnen.
La princesa Irulán iba a ser interpretada Amanda Lear, la amante supuestamente transexual de Dalí, quien era gran fan de Dune y de Frank Herbert.
El duque Leto Atreides iba a ser interpretado por David Carradine. En el guión de Jodorowsky, Leto es torturado por Piter de Vries para que le revele dónde han huido su mujer y su hijo. Como Leto no dice nada, Piter procede a arrancarle una extremidad tras otra, hasta que Leto queda convertido en un simple torso. Entonces Leto empezaba a reír, burlándose de sus captores porque no le sacaron ninguna confesión. El barón Harkonnen montaba en cólera y tomando unos grandes alicates arrancaba la cabeza de Leto, poniendo fin a su vida.
El aliado de los Harkonnen Piter de Vries iba a ser interpretado por Udo Kier, ahora un habitual de películas de serie B.
Para reclutar a Dalí como el emperador de la galaxia de Dune, Jodorowsky lo tuvo más difícil, ya que el pintor era de lo más extravagante y solo accedió cuando su amante, Amanda Lear, le contó que Dune era algo más que ciencia ficción barata.
Aun así, según ella, Dalí era un tanto destructivo y quería acabar con la película, por lo que comenzó a pedir todo tipo de extravagancias, como tener un helicóptero, tener un jirafa, tener un elefante o que en una de las escenas se viera su ano en el centro cuando estaba defecando, como una interpretación de que él era el centro del universo.
La última de sus extravagancias fue pedir que le pagaran una desorbitada cantidad de dinero para ser el actor mejor pagado de la historia. Como no podían hacerlo, Jodorowsky ideó pagarle 100000 dólares por minuto y se las ingenió para que el pintor no apareciera más de 5 minutos en el film.
No obstante, el emperador es un personaje crucial en la trama de Dune, por lo que Jodorowsky planeó lo siguiente: como el emperador era paranoico y tenía miedo de ser asesinados, el que interactuaría con los personaje durante toda la película sería un autómata con los rasgos de Dalí al que el emperador controlaría desde una sala de mandos, limitando las escenas del Dalí real solo a aquellas en las que aparecía en la sala de mandos. El pintor accedió, con la condición de que cuando la película acabara, el robot fuera enviado a uno de sus museos.
Jodorowsky consiguió que Orson Welles accediera a interpretar al Barón Harkonnen prometiéndole que su chef favorito permanecería en el rodaje y le cocinaría lo que él quisiera todos los días.
Jodorowsky reclutó a numerosos especialistas de cine para su película como Moebius, O`Bannon, Giger, Foss, etc. Pese a que la Dune de Jodorowsky nunca se realizó, estos profesionales pudieron plasmar sus ideas y conceptos artísticos en otras películas como Alien o Blade Runner.
Curiosidades: 9
Raúl Rubio Peñas
Paul Atreides iba a ser interpretado por Brontis, el hijo de Jodorowsky, de solo 12 años, a quien su padre puso a aprender esgrima y artes marciales con un famoso artista marcial que vivía en París.
A diferencia de en la novela, en la película Paul Atreides moriría en la última escena combatiendo a Feyd-Rautha Harkonnen, pero entonces todos los personajes leales a él como Jessica, Stilgar, Alia, etc, empezaban a hablar con su voz afirmando que todos eran Paul, y acto seguido el mundo de Dune dejaba de ser desértico y empezaban a crecer en él plantas y a nacer animales, como simbolizando que Paul se había sacrificado por dotar de vida a Dune.
El último plano de la película sería el planeta de Dune avanzando por toda la galaxia y llevando la vida allá donde iba.
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