En un pueblo de la Sierra de Madrid, Bego (Gracia Olayo) y Agustín (Antonio Resines) viven una jubilación tranquila entre recetas, su huerto, la pelu y los juegos de cartas con los amigos. Pero desde que sus hijos, Miguel (Alberto Olmo) y Carla (Clara Lago), se independizaron para irse a vivir a la ciudad, el síndrome del nido vacío parece haberse instalado en el matrimonio, y empiezan a comprobar, con + tristeza, que sus hijos se han empezado a olvidar de ellos. Para colmo, los muy sinvergüenzas no aparecen a la comida que Bego había preparado por el cumple de su hijo, y acto seguido anuncian que no irán a casa por Navidad, lo que lleva a sus padres a idear un arriesgado plan para que vuelvan a su lado: fingirán que han ganado la lotería y que son multimillonarios.
Sinopsis:
En un pueblo de la Sierra de Madrid, Bego (Gracia Olayo) y Agustín (Antonio Resines) viven una jubilación tranquila entre recetas, su huerto, la pelu y los juegos de cartas con los amigos. Pero desde que sus hijos, Miguel (Alberto Olmo) y Carla (Clara Lago), se independizaron para irse a vivir a la ciudad, el síndrome del nido vacío parece haberse instalado en el matrimonio, y empiezan a comprobar, con + tristeza, que sus hijos se han empezado a olvidar de ellos. Para colmo, los muy sinvergüenzas no aparecen a la comida que Bego había preparado por el cumple de su hijo, y acto seguido anuncian que no irán a casa por Navidad, lo que lleva a sus padres a idear un arriesgado plan para que vuelvan a su lado: fingirán que han ganado la lotería y que son multimillonarios.
Susan Béjar lleva esta historia al terreno español con un remake que cumple, sin mucho brillo pero con oficio. Aquí el problema no es que los hijos no se vayan de casa, sino que se han ido demasiado rápido, y con eso arranca un lío que sirve como excusa para el lucimiento de Antonio Resines y Mariola Olayo, quienes están en su salsa.
La película, aunque algo desordenada y predecible, tiene momentos muy divertidos gracias a un reparto que suma... (seguir leyendo)
ArtClown
Susan Béjar lleva esta historia al terreno español con un remake que cumple, sin mucho brillo pero con oficio. Aquí el problema no es que los hijos no se vayan de casa, sino que se han ido demasiado rápido, y con eso arranca un lío que sirve como excusa para el lucimiento de Antonio Resines y Mariola Olayo, quienes están en su salsa.
La película, aunque algo desordenada y predecible, tiene momentos muy divertidos gracias a un reparto que suma... (seguir leyendo)