Se consideró para el papel principal a Fernando de Mora y Aragón, pero Fernán Gómez se negó rotundamente.
El aún no resuelto (y probablemente nunca lo será) Crimen de Mazarrón fue una de las muchas comidillas del diario El Caso: dos hermanos aparecieron muertos en una playa de este pueblo murciano con una botella y tres copas de champán como únicos elementos en la escena del crimen.
Luis García Berlanga le comentó una hipótesis que se había inventado al actor y guionista Pedro Beltrán, que escribió una historia a partir de ello y se la ofreció a Fernando Fernán Gómez para que la dirigiera.
A los jefes de la mítica Ízaro Films, que producía la película, no les gustó nada lo que vieron, así que la archivaron como relleno de programa doble, como pasaba muy frecuentemente en el mercado películas de serie B de todo el mundo en ese tiempo.
Fue en esa tesitura que se estrenó la película en 1969, 5 años después del rodaje. Fue en una de estas sesiones dobles que el crítico y cineasta Jesús García de Dueñas la descubrió y publicó una muy elogiosa crítica en la contestataria (para los estandares fachas) revista Triunfo. Muchos jóvenes críticos y realizadores acudieron en masa a verla y el boca-oreja creó cierto culto en torno a ella.
En 1996, se cumplían 100 años de cine español, y críticos y profesionales especializados eligieron las 10 mejores películas españolas hasta esa feha; ¨El Extraño Viaje¨ quedó en 7º lugar.
La película tuvo un escasísimo presupuesto, y Carlos Larrañaga, el protagonista, se ofreció a llevar a compañeros de reparto y miembros del equipo en su própio coche hasta los lugares de rodaje.
La madre de Fernando Fernán Gómez, Carola Fernán Gómez, hace varios cameos como una de las ancianas chismosas del pueblo.
Se rodó en Loeches (Madrid) y Santa Pola (Alicante).
¨El Extraño Viaje¨ era el título provisional, mientras duraba el rodaje, a la espera de que a alguien se le ocurriera otro título mejor. A la productora se le ocurrió ¨El Crimen de Mazarrón¨, ya que estaba basado en un hecho real ocurrido en Mazarrón (Murcia), aunque la película no fue rodada allí.
El Ministerio de Información, que se ocupaba del cine, era también Ministerio de Turismo, y como en la playa de Mazarrón una urbanizadora había empezado a construir, prohibieron el título, porque si una película se llama ¨El crimen de Mazarrón¨, el turismo no querría acudir.
Según declaró Fernán Gómez: “Diez años después, y a pesar de la prohibición del título, seguía sin acudir el turismo”.
Jesús Franco, el controvertido y excéntrico director de cine de terror y erótico, hacía el papel de Venancio, uno de los protagonistas.
La chica despampanante del pueblo, Angelines, era una actriz llamada Sara Lezana, que posteriormente fundaria una escuela de baile flamenco, y actuaría en algún film de destape...en la película contaba con tan sólo 16 años...
Curiosidades: 5
bigladiesman
La tremenda reivindicación de la película a partir de 1969 pilló por sorpresa a Fernando Fernán Gómez, que de tantas cosas malas que había oído sobre la misma hasta entonces había llegado a renegar de ella, considerándola un proyecto fracasado y olvidable.
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