un kaiju eiga mas bizarro de lo acostumbrado con dos monstruos prehistoricos (plesiosaurio y pterodaptilo) la trama gira mas o menos con el cliche de siempre, gente atacada por un monstruo, militares intentando destruirlo, solo que los monstruos son tan bien logrados como risibles, la mistura perfecta, donde o podemos reirnos de las batallas entre estas bestias pero a la vez podemos decir, ¨ estan bien para la epoca¨, lo cual incentiva mas al filme.
quizas un arma de doble filo sea ese final abierto en plena erupcion volcanica donde uno no sabe bien que paso con los protagonistas.... lo podes plantear de dos maneras, ¨ no siempre ganan los buenos¨, o ¨ que final de mierda¨.
punto a parte para la banda sonora, ya que no esta mal, pero no es para esta pelicula, no te pueden poner este tipo de musica en los momentos que ataca el monstruo... maten al musicalizador o alimenten a los monstruos con el.
solo la sabran disfrutar quienes gusten el kaiju eiga, al resto obviarla.
Película de aventuras y misterio con notables dosis de sátira sobre el descubrimiento de un plesiosaurio y un pterodáctilo vivientes en pleno siglo XX.
Una trama bien llevada, bien actuada (no en el caso de los extras) y finalizada con toda la exageración que contrasta con el lento transcurso de casi toda la historia, menos los minutos finales.
La música de tintes norteamericanos (estilo series policiales de la década del 70), transmite alegría, comicidad y energía, aún en las escenas más tranquilas, con baladas de buen gusto y con esencia asiática.
La fotografía es aceptable, pero el montaje y el empaste del audio, más unos incómodos silencios abruptos, inclinan la
balanza hacia abajo en una historia en que lo más esperado llega y causa pavor: las dos bestias prehistóricas.
Bestias con tortícolis y nulas articulaciones, que sobre el final se ensañan entre sí de una manera incomprensible ante la vista de la pareja estelar.
Para sumar drama a la lucha de las bestias de goma, la erupción de un volcán complica a los protagonistas pero soluciona el problema de la amenaza de las peligrosas y carnívoras bestias.
Film para dejarlo pasar sin dudarlo, excepto para acérrimos fanáticos del Kaiju Eiga.
Críticas: 3
TANO
6
Los japos, amantes absolutos del cine de monstruos gigantes desde la primera peli de Godzilla, nos traen en esta ocasión algo distinto, una de dinosaurios que permanecieron en “stand by“ hasta que reviven de pronto...
La peli está bien grabada, tiene buen presupuesto y buenos efectos especiales, en esta ocasión no de edificios destruyéndose, sino más bien de terremotos y otros desastres naturales.
Los monstruos no son lo mejor del mundo, no salen mucho y te dejan con ganas de más, pero al mismo tiempo la peli consigue mantener el misterio bastante rato hasta que aparecen, y hay más muertes y sangre de lo que uno está acostumbrado a ver en el cine de “kaijus“.
Eso sí, si hay algo insoportable, es la banda sonora. Que estés viendo escenas de destrucción mientras suena ese rock setentero, no pega nada. Y que conste, que la música es bastante buena... pero no para esta peli.
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