A todos nos gusta corrernos una buena juerga, lamentablemente algunas de ellas pueden acabar como el Rosario de la Aurora. Más vale prevenir que curar, así que vamos a dar un repaso a algunas de las fiestas más sonadas del cine de terror, que han tenido un desenlace bastante fatídico para sus protagonistas. Vayan tomando nota para que no os ocurra lo mismo en vuestro próximo evento, ya que cada título nos lanza una reflexión muy particular sobre el tema.





CARRIE (1976)

Las fiestas de fin de curso son muy habituales entre los estudiantes, y en este mismo listado vamos a encontrar algunos ejemplos. Sin duda, una de las fiestas más sonadas del cine de terror de este estilo, es la protagonizada por la atormentada Carrie White.

Eso de meterse con los compañeros de clase está fatal y todo el mundo tiene un límite. Los poderes telequinéticos de la joven, provocarán una sangrienta y amarga velada. Se aconseja ir a este tipo de bailes con algún superhéroe o superheroína, por si se arma la marimorena, a menos claro, que tu tutor sea el ‘Profesor Xavier’.




PROM NIGHT: NOCHE DE GRADUACIÓN (1980)

Seguimos con los bailes de graduación. Otra cosa que puede ocurrir en una fiesta de este estilo, es que en ella se haya colado un asesino. Lo más prudente en estos casos, es que vayamos comprobando la lista de asistentes. Si observamos que esta se va reduciendo progresivamente, más vale que se nos ponga la mosca detrás de la oreja. Es muy posible que nuestros compañeros hayan sido asesinados. No hay que esperar nunca al momento de la coronación de turno para darnos cuenta. Puede que la corona nunca llegue a reposar en nuestras cabezas, o no de la forma que desearíamos.




HELLRAISER 3: EL INFIERNO EN LA TIERRA (1992)

Y ahora damos paso a una fiesta más adulta. La saga ‘Hellraiser’ no es muy representativa en este aspecto, a menos que os vaya el sadomaso pero concretamente en la tercera entrega, ‘Pinhead’ nos monta un buen jolgorio en las entrañas de una discoteca supermoderna. Ganchos y cadenas empiezan a surgir de todos lados, los cubitos de los cubatas se convierten en estalactitas asesinas, y el DJ de turno comienza a lanzar su repertorio contra tu cara. La verdad es que en este caso sobrevivir es algo muy complicado, dado la talla del personaje malvado de turno. Tener a mano ‘La Configuración del Lamento’ nos vendrá muy bien para escapar de cualquier evento con cenobitas infiltrados.




SCREAM (1996)

Volvemos al mundo adolescente. Normalmente si hay un asesino suelto y hay toque de queda, lo mejor es curarse en salud y celebrar una fiesta en casa. Si hay mucha gente alrededor y demás, nos sentiremos más seguros a la vez que nos encontramos reforzados por nuestros amigos más próximos. Si algunas cosas nos dejaron claras en esta película, es que no hay que irse a buscar cervezas al garaje y abrirse de piernas para tu novio. El mejor consejo sería no celebrar la fiesta, pero si lo haces, asegúrate de que cuando todo termina no queda nadie en la casa. A ser posible, prepara algunas trampas a lo Nancy Thompson, por si alguien aparece. Sin duda Wes Craven preparaba mejor a sus heroínas en los ochenta.




WISHMASTER (1997)

El mundo del arte puede llevarnos hasta fiestas de lo más refinadas. Si nuestro anfitrión es Robert ‘Freddy Krueger’ Englund y nuestro portero Tony ‘Candyman’ Todd, podemos pensar que nada puede ir mal, pero si un genio con muy mala baba se nos infiltra en el sarao, lo vamos a tener muy complicado, como a la gente le dé por comenzar a pedirle deseos a diestro y siniestro. Nuestros invitados vomitarán bichos, se transformarán en engendros, y la decoración cobrará vida tornándose muy agresiva. Mucho mal rollo. Lo mejor para sobrevivir es no desear nada, algo que los asiáticos saben muy bien.




