Oscar, un niño de diez años, se encuentra en el hospital infantil. Ni sus padres ni los médicos se atreven a decirle la verdad sobre su enfermedad. Sólo Rosa, la repartidora de pizzas, con todos sus bruscos modales, conecta con él sin distancias. Rosa propone a Oscar un juego para entretenerle: hacer como si cada día que pasa contara por diez años. Buena manera de darle una larga vida en unos pocos + días... Además, para conseguir que hable de sí mismo, le anima a que escriba a Dios. En sus cartas, Oscar confiesa sus alegrías y sus penas, sus miedos, su primer amor, sus sensaciones ante el paso del tiempo… Así, entre Oscar y Rose se va fraguando una amistad muy particular, sin que ninguno de los dos pueda imaginar hasta qué punto marcará su destino.
Sinopsis:
Oscar, un niño de diez años, se encuentra en el hospital infantil. Ni sus padres ni los médicos se atreven a decirle la verdad sobre su enfermedad. Sólo Rosa, la repartidora de pizzas, con todos sus bruscos modales, conecta con él sin distancias. Rosa propone a Oscar un juego para entretenerle: hacer como si cada día que pasa contara por diez años. Buena manera de darle una larga vida en unos pocos + días... Además, para conseguir que hable de sí mismo, le anima a que escriba a Dios. En sus cartas, Oscar confiesa sus alegrías y sus penas, sus miedos, su primer amor, sus sensaciones ante el paso del tiempo… Así, entre Oscar y Rose se va fraguando una amistad muy particular, sin que ninguno de los dos pueda imaginar hasta qué punto marcará su destino.
Hermosa pelicula, te hace reflexionar y ver la vida desde otra perspectiva, además de ser muy perspicaz y tener un humor muy fino.
Sin duda una producción imperdible para aquellos amantes del cine con... (seguir leyendo)
¿Qué me das por haberte avisado? - Palomitas, tenemos prohibido darte de comer, has venido a adelgazar.
¿No podemos llegar a un acuerdo? Podría proponerle un trato, usted nos trae todos los días sus pizzas y antes de marcharse pasa un rato con Oscar. -Es repugnante -¿Repugnante lo que le propongo? o ¿repugnante que lo rechace?
Tengo tanta hambre que me he comido los supositorios
A Dios, le puedes pedir una cosa por día. Pero solo una. -Menudo inútil. Aladin le pedía tres deseos al genio de la lampara. -¿Un deseo por día no es mejor que tres en una vida?
¿¡Por qué tu Dios permite esto!? Las enfermedades. O es malvado o no es muy listo. -La enfermedad es como la muerte, es un echo, no es un castigo. -Tu no estas enferma.
Creía que no eras mentirosa. ¿Por qué me hablas de Dios? Mis padres me mintieron con lo de Papá Noel, y con una basta, gracias, no volveré a caer.
Tiene la cabeza más grande. Parece ser que tiene agua dentro. -Que lástima. Si fuera cerebro habría echo grandes cosas.
¿Y qué le escribo? -Todo lo que piensas. Los pensamientos no dichos son pensamientos que pesan, que se incrustan, que entorpecen y quitan sitio a los nuevos. Seras un vertedero de pensamientos si no hablas de ellos.
dennysecuador
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