Belalugosi se convierte en el tercer ganador de nuestro concurso de críticas, que en esta ronda repercutían en El Santuario. Enhorabuena por ganar una abandoestrella además de 30€ en películas. Gracias a todos en participar y en breve anunciamos nueva película.

Belalugosi (5 pts.): El Santuario es la nueva propuesta del Señor Cameron, una cinta en la que supongo que todo lo que se pretende es que tenga un buen tirón comercial, para recaudar lo suficiente para afrontar un nuevo proyecto de más envergadura. Un producto alimenticio, una película de transición, pensará el señor Cameron, y así de paso le saco un buen dinerito a los espectadores, que irán a verla expectantes ante mis últimos logros.

Ya metiéndonos en la película en si misma, hay que decir que es floja, predecible, y bastante aburrida. El guión flojea en cuanto a que una idea interesante aparentemente, como es el descubrimiento de una de las mayores cuevas del mundo que deciden investigar, es desaprovechada totalmente para mostrarnos los percances que sufren el grupo de investigadores de una forma harto aburrida.

De los actores es casi mejor no comentar nada, simplemente decir que sus actuaciones son mediocres, aunque tampoco hay grandes oportunidades para lucirse en una cinta de estas características.

Lo mejor de la película son las escasas secuencia exteriores que son preciosas (hay que reconocerlo). Una vez dentro los protagonistas pasarán por infinidad de grutas, cuevas, galerías estrechas y sobre todo agua, mucha agua. Y yo me pregunto ¿en una película de estas características hacía falta el dichoso 3D?. La respuesta es no, claro que no. Explotar y utilizar esta tecnología para secuencias oscuras, donde la escenografía brilla por su ausencia y sólo podemos ver paredes de piedra donde la profundidad de campo es casi nula, sirve para no sacar provecho ninguno, ya esta bien de que nos tomen el pelo a los espectadores con el dichoso 3D. Mejor se preocupan en escribir buenos guiones, que de eso en Hollywood andan bastante escasos en los últimos años.

La sensación final que te queda es la de estar viendo un telefilme de sobremesa, una película totalmente olvidable y que pasará con más pena que gloria en la carrera del señor Cameron. Como decíamos al principio de la crítica una producción de encargo para recaudar unos cuantos $. El Santuario si fuera un barco estará tocado y casi hundido.