BLADE (1998)

Los vampiros pueden ser seductores y elegantes, aunque también muy cabrones. Desconfía siempre de las fiestas a las que te invitan, por si están organizadas por algunos de estos chupópteros. El fiestorro que se montan en ‘Blade’ es espectacular. Nadie puede olvidar esa música pegadiza mientras todo el mundo baila, y menos aún cuando los aspersores contra incendios comienzan a emanar sangre encima de los asistentes. Una juerga de esas que hacen época, si logras salir vivo de ella. Procurad llevar una estaca escondida en los pantalones, o alguna aplicación de rayos ultravioleta en el smartphone.




CHERRY FALLS (2000)

La mayoría de bailes y fiestas cuando uno está soltero, se organizan para ligar o pillar cacho. A veces se dan demasiados rodeos para estas cosas, cuando tenemos una alternativa viable mucho más completa: organizar una buena orgía. Los estudiantes de ‘Cherry Falls’, son los que mejor se lo montan en este aspecto. Lo malo es que si se cuela un asesino en la velada y hay que salir por pies, tenemos que hacerlo totalmente desnudos, pero bueno, lo importante es sobrevivir. Nunca hay que entrar en pánico si nos encontramos celebrando una orgía. En esta ocasión, el consejo para evitar un desastre, es mantener el aforo correcto de la sala o habitación donde se vaya a llevar a cabo la bacanal, procurar tener las salidas despejadas, por si hay que huir, y vigilar siempre en que no os abran un nuevo agujero donde antes no lo tenían.




GHOST SHIP: BARCO FANTASMA (2002)

Un baile de gala en alta mar suena muy relajante. El problema puede venir si las instalaciones del barco, no cumplen todas las normas de seguridad para mantener a la gente en piezas y peor aún, si estas normas son violadas por alguna entidad sobrenatural con muy mala leche. La secuencia de apertura de esta película es magistral y, desde luego, les corta literalmente el rollo a todos los asistentes. Lo mejor es pasar de bailes e irte a pegar el lote al camarote más cercano con tu pareja. Así te evitas sustos desagradables. Además, el mar nunca acompaña bien para celebrar una fiesta. Piensa en el ‘Titanic’, ‘El Triángulo de las Bermudas’, etcétera.




SWEATSHOP (2009)

Las ‘raves’ o fiestas clandestinas siempre son sinónimo de desastres. Si encima hay un loco suelto con un mazo gigante que va reventando cabezas a su paso, lo tenemos bastante chungo. Aunque se trata de un título bastante desconocido y menor, su asesino es la caña, al igual que las escenas finales donde el jolgorio cobra protagonismo, y la masacre se convierte en una auténtica carnicería. Nuestro consejo es que si cuatro mataos quieren arrastrarte a una ‘rave’ de estas, más vale que no vayas o te mantengas lo más cerca posible de la salida, por si acaso.




CABIN FEVER 2 (2009)

Terminamos este especial de la mano de la secuela de ‘Cabin Fever’, donde un baile de primavera se convierte en una auténtica pesadilla para sus protagonistas. En esta ocasión, el responsable del horror desatado es un virus totalmente asqueroso, que devora la carne de sus víctimas y les hace escupir sangre, dejándolo todo asqueroso y peor que un matadero. Aquí el consejo está clarísimo. No hay que beber nunca agua en una fiesta. También hay que vigilar con los desvirgamientos de turno y las chicas absteneos de gorrear del brillo de labios de vuestras amigas por si acaso.




Adolescentes con poderes, asesinos sangrientos, fenómenos sobrenaturales, vampiros, demonios y hasta virus contagiosos son algunas de las cosas que pueden arruinar una buena fiesta. Nunca se sabe lo que puede pasar, así que ser precavido en cualquier situación siempre vale por dos.