The Lodge cuenta cómo Richard y Grace acaban de empezar su relación. Richard decide pasar las Navidades con Grace y sus dos hijos en una cabaña remota, para ver si consigue que por fin la acepten. Sin embargo ocurren una serie de sucesos extraños, que amenazan con traer de vuelta el pasado de Grace…

Con motivo de su pase en el Festival de Sitges 2019, hemos podido entrevistar a sus directores:

La casa es una pasada. Existe supongo…

Sí. Siempre intentamos filmar en localizaciones reales en vez de en estudios porque es un valor añadido. Es un error usar una casa cliché en este tipo de películas y una localización real aporta un personaje más a la película. Nos enamoramos del ático (que no estaba en el guión) y enseguida empezamos a pensar “¿quién podría jugar ahí?”

¿Dónde está esta casa?

En Montreal (Canadá).

Algunos momentos de la película pueden tener varias lecturas…

Sí. Hay cosas que pueden tener dos lecturas, la real y la que la persona está fingiendo… Es muy difícil hablar de la película sin hacer spoilers (risas). A veces decimos que rodar una película es como caminar sobre hielo: nunca sabes cuándo se va a romper.

Otro mensaje de la peli es que el fanatismo tiene un precio…

Efectivamente. No es una crítica a la religión, como algunos piensan, sino al fanatismo religioso, cuando piensas que la religión te dice cosas como “no vales nada” o “eres un pecador”. Pensamos que en vez de al cielo acabas yendo al infierno por cómo actúas.

Las actuaciones que más impactan de la peli son las de la niña (Lia McHugh) y la de Grace (Riley Keough), estupendas. La niña es una llorona fantástica.

(risas) Sí. Nos sorprendió que supiera que lo hacía tan bien que quería hacerlo todo el tiempo y tuvimos que pararle los pies. De hecho luchamos por tenerla en la película. No era una estrella conocida, pero ahora va a salir con Angelina Jolie en la próxima película de Marvel! Es una niña muy inteligente y con mucho talento y creímos en ella desde el principio.

¿Fue igual con Grace (Riley Keough)?

Sí. Tiene gracia porque le hicimos una audición a una actriz muy famosa (cuyo nombre no podemos decir) que se había preparado mucho el papel y tenía muchas ganas de hacerlo y justo después conocimos a Riley, que fue ella misma, había venido sin prepararse nada y nos encantó y sentimos que teníamos que darle el papel de Grace, a pesar de lo preparada que venía la otra actriz.

¿Era algún miembro del reparto famoso? Porque creo que no…

Jaeden (el niño) salió en las dos partes de “It” y Riley en el remake de “Mad Max” pero, no eran muy famosos. De todas formas elegimos al reparto por las vibraciones que nos daban, no por su talento o fama pasados.

Estoy seguro de una de las razones por las que fichasteis a Riley fue porque transmite mucho sólo con una mirada…

Es una gran actriz. La verdad es que nosotros tampoco íbamos preparados (risas), no hablamos mucho del papel, sino de cosas personales. Ella se mostró muy frágil y muy honesta. Una de los aspectos más importantes de rodar una película es que puedas confiar en tu equipo, porque sino lo puedes pasar muy mal.

Convencernos para ir a ver la película.

(risas) Siempre que hacemos cine hacemos una película como las que nos gusta ver: perturbadora, que asuste y que te puede hacer daño. Ese sería el gancho: un viaje emocionante que puede resultar peligroso.

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