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Me lo he pasado pipa con esta!!! Es un tokusatsu que de alguna manera resulta una idea seminal en el subgénero que después crearía el dibujante Shotaro Ishinomori: el sentai. Y es que los misterianos tienen un aspecto que los que hemos crecido con Bioman, Ultraman o Winspector asociríamos a los buenos: se parecen realmente a los Power Rangers y compañía.

Además tenemos todo lo que se le puede pedir a un tokusatsu: batallas con vehículos futuristas de juguete, fuegos artificiales, humanos traidores (?), un monstruo gigante, ciudades destruídas, uso y abuso del Technicolor (o el proceso que sea) e incluso un subtexto crítico, ya que muchos especialistas identifican a los misterianos con los marines instalados en bases dentro de territorio japonés (recordemos que las tropas de ocipación se retiraron en 1952, pero las bases siguen allí, en Okinawa). Así y todo los americanos son tratados como aliados en esta peli.

Entre los defectos, que los tiene, algunos gazapos importantes (un americano que alterna frases en japonés e inglés sin ninguna lógica, el sombrero que le aparece mágicamente al héroe en la batalla final) y unas escenas de batalla que denotan que este es un tokusatsu primerizo: si bien están conseguidas, y más para la época, resultan lentas y repetitivas. Las interpretaciónes son terribles, pero esto en los tokusatsu es regla general (excepto en casos como la primera de Godzilla, donde algunos intérpretes bordan sus papeles).

Con todo, un festín para los frikis del tokusatsu y mundillo otaku (aficionados a todo lo japonés empezando por el manga) que incluso con sus graves errores se deja querer. Y además tiene secuela!!!

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